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A la hora del almuerzo Jin se quedaba solo en algún salón, tantos aromas le hacían doler su cabeza, no estaba acostumbrado a ello y debía acostumbrarse.

Por fin se había decidido ir a la cafetería, compro su almuerzo y fue a buscar un lugar a donde sentarse.

_Disculpa_ vió a un chico de cabello azúl sentado solo así que fue con él_ ¿Puedo sentarme aquí?

_Lo siento, pero ya está apartado_ se disculpó con una pequeña sonrisa.

Aunque su aspecto fuera delicado y lindo su esencia era de un alfa.

_Oh, bueno_ murmuró y siguió buscando un lugar donde sentarse.

_¡Oye tú!_ escucho la voz de una chica gritar_ El de sudadera rosa_ él tenía una sudadera rosa, levantó la vista y busco a la dueña de aquella voz hasta que dió con ella. Una chica de cabello negro y piel pálida_ ¡Si tú!, ¡Ven!_ Jin se acercó a aquella chica_ ¿Quieres sentarte conmigo?

_¿No te molesta?

_¿Por qué me molestaría?_ le mostró una sonrisa amable.

_Es que eres una alfa y me dijeron que los de mi clase no deben que hablarle a los alfas.

_¿Quién te dijo esa tontería?_ antes de que Jin pudiera responder ella lo interrumpió_ ¿Sabes qué?, No importa... Me llamo Irene ¿Y tú?

_SeokJin_ se presentó y se sentó delante de la chica.

_SeokJin... Lindo nombre_ le halagó_ Eres nuevo y un beta, no te preocupes por lo que algunos te digan, muchos alfas de aquí son unos idiotas.

Por fin estaba haciendo una nueva amiga.

La puerta de la cafetería fueron abiertas de golpe, asustando y sorprendiendo a todos. Un alfa alto y de tez morena había sido el responsable, detrás de él venían dos alfas más, un poco más bajos.

_¡NamJoon, tranquilízate!_ el más bajo de los tres le gritó, pero el moreno hizo casi omiso y siguió avanzando, olfateaba algo y lo estaba tratando de rastrear.

SeokJin había olfateado las feromonas de ese Alfa de nombre NamJoon, su lobo parecía brincar de felicidad, quería ir hacía él y poder impregnarse de su aroma.

Los tres alfas llegaron hasta donde estaba él, y no pudo evitar sentirse más feliz, era él, lo había reconocido a pesar de estar usando el inhibidor de feromonas. Era su pareja destinada.

_¿Tú?_ Él más alto parecía molesto.

Su lobo le estaba diciendo que lo abrazará y lo calmara como debía hacer una pareja, eso estaba apunto de hacer.

_¿Ahora que te sucede a tí?_ Irene preguntó.

_Él es un Omega_ señaló a SeokJin que trataba de ocultar su sonrisa, estaba bastante feliz. No pensaba que encontraría a su pareja destinada tan pronto.

_Es un beta_ Irene le corrigió.

_Es un Omega, pero ¿tú qué vas a saber?, Eres un error de la naturaleza.

_No, NamJoon, ese chico de verdad es un beta_ los otros dos alfas lo confirmaron, no percibían ninguna esencia.

Jin iba a negar eso, pero no alcanzó a hablar.

_Que bien, sólo fue una equivocación, debo seguir buscando, está cerca_ los tres se retiraron rápidamente.

_Que tonto, haberse confundido_ Irene se burló.

_¿Por qué te llamó error de la naturaleza?_ decidió preguntar.

_Por ser una alfa, se supone que lo normal es que los alfas sean hombres, no hay muchas de mi tipo...

_Pero eso te hace especial, como los omegas masculinos.

_Tú no sabes nada de estos temas, ¿Cierto?_ Jin negó_ Tienes suerte de ser un beta.

SeokJin volvió a su hogar, estaba tan emocionado porque había visto a su pareja destinada, llegó a contárselo a su papá Ji-yong.

_El era alto, guapo y su voz..._ soltó un suspiro de colegiala enamorada_ Quería decirle que era yo, que yo soy su pareja, pero se fue y no pude decírselo.

_Tal vez deba ser sorpresa, cariño, él se debe dar cuenta por si mismo.

_¿Y si por el inhibidor de feromonas se sigue confundiendo?

_Si es tu pareja destinada se deberá dar cuenta_ él tan sólo trataba de proteger a SeokJin.

Pequeño Omegaʕ•ᴥ•ʔDonde viven las historias. Descúbrelo ahora