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-Vaya, eso es sexy -dijo Jimin. Los vellos de las piernas de él se erizaron por la piel de gallina, siguiendo el camino de sus manos.

-Lo aprendí de ti. Y todavía no te he visto completo.-El comentario trajo una sonrisa a los labios de Jimin mientras estudiaba su forma increíble y su pene rígido.

Durante su última reunión, no había tenido el tiempo para mirarlo de cerca, y ahora, estaba hipnotizado. Sus dedos se deslizaron alrededor de la parte interna de sus muslos y avanzaron hasta que encontró su escroto. Tiró y lo acarició mientras su otra mano corría a lo largo de su longitud. Tomó la cabeza de su polla en su boca. El pre-semen golpeó sus papilas gustativas y pasó la lengua alrededor de su cabeza, y le sorprendió saber que el sabor de él lo excitaba.

Hacer una mamada nunca fue algo que le gustara, sino más bien algo que tuvo que soportar, y sabía que no era muy bueno en ellas, pero después de la forma en la que Jungkook lo hizo venir con tanta violencia y la forma en que su cuerpo respondía a sus caricias, estaba decidido a hacer todo lo posible para que fuera una mamada que recordara.

Jungkook acarició el cabello de Jimin mientras el recorrió la longitud en su boca. Su lengua, al parecer, tomó vida propia, presionando a lo largo de su carne sensible y girando alrededor para estimular la piel lo más que podía alcanzar. Lo tomó profundamente, y se sorprendió cuando sintió que le golpeó la parte posterior de la garganta y el no se atragantó. Mientras el cuerpo de Jungkook se estremecía y él gemía, Jimin se envalentonó. Agarró su trasero y tiró de él hacia adelante con fuerza. Jungkook dio un grito ahogado, y Jimin trabajó más duro, torciendo la boca alrededor de su longitud. Sus uñas en sus nalgas mientras lo succionaba. Se sentía tan poderoso, en control y caliente. La sábana debajo de él se mojó.

-¡Oh Dios, Jimin!

El rubio sabía que él estaba cerca, mientras extendía la mano para sujetarse a sí mismo de algo, pero sus manos no se encontraron con nada más que con el.

Chupo con toda la fuerza que pudo, apretando su boca con fuerza a lo largo de su polla y empujándolo hacia el una última vez.

No había ninguna sensación, sino el placer al sentir su semen atravesando su garganta. Poco a poco, Jimin lo echó hacia atrás mientras su cuerpo era sacudido por espasmos. Antes de que el lo soltara, él cayó de rodillas y su cabeza cayó sobre el regazo de Jimin. El orgullo lo llenó mientras pasaba los dedos por su cabello y una sonrisa se dibujó en su rostro. Misión cumplida. Pasaron varios minutos antes de que él pudiera moverse, e incluso entonces, sólo fue para levantar su cabeza y decirle al más bajo entre jadeos.

-Eso fue jodidamente increíble -logró decir finalmente.

***

Se sentía como si Jimin hubiera chupado toda la energía de él. Se desplomó en el suelo hasta que los intensos espasmos de su orgasmo terminaron, con la cabeza descansando en el regazo de Jimin. Encontrarlo desnudo en su cama era inquietantemente similar a sus recientes fantasías, sólo que aquellas no incluían un orgasmo tan explosivo, uno aún más poderoso que el que experimentó en su primer encuentro. Él lo sabía, era un esfuerzo inútil, pero él sentía que tenía que al menos tratar de superar su reciente obsesión por este chico que acababa de dejarlo sin poder, y en ese momento, no le importó quien se llevó a su casa, con tal de que fuera Jimin quien los echara y quedarse únicamente con él.

Ahora tenía que lidiar con la vergüenza de Jimin viendo su esfuerzo. Aunque estaba agradecido por llegar a sentirse de esta manera, con la cabeza en su regazo, también le molestó que ahora supiera lo desesperado que se había puesto. ¡Tampoco podía creer que hubiera ido sin rodeos y exigido una mamada! Le hacía sentir como un idiota arrogante. ¿Qué diablos me importa lo que Jimin piensa? Es nada más que un buen polvo, idiota, y va a seguir siendo así.

Fighting Jimin °KookMin° COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora