Capitulo 9 - Rendir lo que cueste

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Nuestros profes agarran la nueve de Julio ahreno, van por N de la Peña. Boni se acerca al costado de la ventanilla del camión y con un salto colosal logra meterse al camión por la ventana. Adriana seguía en la escalera del techo.

- ¿Qué pasó con Marina? - dijo Sabrina

- Bueno, pudo salir mejor, el director no estaba - respondió.

- Ehhh... ¿El auto ese es amigo suyo? - dijo el bombero, mirando por el retrovisor, atrás suyo había un Clio de cuatro puertas azul muy, muy oscuro y el conductor era

- ¡Enzo! - exclamó Boni al reconocer su rostro.

- ¿Me extrañaron? - les gritó desde su auto, que estaba prácticamente pegado al camión Rojo.

- ¡No ibas al chino! - le gritaba Pato - ¡Te quedaba shampoo!

Con una maniobra, Enzo se subió al capó de su auto y realizó otro saltó colosal que lo hizo llegar hasta el camión, se agarró de la parte de atrás y después subió al techo para atacar a Adriana. Boni salió por la ventanilla y se subió al techo. Agarró rápidamente a Adriana (no sé cómo) y la metió adentro, se reincorporaron.

- ¿Tu auto tenía seguro?

- Lo único que no está seguro acá sos vos - le respondió Enzo, sacó la espada de Manuel Belgrano, Boni sacó el trofeo de la casa roja y comenzaron a batallar como esgrimistas en el techo de un camión de bombero en movimiento por una de las calles más transitadas de Llavallol sin protección, ¡Qué valientes!

- ¡Cuidado Boni! ¡Te podes caer! - le gritó Sicilia.

- Soy consciente de ello.

En un momento desesperado, Enzo perdió la espada, perdió el equilibrio y se tropezó, pero antes de caerse logró agarrarse de uno de los caños del camión, pero no podría por mucho.

- ¡Enzo! - le decía Boni - ¡Toma mí mano! - Él trataba de alcanzarle la mano, pero la distancia entre ambos lo dificultaba, si Boni se acercaba más, él caería. - ¡Tómala! - le seguía diciendo, pero finalmente, Enzo se soltó del caño y cayó a la calle.

- ¡NOOOOOOOOOO!

Boni se cubrió la cara en sus brazos, su amigo había caído desde una caída mortal. Sólo se veía su cuerpo inmóvil en el suelo.

- ¡Cuidado! - gritó el conductor, ya que perdió el control del camión por la velocidad a la que iban y se introdujo en la plaza Pellegrini. Chocaron contra un pino, lo que causó el vuelco del vehículo y que el motor se prendiera en llamas. Boni logró saltar a tiempo y se dirigió al incidente para rescatarlos. Sici, Sabri, Adri, Pato y el bombero acompañante lograron salir, pero el bombero conductor no lo logró, con su cuerpo quemado entre los escombros. ¡Qué ironía! Un bombero murió por un fuego.

Los profes sobrevivientes se movieron un poco y se protegieron hasta que llegaron las autoridades.

- Esto es un desastre, - decía Adriana a todo el grupo - Marina está totalmente fuera de control.

- No se preocupen chicas, - les dijo Boni - mañana iremos de vuelta, pero esta vez, no nos volveremos hasta que ellos se hayan ido primero.

- ¿Y si nunca volvemos? - le dijo Sabrina.

- No hay nada mejor para un profesor, morir en guerra - respondió.

A la mañana siguiente:

Ya era viernes. Marina les pidió a los profes una reunión en el parque.

- ¿Para qué nos llamaste Marina? - le preguntó Lucas.

- Volverán, siento que volverán, y hay que estar preparados. ¿Nadie se contactó con Enzo? - nadie respondió - Bien. Los actos de Boni los debilitaron, no nos queda de otra que destruir la escuela. Pero no se preocupen, les daré la suficiente guita a cada uno para cubrir su sueldo. Ahora, vigilen que cuando todos lleguen, nadie salga de sus salones, Lucas, vos traeme un fósforo.

Lucas obedeció y le alcanzó un fósforo, sólo que esta vez, la encontró a ella a los pies del mástil, tocando la bandera.

- Acá tenés - le dijo.

- Gracias - respondió. Encendió uno y prendió la bandera argentina del mástil en llamas, la volvió a izar y continuó en llamas hasta el final del día.

- La guerra Milagrosa comienza

Ya eran las ocho y los alumnos estaban en los salones, todos los profes en el patio y, bajo las órdenes de Marina, incendiaron la cancha por partes.
Mientras estaban distraídos en el patio, Gachy aprovechó y de una forma desconocida se libró de las ataduras. Se la veía con una maleta de viaje, se la cruzó a Laura viniendo del cuarto de educación física.

- ¿Te escapás Gachy?

- Sí, Laura no soporto más esto. Mucha suerte.

- Suerte.

Ya de espaldas, Gachy le dijo:

- Ahhh, - abrió la maleta y empezó a buscar algo - decile a la directora que les dejo un regalito - seguido de esto sacó una escopeta de la maleta y le disparó en la cabeza a Laura, dejando su cuerpo en el suelo. La volvió a guardar y se tomó el primer vuelo a Miami.

Boni convocó a sus compañeros en la plaza.

- Queridos amigos, queridos hermanos, - comenzó - ya no lo soportamos más, tenemos que ayudar a Marina o dejarla en el olvido. Ahora mismo, iremos a la escuela y la vamos a detener, a ella y al resto de compañeros nuestros. Nos dividimos peor que diez entre dos...

- ¡CINCO! - Gritó Sabrina.

- ...ahora mismo vamos para allá y les vamos a mostrar lo que pasa cuando alguien se mete con Boni y sus amigos y de paso recuperar nuestro colegio. Perdimos amigos, Elba, Gary, Pablo, Enzo, todos ellos, nos acompañan en esta travesía. No somos grumetes como ellos, ni tampoco nuestro corazón en tan blandito como el de ellos. Somos la cura del colegio, somos más audaces que la bola ocho del pool. Ahora iremos, por todos nuestros amigos, por nosotros, por ellos, por los cameos de Stan Lee, nosotros no somos simples profesores. ¡Nosotros pasamos de Fusión a Ebullición!

Todos aplaudieron, incluso los nenes que estaban en la plaza. Los cinco Unidos se dirigieron al colegio y vieron el cuerpo difunto de Laura.

- Era una amiga... - dijo Boni. Continuaron hacia el patio del colegio. Nuestros profes pasaron por muchas cosas de camino hacia acá, pero hoy todo termina.
Los profes del lado de Marina estaban quemando el patio, con Marina de espaldas a Boni, mirando el mástil. Los alumnos transmitiendo en Instagram por las ventanas, desesperados.

- ¡Marina! - gritó Boni. Todos voltearon a verlo y todos los alumnos desde los salones empezaron a aplaudir. Lucas, Gaby, Julieta y Osvaldo se iban acercando a Marina - No nos rendimos, nunca. Corta una tiza, y dos más la reemplazarán.

- Al parecer, esto termina acá, ahora - decía Marina, mientras vestía una bonita boina.

- No puedo estar más de acuerdo.

Los profes se pusieron en posición. Por un lado: Osvaldo, Lucas, Marina, Gaby y Julieta. Por el otro, Sabrina, Pato, Boni, Adriana y Sicilia. Ambos preparados para defender la escuela.

Y tú, ¿De qué lado estás?

MILAGROSA WAR [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora