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Narra Pavón

Estoy en la mierda.

Dios, ¿Por qué me tiene que pasar a mí?

Ayer fui al Burger King con Martina, creo que fue una de las mejores salidas que tuvimos. No me puedo sacar de la cabeza esos ojitos verdes mirándome.
Tengo que admitir que me puso nervioso.

¿Qué se la habrá pasado por la cabeza?

Ni idea.

Y a la anoche adivinen con quién cené.

Sí, con Mara.

Ya sé, soy un forro. Pero es que es difícil dejar de estar con las dos. Nose qué hacer, tengo un montón de sentimientos encontrados.

Dios, ni de pendejo me pasó ésto. Me tiene que pasar justo a mis 25 años.

Recibo un pelotazo en la cabeza que hace que vuelva a la realidad. O sea, al entrenamiento.

- Me parece que el negro anda por la Luna...- se burla Salvio.

- ¿O andará enamorado?- la sigue Advincula.

- Dejen de decir boludeces - los callo.

- ¿De que hablan?- se suma Rojo.

- El negro anda chongueando - responde Weigandt.

Gracias amigo.

- ¿Por eso se comió tremendo pelotazo?- ríe.

Hacemos un par de cosas más que nos indica Battaglia y se termina el entrenamiento de hoy.

Todos estamos dando el mayor tiempo y dedicación posible a los entrenamientos.

Sentir la presión del Club.
La presión del Dt.
La presión del hincha.

Es mucho, pero hay que bancarsela. El mundo Boca es esto.

Para sacar esos pensamientos y tratar de distraer un poco mi cabeza, llamo a Martu. A ver si quiere hacer algo hoy.

Al cuarto piiiip contestó.

- Martu...- saludo.

- No, está intentando cocinar - habla un pibe.

- ¡NICOLAS!- se la escucha y ríe.

Frunzo el ceño.

- ¿Quién habla?- pregunto.

- Nicolás - responde y ya sé de quién estamos hablando.

El teñido de Domínguez.

Es buen pibe, pero no me agrada que pase tanto tiempo con Martina.

- Dame el celular... Dale boludo, sabes que soy petisa y no llego... - se la escucha -... Hola Kichan - me saluda.

- Hola - saludo también.

- ¿A que debo tu honorable llamado?- dice y río.

- No nada, era para saber si querías hacer algo. Pero veo que estás ocupada - hablo.

- No venite si querés. Está Domínguez y dentro de veinte viene la hermana. Vamos a tomar unos mates. Hice un bizcochuelo -.

- No dejá, lo dejamos para otro día salir por algún lado. Chau, cuídate - digo.

- Bueno, chau - dice y cuelga.

Busco entre mis contactos otro número.

- ¿Hola?- atiende.

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