"Hanran" (Maruigi)

Chapter six

“— Siempre e observado las expresiones de las personas,y desarrolle una pequeña habilidad,puedo escuchar el chasquido del interruptor cuando parten la mente de ese ser que nunca debió ser tocado. Es ahí cuando notas la señal de "cambio"  .”—
Atsushi Nakajima.

Con un poco de esfuerzo Candy Kong investigo algo para el,Yoshi trabajaba como mesero en esa cafetería desde hace ya 2 meses. Los motivos no se los explico,según dijo su informante,estaba pasando por un mal momento con Donkey Kong,y no quería tener más problemas.

¿Por qué Yoshi trabajaría si el viven en una isla? Ahí tiene lo que necesita, cómida,agua y un lugar donde dormir,es un dinosaurio,sus necesidades no eran tan grandes como para realizar actividades humanas,sea como sea,no le dió importancia. En cuanto llego a su casa, dejo las comprar en la mesa de la cocina,saco el whisky,los cigarros y un poco de hielo que estaba en el refrigerador. Tomo un vaso del fregadero y sirvió un poco de la bebida en el,coloco dos cubos de hielo en su interior y le dió un sorbo. Lo disfruto. Amaba como quemaba en su garganta,pudo haber olvidado la primera vez que tomo alcohol,pero nunca se fue esa sensación de relajación y a su vez de destrucción,simplemente,para alguien como el. Era el balance perfecto entre el dolor y el cuerpo.

Fue al sofá,saludo a maniquí y se recostó,relajándose un poco mientras cerraba los ojos,si,fue un día duro,con presencias inesperadas pero ¿Cuando no sus días son una mierda?.

Con un poco de paciencia prendió la radio y coloco música a a todo volumen. El heavy metal era su género favorito,los gritos,el ruido. Era su propia fantasía degenerativa para sentirse estrella de rock y morir a los 27 años. Dejando su bebida de lado,predio un cigarro para aumentar más el ambiente tóxico,recargo un poco su cabeza en maniquí y luego lo abrazo un poco,no había mejor compañia que el.

Sin embargo ese breve momento de paz no iba a durar para siempre...

Pese a que la música sonaba muy fuerte,pudo escuchar que alguien tocaba la puerta. Cosa que le extraño demasiado,vivía en las profundidades del bosque. Nadie vendría a visitarlo,así que pensó que era algún animal que pasó por aquí y chocó con la puerta. Pero luego de unos diez minutos ocurrió algo imprevisto.

Un fuerte terremoto se sintió,el piso tembló tanto que sus desgastados muebles se tambalearon y varias cosas de vidrio,así como objetos punzantes se cayeron. Lo que lo puso en alerta.

Incapaz de bajar la música,se levantó silenciosamente del sillón,se bebió todo el whisky en su vaso,apretó el cigarro con los labios y debajo del sillón saco una daga filosa. Con el pulgar izquierdo tocó la punta de la arma,comprobando su filo. Para después,blandirla con firmeza y caminar con precaución a la mirilla de la puerta.

Fue ahí cuando su mente se puso brevemente en blanco...

Solo una nave es capaz de causar tal impacto parecido al de un terremoto al aterrizar. Era la nave de Rosalina,la que estaba estacionada a unos metros de su vivienda. Y quiénes tocaban a la puerta eran nada más y nada menos que Daisy Sarassa,Peach Toadstoll,Pauline,Yoshi..... Y Mario.

Lo estaban buscando. Y finalmente dieron con el,tal parece,que Yoshi lo siguió hasta aquí.

En lo que el sacaba conclusiones lógicas,nuevamente tocaron a la puerta,tal parece,estaban muy ansiosos en que se les abrirá, querían una repuesta relacionada con el mismo.

Lastimosamente,Luigi sabía que la mejor manera de ganar,era no pelear..
Clavo la daga en sus manos cerca del seguro de la puerta,no serviría de mucho pero si intentaban entrar a la fuerza,esto los ocuparía un rato.

Debía salir de aquí,escapar lo más pronto posible,no podía usar su magia,así que tendría que hacerlo de otra manera. No sabía cuánto tiempo tardaría en volver,así que debía cubrir lo básico.

Corrio hacia dónde estaba relajándose hace unos minutos,tomo la botella de whisky y la cerro con fuerza,después con su mano libre tomo a maniquí y lo subió hacia el segundo piso. En dónde estaba su habitación,con cuidado de no hacer mucho movimiento,la música aún sonaba con fuerza,así que podía usar eso a su favor.

Dejo a maniquí en la cama y la botella de alcohol en su mesa de noche,después,giro al armario,saco una pequeña mochila para comenzar a empacar sus cosas, agradecidamente,no tenía muchas pertenencias (Pues su situación económica no daba para más) así que una maleta bastaría para guardar todo. En el interior de la misma coloco su paquete de cigarrillos,el whisky y continuamente varias armas,que había dejado ocultas tanto en su almohada como debajo de su cama.

¿Por qué?
Por qué era un puto demente sin motivo y conciencia que vivía paranoico ante la posibilidad de un ataque sorpresa por fuerzas que no comprendía.

Con casi todo empacado solamente quedaba volver a bajar al primer piso,sacar la comida instantánea y congelada del refrigerador e irse.

Bajando las escaleras se percató de que,tal y como pensó,empezaron a forzar la puerta para entrar,no le quedaba mucho tiempo,así que se apresuró lo más que pudo. Si usaban magia para derribar la puerta,iba a ser su fin. No tenía ganas de confrontarlos,no tendía ganas de nada,no entendía por qué de repente el interés de volver a relacionarse con el "homosexual del reino". Pero no se iba a quedar a descubrirlo.

Cuando tomo toda la comida que tenía subió rápidamente las escaleras y se encerio en su habitación,iba a escapar por la ventana,así que para evitar ser visto,se colocó una larga capa negra con capucha que cubrirse su cuerpo y rostro, guardo lo que quedaba en su maleta,se la colgó en la espalda y con un pedazo largo de tela que encontró por ahí. Amarró a maniquí sobre su propia maleta de tal forma que no pudiera romperse o caerse. Si iba a irse,lo haría con su único amigo.

Apagó las luces de su habitación,abrio la ventana (que pese a estar en el segundo piso no quedaba muy lejos del piso) y saltó. Corriendo hacia la profundidad del bosque,sin mirar atrás. La adrenalina que sentís sobre su cuerpo mientras corría era indescriptible,le parecía extrañamente familiar,pero no sabía cómo y en qué momento fue en el que alguna vez se sintió así.

Una vez atravesado el bosque vio hacia la carretera,vio varios autos pasar,incluido un taxi que tal parece venía de hacer un viaje,así que le hizo la parada y de inmediato se subió, descolgando su mochila para arrojarla en uno de los asientos libres y poder subirse.

— Buenas tardes. ¿A dónde lo llevo? — pregunto el chófer con amabilidad,extrañado por ver qué el chico viajaba con un maniquí.

— Al casino "Love Streep" en Nueva York por favor. — hablo el chico con seriedad mientras parpadea a un par de veces.

Con esa breve conversación...
El taxi arranco,dejando atrás a un grupo de completos desconocidos para el.