Juego de poder: Orden y Caos

I. El juego comienza (3)

3.

Era el 07 de febrero de 1980. Se escuchó un llanto, el llanto de un bebe recién nacido. De un negrito ojos azules, de un niño sin padre. Ya habían pasado varios meses desde lo sucedido en aquel bar, desde el dolor de cabeza de Doroty, en todo aquello el sorpresivo embarazo se hizo cada vez más evidente, sorprendiendo así tanto a su madre como a sus amigas. Nadie se esperó aquel hecho. Les llego de lleno a más de uno, siempre dejando un mal sabor de boca, siempre viniendo con un pensamiento que nadie podía pensar por sí mismo: " va a tener un hijo fuera del matrimonio. Y no sabe cuál es el padre". Siempre el mismo pensamiento, capia fiel y exacta.

Él bebe nació y sorprendió a más de uno igualmente, el doctor que llevo el parto y recibió al pequeño a este mundo se sorprendió mucho a descubrir que era negro. Efectivamente su piel era de un color morena, pero se sorprendió aún más cuando él bebe al abrir los ojos por primera vez se llevó la sorpresa de su color.

- son azules - dijo con sorpresa y admiración. Miraba al pequeño en los brazos de su madre. A ella no le hizo falta asimilar nada, simplemente lo vio y por alguna extraña razón supo que era su hijo. Que no era ninguna broma, aquel niño era suyo y ella estaba orgullosa.

Lo sostenía en brazos, envuelto en una manta blanca. Ella estaba sentada en la cama de una habitación en el hospital general de kansas-city. Lo observaba estudiando con mucho cuidado su carita, sonreía y se sorprendía al descubrir que aquel niño se parecía un poco a su difunto padre.

- mira ma... - dijo en voz alto pero se detuvo en seco. Aun no lo aceptaba, seguía sin hacerlo. Miro la pequeña habitación donde estaba, solo ella, el doctor Prat (aquel que había entendido su parto), y nadie más. Su madre no estaba. Ya había aceptado el embarazo sorpresa, incluso estaba un poco emocionada por conocer a su nieto, pero claro que los primeros meses no fueron fáciles. Ella no le dirigía la palabra a su hija a menos que fuera realmente necesario, pero poco a poco lo fue asimilando hasta el momento en que descubrió el color de piel del bebe. Al saber su color hizo que una de sus amigas la recogiera a las afueras del hospital y la llevara a su casa. Doroty se había enterado de aquello por su amiga Sinaí, la cual era la única que aun permanecía allí, en el hospital. Todas las demás también se habían marchado al enterarse de la noticia: "zorra - pensaban mientras salían del lugar".

Doroty hubiera llorado al enterarse de aquello, al saber cómo la trataban, pero nada de eso le importo al ver el rostro del bebe, solo pensó: "pobre de ellos, se pierden de él".

- hola pequeño - dijo con ternura al bebe en sus brazos. El doctor aún seguía mirándola. Más que por vigilar su estado después del parto seguía perplejo por él bebe de ojos azules. Nunca había visto nada igual, aquello era una buena forma de comenzar la década, con esperanza. Aquel bebe represento a sus ojos esperanza, el doctor no comprendió del todo la idea pero la guardo.

>- hola mi pequeño, - continuo - te pareces a tu abuelo. A mi padre. Ahora me gustaría presentarte a tu abuela, a mi madre. Pero ella no está, he intuyo que se fue por el color de tu piel, pero eso no importa, porque también intuyo que al conocerte cambiara su pensar sobre ti - pero ella no lo hizo, la madre de Doroty (Marge), no cambio su actitud hacia Thomas. Muriendo en 1982 (dos años después) sin haber amado al pequeño.

Él bebe lloro solo unos minutos después de que el doctor le llevase a brazos de su madre. Lloro con ganas, como aquel que llora por un ser querido que ha muerto. El niño lloro hasta que se cansó, y por una extraña razón miro a su madre deteniendo el llanto de inmediato. Observo a la mujer que le sostenía, su mirada vacía la observo y su vista sonrió. Sabía instantáneamente, al momento en que sus miradas se cruzaron, él supo quién era ella. Y dejo de llorar. Se sintió protegido, era débil y ella fuerte. Santo por primera vez en su vida el amor reflejado en los ojos de su madre, su amor.