Capítulo 4

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El híbrido continuaba mirándola tan fijamente, dándose cuenta de lo diferente que lucía. Su cabello ya no le llegaba a la cintura como antes, ahora lo llevaba a la altura de los hombros, su vestimenta era diferente, lo que la hacia lucir como toda una mujer imponente y ya no como aquella que era su dulce niña en 1920, pero ¿cómo era posible que estuviera ahí?.

- Yo también te extrañé, tío Klaus - le sonrió.

- ¿Tío Klaus? - cuestionó la mujer castaña confundida - ¿acaso Elijah tuvo también un hijo milagroso?

- No - le respondió Shailene - Elijah también es mi tío - llevó su mirada hacia ella - tú debes ser la mamá loba - dedujo con una sonrisa ligera.

- Soy Hayley Marshall - se presentó.

- De antemano disculpa los modales de mi tío Klaus - se adelantó de decir mirando al susodicho, quien ya estaba poniéndose de pie - no lo recordaba tan violento.

- Iba a tomar mata lobos - intentó justificar su violencia.

- Sigue siendo una mujer y no tienes porque ponerle una mano encima - le retó Shailene cruzándose de brazos.

- ¡Nik! ¿Qué es todo ese alboroto? - se escuchó una tercera voz por el pasillo.

Era imposible que ella no reconociera esa voz, no cuando la reconocida como la voz de la única figura maternal que tuvo toda su vida. Entonces Rebekah se integró a la escena con el ceño fruncido, ella parecía molesta, pero no por el estruendo, sino por otra cosa; su mirada se posó en la nueva presencia de la mansión, sin siquiera imaginarse de quién se trataba.

- Shailene - dijo con un hilo de voz, sintiendo sus lágrimas acumularse.

- Tía Bekah - contestó de la misma antes de lanzarse a los brazos de ella.

- Oh, cielo - la apretó fuerte contra sí misma y sus lágrimas cayeron - creí que...

- Que estaba muerta - completó por ella, la voz le tembló - lo sé, pero estoy aquí.

Hayley observó la forma en la que Rebekah y hasta el mismo Klaus cambiaron sus comportamientos con la aparición de la castaña que le salvó la vida, tenía demasiadas preguntas, pero supo que no era el momento para hacerlas, por lo que decidió desaparecer de escena para caminar hacia el patio trasero. Shailene notó que Klaus se acercaba hacia ella y Rebekah, por lo que liberó a su tía del abrazo.

- Amor, yo... - no encontró palabras para hablar. Ella solo lo abrazó.

- Cállate y abrázame - se le escaparon unas lágrimas.

El híbrido la abrazó como lo hubiera hecho años atrás, no le importaba que ya no fuera una niña pequeña, aquella que solo se preocupaba por jugar en las tardes con Kol. Kol, su hermano. El corazón se le estrujó al recordar a su hermano ardiendo en llamas en la casa Gilbert, ¿cómo iban a darle a Shailene una noticia como esa?

- Estoy al tanto de lo de Hayley - comenzó ella liberándolo del abrazo.

- Elijah es el responsable - se adelantó a contestar - él fue quien aceptó el trato con las brujas.

- ¿Estás seguro de eso? - cuestionó incrédula.

- Por supuesto que sí - Shailene miró a Rebekah en busca de algo más, pero nada - yo no quiero a ese bebé - agregó el híbrido haciendo que su sobrina lo mirara de nuevo.

- ¿Entonces qué es lo que quieres?

- Poder - hasta ese momento pudo ver el lado oscuro de nuevo.

- Hubo un tiempo en el que tú y el tío Elijah decían que la familia era poder - mencionó soltándole las manos - ¿lo recuerdas?

Esas palabras lo abofetearon fuertemente. No era la primera vez que se lo decían desde que esta situación comenzó, pero el que Shailene se lo hubiera dicho le causó gran impacto.

- No lo entiendes - dijo suavemente negando con la cabeza.

- Claro que lo entiendo - insistió la castaña - ¿de verdad vas a dejar que ese bebé crezca sin un padre?

Tenía otro punto, ninguno de los dos había crecido con el amor de su auténtico padre, pero tampoco podía dejar de creer que las brujas tan solo estaban manipulándolo junto con Hayley, después de todo estaban desesperadas por sacar a Marcel del barrio francés, harían lo que fuera para que pudieran usar su magia con libertad.

- Ambos sabemos lo terrible que es - continuó - la decisión es tuya al final.

De pronto pudo escuchar una vez más a Elijah diciéndole que este era un regalo y una nueva oportunidad para ser una familia, para recuperar todo lo que habían perdido, y eso incluía a la misma Shailene. Creyó que lo último jamás sería posible, pero ahora ella estaba frente a él, dándole nuevamente esa esperanza.

- ¿Dónde está mi tío Elijah? - preguntó retomando su postura.

Rebekah lanzó una mirada fulminante hacia su hermano mayor y Klaus tan solo evitó mirar a cualquiera de las dos mujeres que tenía de frente directo a los ojos, lo que motivó todavía más a Shailene exigirles una respuesta con la mirada.

- Él... probablemente está de vacaciones - contestó finalmente Klaus de forma vaga.

- Maldita sea - murmuró interpretando las palabras y negó con la cabeza.

- Shailene... - quiso adelantarse a explicar.

- ¡No! - elevó la voz - no me digas que te atreviste a usar una de esas malditas dagas sobre él.

Por supuesto que ella las conocía, después de todo con una de esas mantenía neutralizado a su padre años atrás, pero se negaba a creerle a Claire cuando le dijo toda esa parte de la historia.

- No me digas que mi tío Elijah es esa ofrenda de paz de la que todo mundo habla - continuó.

- Te lo dije, idiota - le lanzó en cara la rubia.

- Rebekah - replicó enojado, no era necesario que le tirara su error en cara, no de nuevo.

De lo único que Shailene podía estar segura es que su familia definitivamente ya no era como antes, ahora todo era mucho más violento y frívolo de lo que ella recordaba.

- Tengo un plan - agregó Klaus.

- Y más te vale que lo tengas - la castaña asintió con la cabeza - si no quieres que yo sea quien vaya a matar a Marcel ahora mismo.

Claro que no podía hacer algo como eso, Marcel era casi un siglo más grande que ella, pero de alguna manera tenía que hacerle ver a Klaus que ya no era más esa niña a la que podían esconderle las cosas, ya ni siquiera era esa dulce joven de 1920, la novata en ser vampiro, aunque si era realista de alguna forma aún lo era. Con esto último decidió evadir tanto a Klaus como a Rebekah para salir hacia el patio trasero, donde estaba la piscina, se sentó un uno de los camastros y se quedó en silencio mirando hacia la nada, ¿cómo recuperaría a Elijah de las manos de Marcel? Bueno, al menos matar a Jeremy le había salido bien, algo se le ocurriría.

- Se que apenas nos conocemos - dijo una voz sacándola de sus pensamientos - pero de verdad agradezco lo que hiciste por mí - Hayley estaba sentada a su lado.

- No es nada - sonrió con ligereza - entre chicas debemos protegernos - repitió las palabras que Rebekah alguna vez le dijo.

- Tú... ¿realmente eres sobrina de Klaus, Elijah y Rebekah? - no terminaba de creerse esa historia.

- Si - contestó - la magia sirve para muchas otras cosas aparte de dañar a vampiros y lobos.

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Perdóneme por no haber actualizado antes, pero de verdad que la universidad me mantuvo muy ocupada en estos últimos días y apenas tenía tiempo para comer.

Dejando eso de lado, ¿qué les pareció este capítulo? Si tienen alguna sugerencia comenten, ¿qué les gustaría ver esta temporada con los Mikaelson? Enserio acepto sugerencias para no hacer esto algo tan monótono. Recuerden votar y comentar, les estaré leyendo... Y esta vez de verdad prometo estar actualizando cada semana.

The Original Family ⚰ (Temporada 2)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora