operación: T.R.A.P.I.T.O. 2

Capítulo 3: premio doble

El individuo logra entrar a la residencia Loud con facilidad, facilidad proporcionada por una herramienta de cerrajero.

Reznikov – muy bien, estoy dentrro, ahorra solo falta encontrra a la marriquita esa

Vladimir se pasea por la planta baja de la casa, viendo fotos y decoraciones que tenía la familia en la sala, al igual que se tropezaba de vez en cuando por alguno que otro juguete de las más pequeñas.

Raznikov – este lugarr es un asco, deberrian rrecoger sus cosas después de usarrlas... veamos que tenemos porr aquí

El secuestrador entra a la cocina y abre la nevera.

Reznikov – ¡por la madrre patria! Tienen del humus que me gusta... bueno si ya estoy aquí – se metía el aderezo en una pequeña mochila que traía consigo al igual que uno que otro vasito de pudin de chocolate.

Reznikov – muy bien, a verr que hay detrras de esta puerrta – entraba al cuarto de los padres Loud - aparrentemente es el cuarrto de los padrres del objetivo – susurraba para sus adentros

Lynn Sr. Hablando dormido – humus en mis Lynnalesas será un éxito

Rita igual dormida – el asesino de mi libro será el conserje

Reznikov – estos idiotas tienen el sueño pesado, perrfecto – se dio una pequeña vuelta por el cuarto y se llevó unos billetes que había en la mesa de noche

Al salir del cuarto se sube a la planta alta del hogar Loud y se topa con un pasillo con 7 puertas, así que decide entrar en la puerta del lado izquierdo.

Se topa con la habitación de las dos hermanas mayores del albino, las cuales dormían plácidamente en sus camas sin ninguna pena.

Reznikov – no se ven mal estas chicas... tal vez deberria de llevarme a una de ellas parra que le hagan compañía al marrica, perro prrimero el encarrgo – cierra la puerta y se va a la puerta de al lado.

Reznikov – nada interesante aquí – se pasa a la siguiente habitación.

Reznikov – este lugarr es un desastrre ¿Quién puede vivirr así?

Luan suelta un chiste dormida - ¿Por qué los tres cerditos salieron de la casa de su mamá?... porque era una puerca

Reznikov – no estuvo mal, perro te falta chispa niña – sale de la habitación y se va al cuarto siguiente.

Reznikov – otrras dos chica ¿Qué esta familia no conoce los anticonceptivos? Mejorr me voy, la niña de negrro me da escalofrrios – siguiente puerta.

Reznikov – ¿mis ojos me engañan o son gemelas? El público darría lo que fuerra por verrlas juntas, aunque son muy jóvenes aún... perro bueno, eso tampoco les imporrta a muchos del público – se va a la puerta de enfrente de esta antes de entrar a la del final del pasillo.

Reznkov – solo son dos bebés, nada interesante

Lily murmura en sueños – po... po – seguido de eso el ambiente se puso más pesado

Reznikov – ay mamushka, yo me voy de aquí – sale del cuarto y da una bocanada de aire fresco – ok, ya rrevise toda la casa, esta es la ganadora – gira el picaporte del cuarto y entra, en la habitación logra ver al chico dormido con un conejo de peluche a un costado.

Reznikov – muy bien marriquita, es horra de desperrtear – se acerca al chico y con brusquedad lo sacude en la cama

Lincoln asustado – ¿qué paso? ¿Qué paso? – se ve interrumpido por la mano del secuestrador