Doctor

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La chica siguió con su rutina diaria, se levantaba, ordenaba la casa y se dirigía a su trabajo que duraría hasta las 4 de la tarde, aunque hay veces que hace el turno nocturno.
Luego de terminar su trabajo, limpiar y despedirse de su jefa; se dirige a una posada donde es asistenta de un doctor, este es como una figura paterna y lo respeta por su sabiduría con las plantas medicinales que este usa para ayudar a todos los pacientes.

El bus la dejo a unas cuadras de la posada por lo que camino el resto del trayecto, pasa por un parque donde niños jugaban con sus padres, otros jugaban mientras sus padres los cuidaban a una distancia segura; vio a un niño de aproximadamente 6 años llorando mientras dos de sus amigos preocupados le consuelan diciéndole que el dolor sanara.
Haru se acerca a los niños preocupada de que el daño sea grave.

-¿Están bien?- pregunta Haru con voz amistosa y preocupada.

-M-mi p-pierna - dice el niño que lloraba mientras señala su rodilla donde había un raspón que estaba sangrando.

-Salto de los columpios y se cayo - dijo uno de los niños que lo acompañaban.

-¿Donde estan sus padres?- pregunta la chica de cabellos castaños

Uno de los niños resultó ser su hermano mayor, bueno por un año, sigue siendo un niño. Este señaló a una señorita con ropa formal, está estaba muy concentrada en su laptop mientras que hablaba por telefono, parecía muy enojada con la persona de la otra línea.
Haru carga al niño herido y seguido de los niños se acercan a la señora enojada.

-NO ME IMPORTA SI NO TIENES TERMINADO LOS PAPELES, LOS QUIERO HOY MISMO!- grita la mujer al teléfono y cuelga, al alzar la mirada y ver a su bebé en manos de una desconocida llorando todo su enojo se transformó en preocupación.- Yuki, que pasó?- deja la laptop a un lado y se levanta, carga su niño.- Que le hizo?!- miro de una forma amenazante a la pobre muchacha.

-N-no yo no--. Fue interrumpida por el hermano del niño.

-Mamá, no fue su culpa- le replicó a su propia madre- ella quiere ayudar.

-Señora, porfavor tenemos que curar su herida o empeorará. Soy asistenta de un doctor, déjeme llevarlo para tratar su herida.- miro de una manera suplicante a la madre, lo cual a esta le conmovió.
Rápido guió a la señora a la posada

El doctor estaba terminando de atender a una anciana.

-Recuerde señora Sunoda, no debe hacer mucho esfuerzo; usted es una señora mayor de edad y debe tomar el jarabe que le di.- le replica a la señora.

-Ya cariño, sé que te preocu-fue interrumpida por el sonido de la puerta.

-Doctor por favor ayude- grita Haru.

Acostaron al niño en la camilla y revisaron su rodilla inflamada.
El doctor fue a buscar unas hierbas las trituro un una roca desinfectada y los restos de los coloco en la pierna del niño. Vendo la herida y para terminar le regaló un dulce al niño.

-Gracias doctor, ¿Cuánto le debo?- pregunta sacando la billetera.

-N-no señora, no es necesario; es suficiente con saber que el niño está bien.- dijo el doctor avergonzado.

-Pero quiero agradecerle de alguna forma.- dice la señora

El doctor lo pensó un poco,- entonces a la próxima vez que los veamos podría invitarme algún café.- dice el doctor

La señora se marchó despidiéndose mientras tomaba de la mano a sus dos hijos.

-Doctor, sí que es un caza corazones.- dijo burlona la chica.

-Callate, no me gusta que me paguen por algo que amo hacer; además no necesito el dinero.

-Claro claro, doctor Takato.

Continuará:

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