𝕊𝕦𝕞𝕞𝕖𝕣 𝕍𝕒𝕔𝕒𝕥𝕚𝕠𝕟𝕤~ 夏休み 𝕃𝕖𝕖 𝔽𝕖́𝕝𝕚𝕩 [𝕊𝕂ℤ]

夏休み (19)

—¿No bajarás a comer?— Ruby se asomó por mi puerta.

—No Ruby, por quinta vez, no tengo hambre— la miré ya con cierto enojo —solo quiero estar sola ¿de acuerdo?

Asintió —bien, te dejaré un poco de lasaña en el refrigerador— y salió.

Ya pasó como media hora y aún no paro de llorar, parezco una niña de cinco años llorando por haber perdido su muñeca favorita.

Ya era algo tarde, ni siquiera fui con los chicos, tampoco les avisé nada.
Lo único que sabía era que sí iría con Soobin a cenar.
Me cambié la ropa, me puse un vestido de tirantes, estaba adornado con un estampado de flores blancas. Me puse unos tenis blancos y tomé mi celular.
Bajé lentamente y me encontré con todos ahí, estaba mamá, la señora Lee, Ruby y Félix viendo la televisión.

—Hola— dije y todos voltearon a verme.

La señora Lee y mamá sonrieron. Olvidé comentar que hasta me maquillé un poco, algo mínimo, aunque distinto para mi.

—Mamá— la llamé y ella asintió —saldré.

—¿Ah si?— sonrió —¿con quién?

—Es una cita— sonreí sonrojada.

—¿Quién es el afortunado? ¿Jared?— dijo Ruby.

Negué —Soobin— sonreí —vuelvo al rato— me dirige a la puerta y tomé las llaves que habían ahí para salir e irme.

Estuve caminando un rato hasta llegar a la parada de autobuses donde me senté y me puse a ver mi celular. Hasta que alguien se sentó junto a mi, volteé y era Félix.

—¿Qué haces aquí?— dije fríamente.

—Iré con mis amigos— dijo sin aún verme.

Lo ignoré y volví mi vista a mi celular...

Soobin
¿Segura que no quieres que vaya por ti?

Madison
No, olvidé que irías por mi y salí de casa a caminar un poco. De hecho estoy en la parada de autobuses.

Soobin
Bien, iré para allá. Quiero suponer que estás en la más cercana de tu casa.

Madison
Si jajaja. Te espero si quieres.

Soobin
Vale, nos vemos.

Soobin se ha desconectado...
Madison se ha desconectado...

Dejé mi celular y miré al frente, entonces Félix habló con una voz más grave de lo usual.

—Madison, necesito hablar contigo— lo dijo volteando a verme.

Negué con la cabeza —no tenemos nada de que hablar— lo dije sin aún verlo.

—Maddie— me llamó y volteé —lo lam...— lo interrumpí.

—Cierra la boca— dije descaradamente —no quiero escuchar tus estúpidas disculpas— sonreí tristemente —ya lo dijiste y ya quedamos así, no soy tu amiga, no me consideras como tal— me encogí de hombros —entonces no te disculpes conmigo, no lo vale.

—Madison no digas eso, sabes que lo dije por coraje— suspiró —no pensé lo que decía, menos en las consecuencias— suspiró —de verdad necesito hablar contigo— sonaba triste, desanimado.

—Félix me duele ¿sabes?— estaba apunto de llorar —solo no quiero volver a escuchar algo que me haga llorar y dejar de verte por un largo tiempo.

—Solo escucha— bufó —mis disculpas son sinceras, tengo toda la culpa por tratarte de lo peor— se empezó a rascar la nuca nervioso —yo tengo una excusa para mi comportamiento, pero...— fue interrumpido.

—Madds— habló Soobin frente nuestro —hola— se dirigió a Félix.

—Soobin— sonreí falsamente y me levanté —¿sabes qué? Mejor caminemos, no ha pasado ni un autobús— me puse a su lado.

—Claro— dijo él con una sonrisa hermosa.

—Félix— lo llamé y él me miró con tristeza —hablemos en casa ¿sí?— él asintió —bien, nos vemos allá— sonreí delicadamente y miré a Soobin —vámonos.

—Vámonos— miró una vez más a Félix —nos vemos— el pelirrojo solo asintió de mala gana y nos fuimos dejándolo ahí, solo.