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Durante los días que estuve ingresada, sentía que el tiempo se estiraba como si fuera una eternidad. Las blancas paredes de la habitación parecían cerrarse a mi alrededor. Cada día comenzaba con la misma luz pálida filtrándose por la ventana, y la constante entrada de Pomfrey a la enfermería me hacía deducir cuanto tiempo había pasado desde su última revisión.

Las horas parecían estirarse hasta el infinito, y los minutos se volvieron tortuosamente lentos. Mi mente se perdía en pensamientos oscuros y preocupaciones sobre el futuro incierto que me aguardaba.

¿Algún día encontrarán el antídoto para despetrificarnos a todos?

Pero sabía en que mundo vivía, porque me decían Lucy y Harley el día, el número y el mes. Ellas venían todos los días a contarme todas sus anécdotas y lo que daban todos los días, para que, según Lucy, no perdiera nada, pero nunca me contaron que pasó en pociones para que Snape las castigase, y tampoco mencionaron nada de cuando hicieron las paces. Chloe me contaba sus anécdotas y preocupaciones e incluso una vez vino Theo a visitarme, supuse que había venido sin que Draco se enterase, me hizo tanta ilusión que viniera a verme. Lucy y Harley no venían a hablarme solo a mi, también a Hermione, le contaban que con Harry y Ron ya no hablaban mucho pero Harry actuaba raro de vez en cuando. Adam y Madison también venían cuando podían me leyeron la carta que mamá les envió

Querida Eleonor:

Nos hemos llevado tu padre y yo un susto muy grande al enterarnos que estabas petrificada. Me he puesto a llorar como una magdalena y a tu padre casi le da un infarto del susto que se dió.

Te amamos.

Tus padres.

PD: Te hemos dejado unas ranas de chocolate, como tus hermanos te estarán leyendo la carta te van a guardar las ranas.

Esa carta me subió el ánimo.

Claro, unos minutos.

"Esto es horrible."

"Siento que se me ha congelado la sangre."

Los días se volvieron horriblemente largos y tristes. Cada mañana, al despertar, me encontraba sumergida en una sensación abrumadora de pesadez emocional. Las horas se estiraban como si el tiempo se hubiera detenido para mí.

El sol brillaba afuera, pero dentro de mí, reinaba una oscuridad que parecía no tener fin. Me sentía desconectada del mundo que me rodeaba, atrapada en mis propios pensamientos.

La soledad se convirtió en una compañera constante, que aunque me visitaran cada día ese sentimiento se iba haciendo más grande.

El mundo exterior seguía girando, pero yo me sentía estancada en una especie de limbo emocional encerrada en mi propio cuerpo. Las personas a mi alrededor seguían con sus vidas y yo seguía aquí.

Viendo el tiempo pasar.

De repente escuché un ruido que interrumpió todos mis pensamientos negativos.

"¿Será Lucy? ¿Harley? ¿O tal vez Chloe?"

???: Hola.

"Esa voz... Tan irritante."

"Weasley, ¿qué hace aquí?"

George: Sé que he estado siendo muy maleducado contigo y aunque parezca mentira me estoy empezando a arrepentir.- Se sentó en una silla que había al lado de mi camilla.

"No me lo estoy creyendo."

George: Me parece horrible de mi parte disculparme contigo en estas... ¿condiciones? Igualmente, lo siento muchísimo y si me estas escuchando- Hizo una pausa y tragó saliva.- Cuando te pongan a tu estado habitual me gustaría saber si aceptas mis disculpas.- Me miro con sus ojos color avellana.

George me estaba mirando fijamente y eso me ponía un poco incómoda.

George: Pero que estoy haciendo, estoy hablando con una persona petrificada.- Se llevó las manos a la cabeza.

"Será idiota."

George: Harry y Ron te van a venir a ver y a ti también. Tus hermanos están estudiando para unas pruebas de encantamientos.- Después de eso se levantó y desapareció por le puerta.

"Vaya disculpas."

"Yo sólo quiero que alguien vea mis pistas."

"¿Dumbeldore estará investigando?"

_________

Pasaron las horas y Madame Pomfrey vino ha movernos para que la sangre nos fluya y a idratarnos. Ella estaba cantando una canción, moviéndose de un lado a otro. Al terminar cerró la puerta de la enfermería.

"Esto estaba empezando a ser un infierno."

Eleonor Foster Y la Cámara De Los Secretos Donde viven las historias. Descúbrelo ahora