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Gowther se encontraba parado inmóvil frente a King. Su expresión solo transmitía rencor, su seño ligeramente fruncido era lo más destacado de la mirada. El pelirrojo sin embargo no tuvo miedo y se demostró firme ante él.

-A ti no te incumbe -se cruzó de brazos.

El pelirosa le lanzó un pequeño hilo de poder mágico, ese que hace mucho había utilizado para saber los secretos de Ban, King y Diane. Pero está vez el rey hada lo esquivó mirándolo sorprendido. No entendía por qué le interesaba tanto saber de qué se trataba y King pasara lo que pasara no iba a revelar el secreto que mantenía con Diane.

El muñeco siguió intentando atinarle a King pero éste seguía esquivándole los ataques o protegiéndose con su almohada los evitaba.

-¡Gowther ya basta! -dijo ya molesto apuntándolo con Chastifol.

Pero en aquel único instante en que dejó de moverse para amenazarlo Gowther logró darle justo en el cuello y sonrió victorioso. Pero su expresión cambió en pocos segundos al revisar su memoria.

-¡Gowther! -le gritó King dispuesto a estrangularlo.

-Así que tú conoces a Diane hace mucho... -decía Gowther sacándose sus lentes- pero borraste sus memorias por alguna razón.

King se quedó inmóvil mordiendo fuertemente con su mandíbula conteniendo la ira que Gowther le había despertado ¡Qué idiota era! Si alguien más se enteraba de lo que sucedió hace doscientos años... si ella se enteraba...

-No se lo diré a nadie -dijo Gowther literalmente leyéndole los pensamientos y al instante retirando su poder del cuello de King-, pero si me entero de que me haz ocultado algo no dudaré en decírselo a Diane.

King lo miró con lágrimas en los ojos, recordar tan vivamente aquel momento y que alguien más lo sepa le daba terror. Se sentía cruel y juzgado, y para peor estaba amenazado.

Gowther dió las buenas noches y se marchó tranquilamente dejando a King nuevamente solo en el balcón

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Gowther dió las buenas noches y se marchó tranquilamente dejando a King nuevamente solo en el balcón.

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Mientras tanto, en la habitación de las mujeres Merlín se encontraba hablando con el rey Arthur por una especie de "videollamada" creada con magia de dicha maga. Arthur sabía que el rey Bartra le había pedido que fuese confidencial, pero él sabía que pasara lo que pasara Merlín era de mucha utilidad y además era confiable.

En cuanto Arthur le pasó la única información que había obtenido, la pelinegra se preocupó mucho, puesto que ya sabía a qué se debía la fuerza de ese individuo pero decidió no decírselo, primero quería saber qué podría aportar King como información y descifrar a aquel monstruo por ella misma.

  Se aproximó a la ventana viendo como Diane dormía, desde que había llegado la sentía diferente. Tomó un artefacto parecido al que utilizaba Hawk en su oreja, pero Merlín se lo puso en el ojo y abrió la boca sorprendida. El poder mágico de Diane había aumentado considerablemente. Antes era 900 y ahora había aumentado a 2100 ¿De dónde podría haberlo sacado de un día para otro? ¿Acaso ella había tomado aquel químico que Merlín había creado? ¿O era cómplice? Esas preguntas rondaban en la mente de la hechicera.

El pecado de quererte -Kiane (King X Diane)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora