Prologo

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IMPORTANTE:Antes que nada se debe aclarar que esta historia toca temas delicados, no estamos a favor ni alentando estas situaciones. Nada en esta historia es veridico, si eres una persona sensible esta historia no es para ti, no dejes malos comentarios y deja disfrutar a más gente.




















Narrador omnisciente

Nuestra historia comienza con Melany, una chica como cualquiera, y no, no hablo de el "como cualquiera" que sale en los dramas o en Netflix; ella es una chica común en verdad, de baja estatura, sus ojos no son azules o verdes, sino marrones, su cabello no era brillante ni largo, mucho menos en tonos dorados, tenía las puntas abiertas y el cabello color negro le llegaba hasta los hombros... Y ni hablar de su cuerpo, no era voluminoso y con curvas, al contrario, era plano por dónde lo vieras; pero bueno, tenía 14 años y tener ese tipo de cuerpo es normal a esa edad.

Su familia es de nivel medio y muy respetada en la zona que vivían, todos los veían como la familia perfecta: buenos padres, ambos muy trabajadores y cordiales, todos católicos, su única y amada hija siempre servicial y respetuosa con todos, ayudaba a su abuela, cada domingo iban a la primera misa del día y de vez en cuando se les veía en el parque alimentando a las aves.

Tal vez para este punto estarás dando toda una historia en la cabeza, por ejemplo que la chica se vuelve rebelde y sale con un fuckboy o que tiene una doble vida y se droga o se vuelve la típica chica popular y abusa de los "nerds". Lamentablemente está historia no es así, está historia es real, no hay fuckboys, ni poderes, ni duendes o hadas, es imposible retroceder en el tiempo, todo eso hubiera sido perfecto para nuestra protagonista, pero nada de esto es perfecto.

Una vez ya conoces un poco a la protagonista es mi deber contarte su historia, desde el día en que sus padres inocentemente decidieron el futuro de su hija. Sus padres se encontraban en la sala hablando sobre enviar a Melany a un colegio privado, donde todas las chicas de la familia han estudiado la secundaria, colegio católico, te dan todas las clases de una escuela común, solo con un extra de "formar jóvenes con educación", les enseñan modales, tejido, coser y los aíslan de todo, sin teléfono, sin televisión y solo pueden salir los domingos para ver a su familia... Todo eso por 3 años. A Melany no le gustaba la idea de ir a ese colegio, ya que ninguna de sus amigas iría a ese colegio y no podría verlas más que una vez por semana; la joven prometió hacer todos sus deberes, incluso se ofreció a hacer más y dijo que subiria sus calificaciones para obtener una beca mejor de la que tenía, sin embargo sus padre se negaron, de nada sirvieron las lágrimas y súplicas de si hija, para ellos era una tradición y no se hecharian para atrás.

Cuando llegaron las vacaciones de verano, algunas familias salían a las playas o a conocer otro país, pero las vacaciones de Melany eran diferentes, cada año era la misma rutina; sentada en su habitación viendo la televisión, bajaba para comer y hacia sus deberes, excepto los domingos que iba a misa y al salir le ayudaba a su abuela a vender desayunos en un local cerca de la iglesia. Nunca se quejaba por no salir y viajar, pero está vez no pudo evitar deprimirse y llorar cada noche pidiéndole a Dios que el tiempo pasará lento... Era inútil, las horas corrían de manera rápida y cada vez era menos tiempo el que quedaba para darle paso a lo que la joven califico como un "castigo infernal".

La última semana fue la peor, la joven no pudo evitar deprimirse cada que se encontraba con alguna de sus amigas y le platicaban lo felices que estaban por quedar en la secundaria que ellas querían, la mayoría quedaron juntas; por un lado Melany se sentía feliz por ellas pero al recordar que entraría a aquel colegio sus ojos ardían por evitar que pequeñas lágrimas salieran.














Gracias por leer 🅱️🆘♥️

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