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Cuando llegué a casa me encontré a Dominic en la puerta esperandome. Tenía una notoria cara triste y apagada, se notaba que tenía sueño. Corrió hacía mi al verme llegar.

— ¿Donde has estado?— dijo con un tono de preocupación.

En ese momento sentí todo el cansancio acumulado durante todo el día. No lo había notado con la adrenalina que sentí cuando Felix me atacó.

— Entra, te lo contaré todo— dije sacando las llaves del bolsillo para abrir la puerta de mi piso.

Bostezé y me senté en el sofá del salón. Dominic se sentó junto a mí.

— ¿Que te pasa, Ash? Me estas preocupando— cogió uno de mis mechones y los colocó detrás de mi oreja.

No pude evitar ponerme a llorar. Después del subidón que había tenido después de que Devin atacase a Felix ahora sólo tenía ganas de llorar por lo que había ocurrido. Hasta para un vampiro era demasiado, tenía sueño.

Dominic intentó consolarme y me limpio todas las lágrimas, cuando por fin me tranquilizé, decidí hablar. Mi problema no se solucionaría con lágrimas, tenía que contarle todo lo ocurrido.

— Dominic, Felix ha intentado algo conmigo— solté.

—¿Que? — se sorprendió al escuchar eso, estaba segura de que no se lo esperaba.

— Felix empezó a besuqearme aunque le dijiese que no quería, después empezó a agarrarme fuertemente, no quería soltarme y entre en pánico— le expliqué.

— ¡¿Como se atreve ese bastardo!?— dió un golpe contra la pared con el puño derecho. Nunca lo había visto tan enfadado, llevábamos años siendo amigos, aún así él siempre se mostraba tranquilo. Me había sorprendido mucho verlo de esa manera.

— ¡Lo va a pagar y muy caro! — dijo con un tono de voz serio y elevado.

— También hay otra cosa que quiero contarte— trague saliva y me prepare para contarle lo de Devin— Conozco a un chico que también es vampiro, él fue quien me ayudó a librarme de Felix. Lo atacó, si no fuese por él lo más probable sería que no me soltaste e hiciese lo que quisiese conmigo—

— Me siento fatal por haberte dejado marchar con él, nadie debería salvarte a parte de yo— realmente estaba decepcionado consigo mismo— Perdoname Ashira, haré lo que sea para que ese idiota pagué por lo que ha hecho, no merece trabajar con nosotros. Es un hipócrita, no puede ir por allí fingiendo ser un doctor que ayuda a enfermos y después hacerle daño a otras personas—

— No te preocupes tanto por mi, Dom. No me ha pasado nada gracias al vampiro que me salvó— intenté calmarlo.

Gracias a Dios, Dominic no me hizo más preguntas sobre aquel vampiro que me había salvado. De no habérselo contado, me habría sentido muy mal por ocultarle algo así.

— Tendrás que agradecérselo otro día— dijo con una sonrisa triste. No sólo tenía que darle las gracias por haberme salvado de las manos de ese monstruo llamado Felix, sino que también tenía que pedirle perdón por todo lo que le había dicho.

— Puedes marcharte a casa, necesitas dormir—

— ¿Estas segura? —

— Si, estaré bien— me despedí de él y le desee las buenas noches.

Caí rendida en mi cama tan pronto como se marchó de mi casa. Estaba muy pero que muy cansada, le había dado unas vueltas a la discusión que había tenido con Devin. Me sentía muy mal tras haberlo tratado así, tenía que hablar con él y aclarar todo. Estos fueron los últimos pensamientos que tuve antes de quedarme dormida.

BLOOD BAGSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora