Cap. 3

53 8 3
                                    

Alexander

Me estoy volviendo loco, hace dos meses que la busco y no la encuentro, todos los días recorro el centro comercial y los alrededores para encontrar alguna pista pero nada. Mis padres me dicen que no me obsesione tarde o temprano la volveré a encontrar, ¿pero cuando? los días pasan y no sé nada si tuviera una pequeña pista. Algo me dice está cerca pero donde, mis días son tristes, paro enojado si hubiera llegado unos momentos antes... ¡no se!

Mi mente está en ese olor, recordando... tratar de concentrarme es difícil.

- Tierra, llamando a Alex ... ¡¡¡ Aleeeexx!!! - ante ese grito recién reacciono.

- ¡¿Qué... qué quieren?! - respondo de mala manera, a mis amigos no me pueden dejar en paz.

- Concéntrate, estamos entrenado - ante tal respuesta resoplo, tratando de tener mi mente en el entrenamiento.

Las siguientes dos horas pasaron de manera lenta, por fin estoy de camino a casa con la mentalidad de ir de nuevo a buscar pistas, no se puede haber esfumado de la nada.

(...)

Cuando iba de salida - ¿de nuevo vas a buscarla?- ante tal pregunta me detengo y volteo.

- Si, cada día siento que está cada vez más cerca.

- Ya lo hablamos, trata de estar tranquilo...

- Pero, ¿no sabes cómo me siento?- respondo interrumpiendo sus palabras, con un nudo en la garganta cada día me desmorono ante no hallarla.

Ella camina hacia mí y me abraza - mi pequeño, sé que tu animal interior no va a estar tranquilo hasta tenerla a tu lado, pero te está afectando - sin poder evitarlo comienzo a llorar como un niño - ya mi pequeño cálmate - dice mientras me reconforta en sus brazos.

Entre hipidos respondo - sí, ¿no la vuelvo a encontrar?- ella me suelta y agarra mi rostro - Alex, hijo no pienses en eso la diosa luna no te haría eso, ya la volverás a ver. Ante tales palabras le brindo una pequeña sonrisa.

- Ya tranquilo, aprovechemos que los diablillos están con tu padre y pasemos un día de madre e hijo - le brindo un abrazo, y así lo hicimos el resto de la tarde vimos películas y comimos todo tipo de dulces.

(...)

Despierto y estoy más tranquilo que ayer, tenía que decir todo lo que sentía. Justo hoy no tengo entrenamiento, lo pasare en casa con mi familia. Eso espere, mientras tomábamos desayuno mis padres me informaron que en la tarde tienen una reunión con el alpha y la luna, sobre la coronación y cambios de mando, hoy no estarían con nosotros, tendría que cuidar a los mellizos.

(...)

Los diablillos están inquietos quieren salir por eso les llevare al lado sur de la manada que colinda con otro territorio, ahí hay una vista hermosa y bastantes flores perfecto para que jueguen.


Esperanza

Ya pasaron dos meses desde que escuche esa hermosa melodía, aun la tengo presente en mi mente, quise volver a ir al centro comercial pero no pude con las clases y trabajos, además que ya comenzaron las prácticas en el hospital. Por suerte ya sali de vacaciones, por fin pero igual tengo que ir al hospital.

Ahora estoy con Ian dando un pequeño paseo, ya que mis padres salieron a visitar a unos amigos.

- ¡¡Lansha, ¿hoy volaremos la cometa?!!

- Si, hoy aprenderá a volarla - respondo con una sonrisa, la semana pasada fue su cumpleaños, todo salió como queríamos y bueno mi tío le regalo una comenta, esa que tanto quería con la imagen de su dibujo favorito Spider man.

(...)

Después de caminar un buen tramo llegamos al lugar perfecto cerca de la frontera, era hermoso el lugar flores había por doquier aparte había un viento perfecto para poder volar la cometa.

Ian con miedo agarro la cometa pensó que se iba ir volando, cuando tuvo más confianza salió corriendo con una gran sonrisa en su rostro. Cuando se cansó de volarla comenzó a correr por todo el lugar, mientras yo subí a una pequeña colina para poder apreciar toda la vista del campo tan verde daba una sensación de paz.

De pronto, escuche una melodía cada vez cerca no podía ser, era el mismo sonido de violines de ese día, cuando estaba a punto de voltear sentí un fuerte apretón empujándome, así haciéndome perder el equilibrio y rodar cuesta abajo.

- Te encontré... - escuche eso mientras rodamos


Alexander

A punto de llegar a la frontera sentí un hermoso aroma tenue, era el mismo de ese día, no había error era mi mate. Con un impuso salí corriendo cada vez que me acercaba aumentaba más fuerte el olor a naranja y canela. Y si, al llegar encima de la colina había una chica parada, tenía el cabello largo negro hasta la cintura, delgada pero con curvas, ella era mi mate.

No soporte más, tenía que tenerla en mis brazos, tocarla y ver que no era una ilusión, que era real y no era un juego de mi mente. Subí de manera veloz, abrazándola instintivamente - te encontré.... - fueron las únicas palabras que pronuncie mientras rodábamos cuesta abajo.

Mientras rodábamos le di vuelta tratando de protegerla con mis brazos, quería procurar que no se haga más daño.

- ¿Estás bien?, preciosura - pregunte de manera rápida pues ella había acabado encima de mí, al escuchar mis palabras alzo la cabeza con un movimiento rápido aparto todo el cabellos de su rostro, y por fin pude apreciar como era tenía la piel blanca, mejillas sonrojadas,nariz pequeña, sus ojos de un hermoso color avellana, labios gruesos de untenue rojo, es hermosa no la palabra se queda corta es perfecta y es mía.

- E... eres tú - contesto de manera temerosa, al escuchar su voz mi corazón latió de manera rápida. Sin evitarlo salió un suspiro de mi boca y comencé a sonreír. - Por fin te encontré... nena...


:) Espero que les guste por fis dejen sus comentarios y voten. <3

Pertenezco a tiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora