Harry Potter y el Viaje mágico

Capítulo 1

*Lumus*

Harry Potter y el Viaje Mágico

-CAPÍTULO 1-

"Quién eres y cómo llegaste aquí?" exigió.

Harry la miró sorprendido. Ante él estaba una versión joven, muy joven, de la mujer cuyo suicidio acababa de presenciar. 

Los ojos violetas lo atravesaron con una mirada que lo habría dejado incapaz de pensar racionalmente en sus años más jóvenes cuando la varita que ella le lanzó crujió con energía mágica apenas contenida. 

Su postura de duelo era buena, ciertamente mejor de lo que esperaba de una bruja adolescente, pero, una vez más, esta era la Bellatrix que se convertiría en uno de los duelistas maestros más temidos de su tiempo.

Ahora ese era un concepto extraño. Su tiempo . ¿Eso significaba que estaba en el pasado? Desde su aparición, ciertamente parecía de esa manera, ya que seguro que no se sentía más joven. Por reflejo, tomó su propia varita antes de darse cuenta de que ya no la tenía. Uh, oh , pensó.

" Dije ", repitió lenta y peligrosamente, "¿ quién eres y cómo llegaste aquí?"

"¿No lo sé?" dijo, soltando lo primero que le vino a la mente.

" ¡ Pulsus !"

Impulsado en su movimiento por las pesadas cadenas, Harry fue incapaz de esquivar y atrapó el hechizo desterrador en el pecho. Voló por el aire, haciendo una mueca de dolor cuando se estrelló contra una estantería. Parte de su mente tomó nota de que ya no estaba en su celda, lo cual fue algo bueno. . . algo que reconsideró cuando apenas logró rodar a tiempo cuando varios hexágonos salpicaron contra el suelo donde había estado acostado.

"Mira, ¿no podemos hablar de esto?" comenzó, solo para atrapar una
maldición en su hombro izquierdo. 

Podía sentir y oír el chasquido cuando se dislocaba mientras giraba con la fuerza del golpe. Aparentemente no , pensó para sí mismo mientras se lanzaba hacia adelante, rodando cuando golpeaba el suelo sobre su hombro bueno. Mirando a su alrededor, se dio cuenta de que estaba en una bóveda que se parecía sospechosamente a la bóveda de la familia Black en Gringotts. El lugar estaba lleno de estantes, armarios y cajones. A toda prisa se cubrió detrás de uno de ellos.

"Quienquiera que seas, ¡acabas de cometer un gran error!" Bellatrix gritó. " ¡ Reducto !"

La maldición estalló en pedazos el gabinete que Harry estaba escondiendo, y apenas logró darle la espalda a la explosión para proteger su rostro de la metralla de alta velocidad que constituía los restos del contenedor de madera. La fuerza de la explosión lo envió al suelo.

Sus manos buscaron en el suelo algo, cualquier cosa, para usar como arma mientras intentaba ponerse de pie. 

Su cuerpo, ya herido por su captura, desnutrido y deshidratado, le dolía. Le ardían la espalda por las astillas de madera que se habían incrustado allí y por romper el estante, y su brazo izquierdo colgaba sin fuerzas. 

Los pasos resonaron ruidosamente a través de la bóveda cuando ella se acercó a su forma propensa y él supo que a menos que hiciera algo, y lo hiciera ahora , estaba muerto.

Los dedos de su mano derecha encontraron una pieza lisa de madera. Lo agarró y se arrojó para mirarla. Sus miradas se encontraron y él se dio cuenta de lo que sostenía en la mano cuando se enfrentaron.