Depredador en DXD

Capítulo 3 Un ser misterioso.

En algún lugar desconocido, se podía ver una habitación bastante amplia con estilo medieval, uno de los extremos estaba un trono en el que se encontraba sentado el cadre más propenso a la violencia de Grigori, Kokabiel, algo que distinguía mucho a este cadre era el hecho de tener un aspecto muy diferente al de los demás caídos, tenía el cabello largo, cubriendo la mitad izquierda de su rostro, la piel pálida, dientes afilados y orejas alargadas y puntiagudas. Él se encontraba sosteniendo un libro mientras observaba una página en la que aparecía una imagen de una escultura en piedra de una figura humanoide sobre una pirámide, bajo la imagen aparecía el título "Cazador de las estrellas"

—Estás segura de que era uno —hablo alzando la mirada, frente a él estaba Reynare de pie.

—Sí —respondió bastante segura de sí misma.

—Tienes pruebas —siguió cuestionando el cadre.

—No tengo pruebas, pero tampoco dudas.

Kokabiel sonrió, observo de nuevo la imagen del libro —Interesante... —cerrando el libro—. Dejando esto de lado, todo va de acuerdo a lo planeado —cuestiono con una mirada severa.

Reynare se tensó al sentir la mirada sobre ella —Sí, estamos esperando la llegada de la chica en una semana, justo dos días antes de la extracción.

—Excelente, en donde esta ella ahora.

—Tengo entendido que está en New York, nuestros hombres han estado teniendo problemas con demonios renegados que invaden nuestros territorios, la enviamos para que ayudara y reducir las bajas.

—Ya veo, continua como hasta ahora, pero recuerda Reynare, la sacred gear es mía —sentencio mientras liberaba poder en forma de aura —. Solo yo puedo sacar su máximo potencial, así que no intentes nada o lamentaras las consecuencias.

Tragando saliva y bastante nerviosa la caída respondió —S-sí, lo entiendo perfectamente.

—Bien... —dejando de emitir su aura—. Si este... "cazador de las estrellas" vuelve a aparecer infórmamelo de inmediato.

—E-entendido —respondió nerviosa.

—Puedes retirarte, y no lo olvides, no se atrevan a fallarme.

La caída asintió y desapareció en un círculo mágico, después de que se fuera Kokabiel volvería a revisar el libro viendo de nuevo la imagen del principio, una sonrisa se formó en su rostro, una leve risa hizo su aparición, la risa se volvió más fuerte a cada segundo hasta que se convirtieron en carcajadas que resonaron en toda la habitación, entonces se detendría de golpe.

—Así que han regresado, "cazadores de las estrellas", bien, es hora de cobrarles lo que me hicieron —comento con odió en su voz.

Al mismo tiempo movió el cabello que cubría la parte izquierda de su rostro, revelando una enorme cicatriz que empezaba desde la frente, pasaba por el ojo izquierdo que aun podía ver, bajando hasta terminar en el mentón.

Mientras tanto, de regreso a ciudad Kuoh, específicamente a la única iglesia de la ciudad, en una de las tantas habitaciones se podía ver a Reynare golpear con fuerza un viejo escritorio, el cual termino agrietado, en su rostro solo había rabia.

—¡Maldito, maldito seas Kokabiel! —hablaba llena de rabia—. Amenazarme de esa manera... Juro que lo pagará, la sacred gear será mía, le enseñare, le mostrare de lo que soy capaz, ya estoy harta de ser vista de menos...

Apretando los puños y dientes por unos momentos, finalmente suspiraría pesadamente antes de recuperar la compostura, sacudió sus ropas que consistían en una falda negra por sobre las rodillas, una blusa blanca ceñida y zapatillas negras, se puso en marcha, tras caminar entre los pasillos llego a una habitación que era usada de comedor donde encontró a Kalawarner y Mitel tomando té.