Fighting Jimin °KookMin° COMPLETA

Capítulo 3

-No me gustan los putos y creo que deberían ser tratados como la basura que son. -Escuchó las palabras viajando por el aire, y se sorprendió de que pudiera hablarle a un hombre de esa manera.

Sin previo aviso, la mano de Jimin voló y lo abofeteó con fuerza.

-¡Eres un imbécil!

-Puto -disparó de nuevo, mientras el escozor se propagaba por su rostro. Cuando la mano de Jimin se levantó de nuevo, él estaba listo y le agarró la muñeca antes de que pudiera hacer contacto, apretándola más fuerte de lo que sabía que debería. Su mano izquierda salió disparada en forma de un puño y le dio en la mandíbula. El duro golpe sacudió su cerebro por un momento, pero aun así tuvo el razonamiento suficiente para agarrar su otra muñeca.

Mirándolo, preguntó:

-¿Terminaste?

Jungkook sostuvo sus muñecas hasta que vio que su respiración comenzaba a estabilizarse. Cuando pareció calmado, liberó sus manos, pero tan pronto como lo soltó, él extendió las manos y le agarró ambas orejas, tirando de ellas lo más fuerte que podía.

-¿Qué demonios, Jimin? -El dolor era inmenso. Jungkook le agarró las manos para alejarlas, pero eso sólo hizo que él tirara con más fuerza. No pudo evitar agachar su cuerpo, tratando de seguir la dirección en la que estaba tirando.Le apretó las muñecas para evitar que tirara más fuerte, pero cuando intentó alejarlo, las uñas le arañaron la piel.

La ira lo llenó, y tiró de su brazo tan fuerte como pudo, pero su agarre era tan fuerte que eso no hizo más que ponerlos a ambos de rodillas y enviar espasmos de dolor por su cuerpo.

Con una voz profunda, Jimin enunció cuidadosamente:

-No me hables así. ¿Me escuchas? -Al final, estaba casi gritando y sus dedos se clavaron en sus orejas incluso con más profundidad. Él no contestó, no podía, mientras luchaba por tomar aire a través de su dolor. Sobre sus rodillas, Jimin lo tenía al nivel de su pecho, y el se asombró de que eso lo tuviera tan duro ahora mientras sus pezones se tensaban contra la delgada y sedosa tela y apuntaban hacia su rostro.

Sin pensarlo, empujó su cara contra su pecho y succionó un pezón dentro de su boca. mordió tan fuerte como pudo. Con un grito, el pequeño rubio liberó sus orejas y el cayó al suelo.

Se dejó caer encima de él, con las manos todavía agarrando sus muñecas, y su pezón todavía entre sus dientes.

Sujetó sus muñecas juntas en las húmedas tablas de la superficie, estirando sus brazos sobre su cabeza, manteniéndolos lo más lejos posible de él. Su respiración llegó en breves ráfagas mientras Jimin se tensaba contra él y Jungkook mordía un poco más fuerte hasta que dejó de forcejear. Cuando las lágrimas llenaron sus ojos, liberó su mordedura.

-Hijo de puta, ¿qué demonios? -Escupió, luchando por respirar-. ¡Te juro que te voy a matar! -Jimin se contoneó debajo de su peso, tratando de liberarse. Mientras se retorcía, Jungkook sintió a su polla moverse, a pesar de que sus orejas todavía ardían y palpitaban.

-Buena suerte. Pareces no estar en condiciones de hacer algo. -Sus ojos se oscurecieron de ira mientras se esforzaba por recuperar el aliento.

-No puedes mantenerme aquí todo el día; con el tiempo tendrás que dejarme ir, y cuando lo hagas...

-¿Vas a hacer qué? -Lo interrumpió-. Créeme... no voy a soltarte hasta que me asegure de que es seguro hacerlo. Tengo todo el día para estar tendido aquí si tengo que hacerlo. -Su polla estaba dura como una roca, y sabía que el más bajo podía sentirla, especialmente cuando se retorcía debajo de su peso.

Jungkook se levantó ligeramente para encontrar una posición más cómoda, y aunque fue casi imperceptible, Jimin levantó sus caderas hacia él. Mirando hacia abajo, vio sus pezones endurecidos contra la seda blanca. Se lamió los labios.
-Sip -siguió mirando su pecho-. Podría entretenerme todo el día, justo aquí. -El cuerpo de Jimin tembló. El odio brilló en sus ojos.