¿ES POSIBLE NUESTRO AMOR?

Capitulo 14

Se sentía algo aliviado por fin era fin de semana, no tenia que lidiar con las miradas nada sutiles de su jefe, y la insistente pregunta de si podían tener una cita.

Aun se sentía un poco inseguro, o mas bien en realidad no había pensado en que decir, ¿sentía algo por Víctor? Creía que sí, ¿pero estaba dispuesto a arriesgarse? Y ahí era donde tenia dudas, en el pasado tuvo malas experiencias de chicos que solo querían tener sexo, y pensaban que la vía más rápida para obtenerlo era de un doncel, no entendía por que pensaban que doncel era lo mismo que una prostituta.

Disipo los pensamientos seria mejor distraerse ayudando a su madre, así que se puso el típico uniforme del onsen y bajo a la cocina donde su madre empezaba a preparar los alimentos de los huéspedes.

-mama, ¿necesitas ayuda?

-oh, Yuuri, si pudieras ir a la compra, me faltan ingredientes para el desayuno de mañana

-vaya tan rápido? ¿Tenemos muchos huéspedes?

-bueno como no estas no lo has notado, pero esta lleno-dijo feliz la mujer

-en serio?! Eso es estupendo, claro yo voy a la compra ¿se necesita mucho?

-yo también voy, llevaremos la camioneta para cargar con todo-dijo Mari asomándose

Ambos hermanos se dirigieron a la plaza central donde se ponía un gran bazar, era el lugar mas adecuado para conseguir cosas a un excelente precio.

-separémonos para traer todo, aquí tienes tu mitad de la lista-dijo Mari

-claro, nos vemos en una hora

Yuuri tenia que ir por los vegetales, así que se dirigió a su lugar de compra habitual al verlo el señor rápidamente se acerco

-muchacho que milagro, me dijo tu madre que ya estabas muy ocupado con el trabajo de oficina, felicidades, por cierto, hasta te use de ejemplo para que mi hijo dejara esas ideas tontas de casarse con un hombre millonario para que lo mantenga

-jajaja, bueno es el deseo de la mayoría de los adolescentes, seguro que cuando crezca más madurara

-madurar ni que fuera fruta-dijo un joven doncel asomándose

-Hikaru basta-dijo dándole un coscorrón-ve a preparar el pedido de Yuuri

-voyyyy-dijo indiferente

Le habían acomodado las cajas de verduras en un diablito que le presto el dueño del negocio, agradeciendo se dirigió de vuelta al carro, pero vaya que pesaban las cajas pensó, tuvo que descansar varias veces a pesar de que era más fácil de llevar, le seguía costando un poco empujar, estaba a mitad de camino cuando la llanta se atoro en el surco de unos adoquines, trato de empujar pero nada no lograba moverlo, frustrado decidió llamar a su hermana tal vez entre los dos podrían sacar la llanta atorada.

-cerdo? -dijo alguien a lo que el pelinegro volteo

-yurio?, que casualidad que haces por aquí

-vine de paseo con Beka y tú, estas esperando a alguien?

-jaja, no, solo estoy atorado

-oh, la llanta pensé que tu estaba atorado, jaja-rio con burla

-yurio, soy mayor que tú, no deberías insinuar que estoy gordo

-yo nunca dije que estabas gordo-dijo haciendo que Yuuri se sonrojara al haberse dicho gordo a si mismo-Beka!!!! ¡¡Corre!!-grito Yuri haciéndole señas a un chico

-que pasa cariño-dijo llegando rápidamente al lado del rubio

-mira te quiero presentar a Yuuri-dijo señalándolo