Capítulo 4. Un nuevo objetivo.

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Nos ubicamos en la iglesia, actual base de los caídos, Reynare discutía con Kalawarner sobre los preparativos para el ritual de extracción.

—Cuanto tiempo tendremos —cuestiono la pechugona caída.

—Alrededor de una hora como máximo y mínimo treinta minutos —respondió la caída menor.

—Qué hay de los refuerzos.

—Llegaran dentro de poco, antes del mediodía.

—¿Cuantos?

—Al menos cincuenta, Kokabiel sabe que este es territorio de demonios y no quiere arriesgarse.

Antes de que alguna pudiera decir algo más, Donasik entra de golpe, interrumpiendo a ambas.

—Reynare —llamo serio—. Tenemos problemas.

Confundidas, ambas mujeres se vieron entre ellas desconcertadas, la mencionada regresaría su atención a su compañero.

—¿Qué quieres decir? Habla.

—Algo está pasando en esta ciudad, los demonios están bastante alterados.

—¿Qué? Estas seguro —interrogo preocupada por un posible nuevo problema.

—Lo estoy, solo esta mañana ya detecté a por lo menos diez familiares merodeando por toda la ciudad, también los demonios han estado moviéndose por todos lados, parece que buscan algo.

—Acaso ya saben de nuestros planes —cuestiono Kalawarner preocupada.

—Lo dudo, no es a nosotros a quien buscan, es algo o alguien más, pero por el nivel de búsqueda debe ser importante, si alguno se llega a encontrar con la chica, es seguro que detectarán la sacred gear y querrán llevársela con ellos.

—Maldita sea, justo en estos momentos —la ira se hizo presente en Reynare.

—Qué hacemos, si dejamos pasar la oportunidad Kokabiel nos matara por inútiles —comento Kalawarner con cierto miedo.

—Qué quieres que haga —Donasik también se veía preocupado.

—La chica llegara hoy, Kalawarner ve por ella, debemos asegurarla, contigo junto a ella los demonios lo pensaran dos veces, si intentan algo alértanos de inmediato —viendo a su compañera que se veía molesta, pero al final acepto.

—Qué hay del otro —el caído cuestiono de nuevo.

—Se supone que llegara esta tarde, pero él no importa. Lo realmente importante es la sacred gear de la chica, con la noche del ritual tan cerca —reafirmo la importancia del ritual.

—Duplicare la seguridad —hablo la mayor, antes de retirarse.

—Ve, Donasik, busca a Mitel y llévala contigo, mantengan vigilado los movimientos de los demonios, si algo pasa debemos estar preparados.

Donasik asintió y se retiró del lugar, mientras Reynare se quedó pensando y bastante molesta.

Ese mismo día, tiempo después de la reunión de los caídos, en otra parte de la ciudad, Isse no se había sentido bien por lo que decidió saltarse las clases, escapándose de la escuela camino sin rumbo hasta llegar a un parque, estaba bastaste metido en sus pensamientos sobre lo que ha estado pasando esa última semana, y como han estado alertas y vigilando todo el tiempo, así como los contratos que ha hecho y de los cuales no ha logrado completar ninguno, cuando fue sacado por el sonido de algo caer al suelo, observo a los alrededores viendo a una chica en el suelo, una maleta abierta junto a algunas pertenencias regadas, junto a ella también se encontraba una hermosa y bien dotada mujer que la veía con cierta molestia.

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