capitulo 9: "Maldito sujeto"

26 1 2
                                    

Su ropa consistía en un par de pantalones de cuero y una camiseta negra que había conservado para cualquier oportunidad en la que necesitara ser informal.

El conjunto combinaba con su piel blanca, con la banda negra de cuero en su muñeca y con sus ojos azules. Se quedó mirando al espejo, y se preguntó por enésima vez por qué estaba haciendo esto. Simplemente no se sentía cómodo.
Además no sabía si sería capaz de bailar con angela.

Después de arreglarse el cabello y asegurarse de que sus botas estuvieran atadas, joseph caminó a la  cocina y encontró a angela esperándole.

Se le quedó mirando. Se había soltado el cabello, que colgaba sobre sus hombros y espalda en una cascada de rizos dorados. Vestía una falda azul de tela vaquera con una blusa roja que había atado en la cintura sobre una camiseta blanca. Llevaba botas negras que le llegaban a media pantorrilla. Joseph se sintió fuera de lugar vestido como iba en comparación a ella. 

—Estás genial, joseph—gritó ella, se acercó, lo tomó por la mano y lo llevó a la puerta—.Vamos, demian está en la planta superior arreglándose para su cita. Apresurémonos.  

—Pero tengo que decirle que...—ella le cortó con una mirada y continuó arrastrándolo a la puerta. 

Joseph suspiró y se rindió ante la insistente chica. Lo guió a su Toyota Corolla compacto y le abrió la puerta antes de dirigirse al asiento del piloto.  

—Será genial—dijo emocionada mientras encendía el vehículo—.Te enseñaré algunos movimientos de baile, creo que te divertirás mucho, joseph. De verdad lo pienso; es más, te lo aseguro. 

—Yo no estoy tan seguro, angela—dijo en voz baja, mirando por la ventana al campo oscuro. 

—Oh, ¿pero me darás una oportunidad? Si realmente no te sientes cómodo, solo tienes que decírmelo y nos iremos—concedió angela.  

Así que se dio por vencido otra vez y unos quince minutos más tarde se detuvieron frente a un bar al estilo del oeste.

Se quedó mirando al edificio de madera frente a él con luces neón que anunciaban cervezas y otra proclamando ser el mejor honky-tonk del país

Aún no tenía idea de qué se trataba.

Angela saltó del coche mientras él se bajaba lentamente y se reunieron en la parte delantera.
Ella le tomó de la mano y le guió hasta la puerta. Se podía escuchar música country procedente del edificio incluso antes de entrar y cuando abrió la  puerta, se sintió ensordecido por la estrepitosa música. El humo oscurecía el aire del bar, había una banda tocando en el escenario y una multitud de personas estaba alrededor de la pista de baile. Las mesas estaban ocupadas por varias personas: grupos de hombres, parejas y grupos de mujeres. Los taburetes del bar estaban ocupados por hombres y mujeres solteros que buscaban un rato de diversión.  

Joseph escuchó varias voces saludando a angela e incluso algún que otro piropo. Ella se limitó a reír, saludar y gritar alguna respuesta. Uno de los hombres se alejó de la barra y caminó hacia ellos. Los ojos de josep se abrieron de la sorpresa cuando la persona caminó hacia él y sintió como ella le apretaba la mano. Se forzó a relajarse, mientras sus ojos enfocaban al extraño. 

—¿ Ángela ?—La voz del hombre tenía un tono de incredulidad—. Bueno, ¡pero mira qué sorpresa! Has crecido bastante, ¿no? Pensé que todavía estabas en esa lujosa escuela a la que asistías.—Era un tipo bastante bien parecido, alto, musculoso y bronceado, con una cabellera café y ojos azules. 

—Brent, ¡deja en paz a la señorita!—dijo un barítono desde atrás. Brent miró al hombre que le había gritado antes de continuar caminando con angela. Joseph vio la forma en la que los ojos del hombre viajaban por el cuerpo de la chica y el deseo reflejado en su mirada. Miró al hombre más alto con hostilidad y la arrastró a la pista de baile. 

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Nov 08, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

"Besame Gentilmente"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora