-¡Bienvenida a Happy Hotel! Soy Charlie- se vio interrumpida su presentación por un demonio rojo.
- ¡Cariño! Bienvenida que bueno que llegas Niffty necesitara ayuda por aquí y hemos pensado darles unos toques mas elegantes por aqui- comenzó a hablar...
Alastor acompañaba a la de alas ocultas por todo el salón hasta llegar donde Lucifer ya los esperaba.
-Yadir cariño- la saludo este besando su mano, Alastor solo la apretó mas contra si- no deberías comportarte así Alastor, ella es como mi pequeña hija- finalizo para dirigirse a la barra.
Yadir se aparto del de rojo- ya puedes irte estaré con Lucifer- dijo ella sin mirarlo.
-no me ire- suelta el mismo. Pero fueron interrumpidos por un demonio.
-Señorita, su presentación fue excepcional como siempre- la adulo.
- no fue suficiente- sonrió Yadir. Pasaron dos horas, Yadir mantenia conversaciones con Lucifer y aquellos que lo acompañaban, en cambio Alastor solo la observaba desde lejos.
-me tengo que ir Lucifer- dicho eso se despidió de el, y como por arte de magia Alastor ya estaba a su lado.
-¿Ya nos vamos?- pregunto sonriendo con mas sinceridad.
-si, ya son las 5:59 y le dije a Charlie que volvería a las 6- dijo cuando salieron del salón y abrazando el cuello de Alastor- has lo tuyo.
Alastor la abrazo de la cintura y desaparecieron en una sombra, reapareciendo en el cuarto del hotel. La de alas soltó una carcajada que a cualquiera pensaría que esta loca pero el de rojo solo observaba como sus mejillas se sonrojaban a causa de la risa.
-eso siempre me da cosquillas- y aunque suene extraño el bastón de Alastor empezó a emitir una canción lenta mientras movía a la chica la cual se dejaba llevar, disfrutando -como siempre- el momento de romanticismo del de rojo.
El contrario siempre disfrutaba ver como ella se volvía de una tez de manchas morena y aquellos círculos en sus mejillas se discipaban dejando un hermoso sonrojo. A el de rojo soltó un suspiro al ver el verdadero rostro de la joven demonio que tenia entre brazos, la misma simplemente contemplaba al psicópata e irracional demonio del que se había enamorado y del que se dispuso estar a su lado ante cualquier cosa.
La -ahora- ojimorada beso al de rojo ya que sabia que este no se lo negaría.
- por fin te robe un suspiro- comento juguetona la de alas.
- cariño, tu has robado mas que un suspiro- contesto el mismo escuchando como tocaban la puerta y el semblante de la castaña se cambiaba dejando una cara seria y un poco apagada mientras sus cabellos oscuros rizados se volvían hebras rubias lacias, su piel de manchas oscuras y blancas se volvía de nuevo clara, sus mejillas rojas perdieron color para volver a obtener los círculos rojos en estas, por ultimo -lo que mas le gustaba al de rojo- esas perlas moradas con negro se volvían amarillas.
Se volvió de nuevo la imagen de Lucifer en versión chica.
- ¿Yadir? ¿Eres tu? ¡Necesito hablar contigo!- se escucho la voz de Charlie.
-¡Deja que me cambie y te alcanzo en un momento!- grito de vuelta ella con la mirada fija en el de rojo el cual le beso esperando transmitir lo que no podía expresar con palabras.
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