Capítulo 54

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- Eres un idiota ¿lo sabes? - pregunté curando su herida

Rick había vuelto con la mayoría de nuestras cosas, incluso con Gabriel, aún no me había contado que le había pasado, solo llegó a mi con dos heridas enormes y ahora solo me quedaba curarlas. Un agujero en su palma que atravesaba toda la mano y una enorme cortada en la pierna, ningún daño a los nervios pero podía infectarse

- Un idiota con un trato - dijo mientras se quejaba de su mano

- ¿Hicieron un trato? - pregunté limpiando el agujero que atravesaba su palma - ¿con quién?

- Encontramos a Gabriel en un basurero con un grupo enorme que vive ahí, su líder se llama Jadis

- ¿Y ella te hizo esto?

- Era una prueba contra un caminante, no quiero entrar en detalles

- Bueno, gracias a Jadis podré llamarte Jesús de ahora en adelante - dije tomando un hilo y una aguja para suturar las heridas 

- ¿No tienes algo para que no sienta esto? - preguntó

- No, - contestó Tara - se rompieron mientras los Salvadores revolvían todo

- ¿Podrías recostarte? - pregunté - será más facil para mi suturar esto y Tara me ayudará con tu pierna

- No curé heridas así antes, lo hacía...

- Lo sé - dije intentando ser empática - yo te guiaré

- Esta bien - dijo tomando un asiento para acercarse

Rick no vió otra opción y se recostó en la camilla en la que estaba sentado, levantó con mucho cuidado sus piernas hasta ponerlas sobre la tela y me extendió con mucho cuidado su mano nuevamente para que la pudiera terminar de curar

- Ahora, te pediré que te quedes callado - dije a Rick - así saldrás más rápido de aquí, luego de suturarte me dirás de que demonios va ese trato

Rick asintió con la cabeza y Tara acercó a sus piernas un pequeño carrito con cosas que iba a necesitar, espero mis órdenes. Pasee el hilo por la aguja y respiré

- Ok Tara - dije mirando la pierna desde mi asiento - el pantalón de Rick no te da buen espacio para curar, no podemos quitarlo entonces tendrás que cortarlo con mucho cuidado, lo suficiente como para dejar toda la herida al aire

Vi como ella tomaba las tijeras y hacía lo que le ordené, tomé la mano de Rick y primero suturé su palma, claramente le estaba doliendo pero era muy fuerte como para que se quejara o llorara de dolor. Estaba a mitad del proceso cuando mi compañera terminó

- ¿Ahora?

- Limpia la herida - dije - usa alcohol, tenemos que cuidar nuestra agua potable, revisa de que no haya otras heridas alrededor

Terminé con la sutura en la palma y corté el hilo sobrante, di vuelta la mano de Rick y empecé a suturar la otra entrada, tuve que limpiar un poco más la herida pero funcionaba

- Solo tiene esta enorme cortada - dijo Tara revisando la pierna

- Perfecto - dije - ahora Rick - lo miré - tienes dos opciones

- Dímelas

- La primera es suturarte toda la herida en tu pierna sin medicamentos, lo cual si te va a doler un montón y necesitaría que te quedaras quieto

- ¿Y la segunda?

- Puedo noquearte, despertarás con la herida curada y sin dolores de por medio

Me miró intentando descubrir la broma en voz pero no la encontró, suspiró pensando en sus opciones mientras que yo terminaba con la sutura de su mano, solo me quedaba vendarla después de eso y podia ayudar con la herida enorme

Unidos En El ApocalipsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora