Depredador en DXD

Capítulo 11 ¿Una Leyenda entre Facciones?

Oscuridad, eso era todo lo que podía ver, sin importar hacía donde mirara no había nada más que oscuridad, mi cuerpo me dolía, sobre todo la cabeza además de que se sentía agotada, apenas recordaba lo que había pasado antes de que todo se oscureciera, trato de pedir ayuda, pero su voz no surgía.

—Despierta... 

Una horrenda voz resonó en la oscuridad, grave, pesada, sombría, como si de una enorme bestia se tratara.

—Despierta... —se escucho de nuevo, pero ahora con mayor fuerza.

De entre la infinita oscuridad se dio con la sorpresa de un par de ojos de un intenso rojo la veían, eran enormes al punto de que sentía como una hormiga siendo observada, debajo una fina línea surgió extendiéndose por lo que parecieron varios metros, se trataba de una enorme boca la cual poco a poco se iba abriendo revelando una enorme cantidad de dientes afilados.

—¡Despierta! —se escucho al instante que aquel rostro de pesadilla abriera sus enormes fauces y la devoraran.

Con un corto grito Asia despertaría levantándose de golpe, respirando agitadamente, estaba sudando y su corazón latía tan rápido que parecería que en cualquier momento abandonaría su pecho, se abrazo a si misma tratando de comprender que estaba pasando, pronto un pulsante dolor invadió su cabeza por lo que se la sujeto, entonces sintió su cuello húmedo y pegajoso, al pasar sus dedos descubrió que se trataba de su sangre, tenía una herida en la parte trasera, sumado al dolor el cual era tal que se vio obligada a usar su sacred gear, el dolor fue desapareciendo.

Cuando finalmente estuvo curada fue que se percato de su alrededor, escombros y polvo que aun se asentaba, fue entonces que lo vio, el cuerpo del cazador a un par de metros de ella, observo como su pecho apenas se movía, aun respiraba, entonces finalmente comprendió lo que había pasado recordando el momento exacto en que perdió el conocimiento, viendo que de la antigua iglesia ya solo quedaban escombros.

Viendo al cazador entendió que él la había salvado, pero aun era incapaz de comprender por qué, se acerco viendo con horror su estado, heridas que no paraban de sangrar, un enorme charco de sangre debajo suyo, trago saliva, intento alejarse recordando la matanza que había hecho, pero la escena en la que la dejaba ir sin hacerle nada se repetía en su cabeza, había sido la única a la que le había perdonado la vida, veía de un lado a otro en busca de una respuesta la cual nunca aparecería, finalmente se rindió al hecho de intentar engañarse a si misma para dejarlo a su suerte, después de todo ya lo había hecho con Kalawarner.

Se arrodillo a su izquierda y coloco sus manos sobre su pecho, un resplandor verde surgió, las heridas del cazador empezaron a ser sanadas poco a poco, al igual que su respiración se iba normalizando, pasaron cerca de diez minutos cuando el cazador despertó de golpe sujetando las manos de Asia quien grito de miedo pidiendo que no la lastime, él la soltó sin hacerle nada y tras ponerse de pie hizo una simple pregunta.

—¿Por qué?

Asia respondió indicando que él le salvo la vida, y ella haría lo mismo, el cazador acepto la respuesta sin tanto rodeo, pero entonces la chica haría una cuestión que termino tomando por sorpresa al cazador, sobre todo por lo que la chica dijo después.

—Esa marca es la que usan los miembros de la orden de San Jorge.

Al mismo tiempo que señalaba su pecho, específicamente la marca que obtuvo hace mucho y que le valió el rango que cargo con orgullo hasta él día que todo cambió.

—¿Qué? —fue lo único que pudo decir.

Soltó su mascara y se acerco a Asia quien se encogió de miedo al pensar que le haría algo, para su sorpresa el se detuvo justo frente a ella.