Cristales

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--¡Hey manotas! ¡Por aquí!-- Grito una chica de trenzas azules brincando risueña.

La chica comenzó a correr alegremente mientras evadía a sus persecutores, atravesando calles y pasillos, saltando cestos de basura y subiendo escaleras.

--¿Es todo lo que tienen tortugas?-- Preguntó a la chica de pelo rosado que la perseguía

--¡Jinx!--Grito la de pelo rosa mirándola desde abajo, siendo levemente deslumbrada por el brillo el los altos edificios de Piltover --¡Baja en este instante!, ¡Estás arrestada! --La chica de trenzas solo saco la lengua con diversión antes de volver a huir --pequeña hija de...--

--jajajajaja, estás tortugas, ¿Hasta cuándo dejarán de perseguirme?--Rio la peliazulada, al menos hasta que una bala perforó la bolsa que traía, regando todo su contenido --No mis bebés --se enfado la chica al ver todas sus balas tiradas--

--arriba las manos Jinx, se acabó el juego--Hablo una mujer de pelo largo y vestimenta típica con una falda corta y apuntando a su contraria con un rifle.

--¿Encerio?--Pregunto con una sonrisa que expresaba total locura--nos vemos luego Caitlyn--rio la joven antes de tirarse del edificio

--mierda-- exclamó la otra mientras corría al final del edificio solo para ver a la de trenzas aterrizar en la máquina de corky--por los Kindred, ¿Acaso está loca es inmortal?--se pregunto la joven antes de retirarse.

Jinx se sujetaba fuerte de la máquina voladora, observando al conductor asombrado.

--Hola Corky--

-- Jinx, ¿Que haces aquí?, ¡Baja de mi nave!--Demando el hombre

Jinx sonrió y se puso de pie en la misma sin perder el equilibrio, al menos hasta ver otra máquina que los perseguía.

--¡Qué rayos intentas hacer suicida psicópata!-- grito el piloto.

--¡Jinx baja de esa nave!-- se escuchó el grito de Heimer desde la máquina.

La persecución no duró mucho, pues al cruzar entre dos edificios, una red atrapó a la de trenzas mientras Corky se hiba sin mirar atrás.

--Al fin te tengo-- dijo el pequeño hombre.

--Diviertete enano, no pasará una segunda vez--

Mientras esto sucedía, en lo profundo de los bosques de Ionia (no sé si es Jonia o Ionia, alguien explíqueme por favor T-T), los pequeños animales observaban curiosos un fragmento de cristal que brillaba en medio de la yerba, uno de ellos se acercó para olfatearlo, sin embargo, cuando su nariz tocó el objeto, una luz morada destello del objeto, así fue que pasada una hora, un hombre caminaba por ese bosque cuando algo le llamo la atención, un animal muerto que estaba a punto de pisar, no le habría dado importancia hasta que vio un destello de luz púrpura, la curiosidad pudo más que el chico así que se acercó notando los pequeños animales tirados muertos alrededor de un hermoso cristal que brillaba entre azul y morado, contorneado con negro.

--Esto puede interesarle al señor Zed o a Kayn-- dijo para si mismo con una sonrisa, se agachó para recogerlo pero al tocarlo...
Una explocion de energía salió del bosque alertando a la gente que pacífica cultivava su tierra, las personas tomaron las pocas armas que tenían y entraron a investigar, lo que vieron los dejo sin aliento, animales muertos junto a un hombre de la orden de las sombras en el mismo estado, todos formando un círculo dejando un hueco que pasto quemado.

--¿Qué-- que sucedió?-- pregunto uno de ellos.

--No se, pero esto no pinta nada bueno-- contesto otro.

FragmentadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora