0. LEGADO

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La luz lastimó mis ojos un poco y luego todo estaba oscuro.

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Las personas podían hacer lo que fuera con dinero; el mundo se regía de esa manera debido a la existencia de algo que podía ser llamado como una casta o algo parecido a una jerarquía.

Los "rangos" eran otorgados cuando alguien nacía. Si eras hijo de alguien importante, ya tenías al menos el 50% de este rango del padre o madre dependiendo de quien tuviera el mayor nivel (el maximo por obviedad es del 100%)

Aumentar el porcentaje del "rango" dependia de lo que los padres estuvieran dispuestos a pagar. Pero sólo se podía llegar a pagar hasta un 90% para mantener al menos un orden en la sociedad y que ésta no enloqueciera intentando pagar cantidades exorbitantes. Al crecer dependería de los logros o influencias que obtuvieran , el rango aumentaría. Muy pocos habían alcanzado un rango del 100% algo que era muy difícil pero no imposible.

Esto no era algo que se tomara a la ligera en la sociedad ya que dependiendo del grado que tuvieran en el porcentaje de rango determinaba quienes podían ser sus amigos o que trabajos podian tener.

Sin embargo el rango sólo se podía saber si se preguntaba por éste; una persona con un rango muy alto podía hablar con alguien con un rango muy poco elevado y nadie diría nada, no al menos hasta que se supiera su "valor"

Bastaba con enseñar una credencial que mencionaba los datos del dueño para demostrar cual era su rango.
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Pero había algo más que sólo podían hacer unas cuántas personas que pertenecían a un grupo de élite:

Podían comprar a las personas

Incluso podían elevar el rango de éstas personas si así lo querían.

Esto generalmente sucedía cuando alguien quería o necesitaba de una persona para hacer determinado trabajo y ésta se negaba, para evitar perder tiempo podían comprar a la persona y ésta prácticamente sería su propiedad pero no se les trataba mal; era todo lo contrario ya que se les mantenía en optimas condiciones para que pudieran realizar su trabajo de la mejor manera posible y en el mejor de los casos su rango solía elevarse. Pero en muchos casos muchos miembros solían comprar personas al caer enamorados o por puro capricho, se sabía que a las personas que compraban sólo se les utilizaban para hacerles compañía ya que como se había mencionado debían ser tratados bien o la ley dictaba que si se les maltrataba en aspectos físicos y emocionales y había evidencia de eso la sanción podía ser desde una multa casi extravagante hasta la libertad de la persona.

A simple vista parecía que no pasaba mucho si alguien compraba a una persona pero ¿A quién le gustaría saber de repente que le pertenece a alguien y que ahora tienes que hacer lo que te diga?

A pesar de todo lo anteriormente explicado la mayoría de las personas tenian un grado de jerarquía promedio (50%-60%) así que no pasaba nada fuera de lo normal a menos de que en el peor de los casos llamaras la atención de un miembro de élite.

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Todoroki Shoto.

Sólo bastaba con pronunciar ese nombre para que las personas cambiaran su actitud y comenzarán a tratarlo de una manera diferente; era obvio que el hijo de un pez gordo podía heredar todo lo que su padre tenía.

Su grado de jerarquía era algo alto a pesar de su edad. Sólo tenía que mostrar su identificación con un rango de 75% y lo podía tener todo o casi todo.

-Señorito Todoroki no debería estar a fuera a estas horas, es hora de tomar su desayuno necesita estar en buenas condiciones para ir a la escuela y ser el mejor- una señora había salido al jardín con la intención de llevar a susodicho al comedor donde solía tomar sus alimentos en completa soledad desde que recordaba. Al principio estaba acostumbrado a estar con su madre ya que casi no podía convivir con sus otros hermanos sólo eran él y ella pero después del accidente que quedó grabado en su lado izquierdo simplemente se sumió en la soledad. Sin embargo se acostumbró y como si fuera algo normal aceptó el destino que su padre tenía para él.

Después de tomar sus alimentos y de haberse cambiado para ir a la escuela se subió al auto que lo llevaría a su destino, la nueva escuela que su padre había elegido; no le importaba mucho lo que hiciera con su vida siempre mostraba un rostro inexpresivo y decía "si" por que no había mucho que le interesara. Su vida consistía en ir a la escuela y después ir al trabajo que tenía en la empresa de su padre quien quería que comenzara con el "negocio familiar" lo antes posible, Enji tenía muy poca paciencia.

El recorrido tomó 15 minutos en los que observó por la ventana varios árboles y algunos alumnos dirigirse a la escuela, parecían tan normales como si no hubiera distinción por algún tipo de rango o jerarquía. Había escuchado de parte de su servidumbre que la escuela a la que asistiría los rangos no importaban demasiado, el ingreso podía ser por medio de un examen o por una recomendación tal como era su situación, en todo caso eso no tenía importancia el tenía que ser el mejor por el simple hecho de ser el hijo de un hombre cuyo rango era del 97%.

El automóvil se detuvo y el hombre que lo manejaba se bajó para abrir su puerta tal como lo había hecho inumerables veces en el pasado, el mitad albino bajó y el aire a césped recién cortado fue lo primero que inundó a su sentido del olfato puesto que había algunos trabajadores arreglando aún los jardines, siguió su camino.

Vió a varios alumnos caminar un poco apresurados. Comenzó a caminar a paso lento después de todo sabía ya donde estaba su salón, lo había verificado la noche anterior. Al entrar ya habían varias personas sentadas así que atinó a hacer lo mismo, su apellido estaba en una mesa, los habían sentado en orden alfabético tal vez.

No había hablado casi nada en lo que llevaba de ese día solo habia dicho "si" y "no" bueno tampoco es como si fuera necesario.

Vio a su al rededor todos parecían hablar animadamente, algunos parecían conocerse desde hace algún tiempo y otros permanecían sin hablar simplemente sentados observando, incluso había uno que tenía cara de pocos amigos un rubio cenizo.

¿No se supone que se trata de llevarte bien con todos para tener más conexiones de trabajo? Bueno tal vez ese chico era un poco raro igual que él.

Las clases habían pasado rápido y ya era hora del descanso, durante clases una chica de cabello castaño y su amigo alto con lentes le habían hablado con la excusa de que si se formaba algún equipo podían estar juntos y ahora se habían quedado con él llevándolo de una o otra forma a comer juntos. No importaba, siempre estaba rodeado de otras pesonas a las que no sabía si les agradaba o no, sólo estaba ahí y punto.

Comenzó a comer mientras el par de chicos hablaba animadamente; sólo bastó con alzar un poco la mirada para verlo. El chico de cabello raro estaba sentado solo , comiendo como si nada, mostraba señales de estar enojado así que tal vez por eso nadie se le acercaba. Ya era la segunda vez que le prestaba atención a la misma persona y no sabía por qué, incluso se reprendió mentalmente, no debía hacer eso.

Terminó su comida rápidamente mientras que Uraraka e Iida apenas iban por la mitad, se levantó de su asiento y varias personas siendo la mayoría chicas le observaron pues a pesar de ser de un rango alto no sólo eso llamaba la atención también tenía buen aspecto.

-¿Ya te vas?- Uraraka intentó hablar un poco de varios temas pero al parecer ninguno le había importado a Todoroki que sólo parecía concentrarse en lo que comía.

-Si, los veo después- volvió a elevar un poco la cabeza y el ojirubí ya no estaba. Decidió ir al baño para perder un poco de tiempo lavandose las manos, no tenía ganas de hacer nada ese día (ni cualquier otro)

- Si terminando voy a ir a una entrevista, no, si, tal vez, mierda que si - La voz provenía de uno de los baños no era dificil escuchar gracias a que estaba gritando. No iba a seguir escuchando pero el sonido del pasador siendo deslizado hizo que diera la vuelta encontrándose con el par de ojos color rubí que al ver al heterocromatico incrementó una dosis de enojo a su expresión habitual. Pero no hizo nada sólo lo dejó. El mayor sólo suspiró, se sentía un poco decepcionado pensaba que le diría algo, generalmente las personas siempre se intentaban acercar o de llamar su atención pero el rubio cenizo sólo lo había dejado tan pronto como pudo ¿Lo estaba evitando? Eso nunca había pasado.

SUPEDITAR (TODOBAKU VS DABIBAKU)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora