cap 8

3K 249 25
                                    

Muchas veces la vida no resulta como queremos, se va en un pestañar de ojos..

- ¡Steve apúrate!

El tiempo también en un enemigo en común que siempre se pasa presente con mano de la muerte.

- cálmate Tony - decía entre risas el rubio.

Pero el destino es muchas veces más piadoso que ambas cosas y algunas veces da la oportunidad a almas que la vida dejo con un final inconcluso y trágico.

- si me pierdo los fuegos artificiales va a ser tu culpa.

Era cuatro de julio, Tony había conocido a Steve en la escuela un día como este cuando se vieron fue una conexión inmediata aún que Tony no la sintió en su totalidad.

Ambos se sentaron el una manta en el pasto mientras miraban el cielo estrellado.

- no te lo he dicho pero hoy luces muy lindo - fue Steve quien quería oírse algo casual.

Tony le miró extrañado y sonrió sonrojado pues vestía como siempre con la única diferencia que había olvidado su chaqueta.

- creo que en los partidos de fútbol te golpearon la cabeza Stive... ¿No vas a ir con Sharon? Escuché que te gustaba.

Muchas veces las vidas pasadas te guían con dejavu para no cometer los mismos errores, no son tan claros pero una sensación te indica lo correcto.

- quien te dijo eso estaba completamente mal.

- ¿Enserio? - le desvío la mirada por un segundo.

- su por qué a mí me gusta alguien más.

Con esto el corazón de Tony tembló un poco.

- ¿Lo conozco?

- yo diría que muy bien.

- ¿Cómo es? - pregunto Tony y tembló a la par por la noche helada, Steve quien traía su chaqueta se la quito y puso en los hombros de Tony.

- una persona encantadora y muy inteligente de pelos castaños junto con lindos ojos aún que al principio de conocerlo no vas a encontrar muchos sentimientos.

- vaya te encontraste la lotería - dijo ignorando todo mientras se metía aún más en la chaqueta.

- si pero el todavía no lo sabe.

Cuando iba a seguir una explosión lo detuvo, los fuegos artificiales comenzaron y ambos temblaron al ver el cambio algo repentino de las luces.

Steve tomo la mano te Tony, fue una sensación tan familiar y hermosa a la vez igual que todo de Anthony Collins.

No se pudo resistir y aún con el miedo de el rechazó se acercó a Tony quien estaba distraído mirando a el cielo y lo beso.

Ninguno de los dos se apartó se sintieron tan bien como si después de años pudieran encontrar aquello que perdieron.

Al separarse un hilo de saliva unía aún ambas bocas y se encontraban los dos sonrojados.

- Tony te amo más que a nada en este mundo.

Tony sintió algo en su garganta, desde que era pequeño había sido fatal para poder expresar sus sentimientos pero era como si fuera una prohibida que siempre se atascaba en su garganta para no salir.

- yo también te amo - fue como si le quitarán un peso de encima, no lo decía ni por compromiso ni por obligación fue por qué sentía por todo el cuerpo ese sentimiento.

Se hicieron pareja días después y a parecer de sus amigos eran bastantes melosos aún que a ellos no les importaba.

En cada cita Steve le llevaba algún dulce o postre a Tony gesto que fue único para este aún que nunca llegó una flor pues Tony era alérgico a estas.

Fue toda una aventura cuando ambos se mudaron juntos pero sintieron que era lo correcto, poco les importo el mundo de afuera y en uno de los primeros celos de Steve este marco a Tony poco tiempo después ambos se casaron convirtiéndolo en Anthony Grant Collins.

Una ceremonia pequeña pero con las personas indicadas, toda la iglesia celebró cuando escucharon el acepto de las dos partes.

Tony insistió en que quería comprar una casa y así lo hicieron aún sin saber que pronto ya no serían solo dos.

Tony odiaba los hospitales siempre les tuvo miedo pero cuando tuvo que ir cuando Steve se preocupo por su estado, últimamente le daban asco varias comidas y siempre vomitaba.

Así que al enterarse de el por qué sonrió sin esperarlo.

Ese año Steve recibió un regalo extra.

- Tony cariño no es mi cumpleaños, nuestro aniversario o navidad ¿Que estamos celebrando?

- cállate que arruinas mi idea y habré la caja.

Steve le sonrió y después de darle un beso en la frente abrió la caja, en esta había una prueba de embarazo en positivo.

- ¡Feliz día de el padre!

Steve abrió los ojos y levantó a Tony por los aires diciéndole que lo había convertido en la persona más feliz de el planeta.

Meses después los mellizos Peter y Harley nacieron dándole aún más vida a la casa Collins.

Dos años después tuvieron a Morgan y con ella eran dos alfas y un Omega exaltando a ambos padres.

Entonces cuando conoces a tu alma gemela tiene que ser fácil no? Por qué cuando encontrarás a tu alma gemela que también es el chico con que siempre soñaste todo sería mágico y fácil... El te miraría con devoción entre muchas cosas mas y tendrían tres hijos un perro, gatos y al final morir a los 90 años abrazándote a el susurrando un último te amó... Verdad?

Pues todo depende de el destino y la resurrección de este, algunos finales siempre vas a ser felices mientras que otros terminan de forma trágica y rápida por qué les falta aprender.

- Peter, Harley Morgan bajen a comer

- todo es tu culpa, si fueras ocupado un preserva...

Este fue interrumpido por Steve.

- me gusta nuestra familia y se que a ti también Anthony así que no hablemos de que es culpa - dijo mientras le abrazaba.

- que bueno que lo mires así por qué adivina quién se le olvidó tomar pastillas para el siguiente día.

Steve negó con gracia y emocionado.

- si es contigo puedo afrontar todo el caos familiar todo el día.

Por qué al final los destinados siempre van a encontrarse en otra vida y los asuntos de una quedan como pendientes de la otra.

Fin.

.
.
.
.
.

Ahora sí doy por terminado el fanfic con este epílogo pero tranquilos pues si aún quieren los finales alternativos con gusto los puedo escribir.

¿Que les pareció?

Sin más adiós mis amores.

AmistadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora