Fighting Jimin °KookMin° COMPLETA

Capítulo 9

Entrecerrando los ojos por la puesta del sol, Jungkook sacó su coche hacia la ocupada carretera. Su pasajero encendió un cigarro, y preguntó:

-Entonces, explícame, ¿por qué no podemos salir?

-Bin, no fumes en mi carro. -Bajó la ventanilla, esperando que su amigo lo lanzara.

-Lo mantendré fuera de la ventana -dijo, estirando su brazo hacia fuera tanto como podía.

Cuando Jungkook frunció el ceño en respuesta, él dijo:

-Vamos. No pude fumar en el avión, y esperaba tener al menos un par de minutos en el estacionamiento. No pensé que estarías esperándome justo afuera de la maldita terminal. -

Metió el brazo, dando una profunda calada, y lo sacó nuevamente por la ventana, seguido de su cabeza y la parte superior de su torso-. ¿Ves? Ni siquiera te darás cuenta.

Jungkook lo agarró por los pantalones y tiró de él hacia el interior.

-Veo que sigues siendo un lunático. Me alegra ver que la ciudad no te quitó eso.

-¡Nunca! De todos modos, ¿adónde demonios vamos?

-A la casa del videógrafo, a ver algunas de las tomas que ha hecho a partir de los últimos meses. -Reajustó el visor, como si tirar de él lo hiciera más largo y bloqueara el sol-. Créeme, si pudiera librarme de ello, lo haría. Salir en la ciudad contigo es mucho más atractivo que ir a su casa.

-¿Supongo que no te agrada?

-No especialmente -dijo Jungkook con un suspiro.

-Entonces, ¿por qué estás trabajando con él?

Jungkook se encogió de hombros y negó con la cabeza.

-Porque es bueno en lo que hace y nos ahorró algo de dinero. El hecho de que él es un brujo malvado del oeste es sólo el precio que tengo que pagar. -

Un automóvil de lujo alemán se les metió por delante, y él pisó los frenos haciendo sonar el claxon

-Voy a sacarnos de allí lo más rápido que pueda. Entonces podemos salir por ahí.

-Sí -dijo Bin, dándole una última calada de su cigarrillo antes de tirarlo por la ventana.

-He estado esperando conseguir algún coño local de nuevo. -Jungkook lo miró y negó con la cabeza. El mismo viejo Changbin.

-No sé cómo lo haces.

Bin se lamió los dedos y alisó el cabello en sus sienes.

-Es un don.

-En eso tienes razón.

Se estacionaron detrás de la pequeña caja roja que Hoseok tenía por coche. Jungkook se abrió paso por la puerta y bajó las escaleras hasta la entrada de Jimin.

La puerta del patio estaba abierta, Taehyung y los chicos estaban de pie en la cocina viendo a Jimin disponer tazones, cucharas y servilletas para la carne con chile. El aroma picante era pesado. El estómago de Jungkook gruñó.

Taehyung gritó cuando vio a Changbin, y corrió hacia él, con los brazos abiertos.

-¡Oh, Dios mío! Estaba tan feliz cuando Kook me dijo que venías a casa de visita.

Él lo sacudió de un lado a otro.

-Hola, cariño. Yo también te he extrañado. -Taehyung lo besó en la mejilla un par de veces antes de soltarlo para el resto del grupo.

Cuando Bin terminó su ronda, se acercó a Jimin-. Bueno, hola allí chico guapo. ¿Y quién eres tú?

Jimin se rió ante su cursilería y le tendió la mano para que lo saludara.