Capítulo 4

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Todo corresponde a su respectiva autora, lo que no reconozcan como tal es totalmente mío.

TRXHG

Capítulo 4

TRXHG

En cuestión de minutos sus mortifagos saldrían a demostrarle al mundo mágico que él aún estaba presente y que de nada serviría que trataran de comportarse como si nada estuviera pasando. Él era Lord Voldemort y su poder y presencia nunca podrían ser olvidados. El más grande mago de todos los tiempos estaba por alzarse con el control de la comunidad magia. Lo único que faltaría seria Ella.

Esa noche había vuelto a soñar con ella. Con sus sonrisas que era sólo para él. La dulzura con la que lo trataba y la manera en que sus ojos parecían perderse en los suyos sin llegar a importarle la oscuridad que albergaba. Tal pareciera que a ella no era consiente de toda la maldad que lo rodeaba. De todos los hechos de los que se proclamaba autor. Y por el momento lo mejor era que se mantuviera en la ignorancia. Si quería que todo marchara de acuerdo al plan, mantener a la bruja en las penumbras seria su as bajo la manga.

Con una última mirada a la habitación que había preparado para su futura inquilina se encamino hacia el salón donde sus mortifagos terminaban de prepararse para el evento de aquella noche. Su actuación seria la clave para que los acontecimientos venideros se desencadenaran de la manera esperada. Con una macabra sonrisa se adentró a la estancia donde le esperaban para simplemente dar la orden que daría comienzo a la diversión. Después de todo había que ganar el juego.

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-Lo siento Hermione, pero no he logrado encontrar nada relacionado con el nombre de Thomas. A lo mucho uno que otro trabajador de aquí en el ministerio-. Fue lo primero que dijo Harry cuando entró a la oficina de su amiga castaña-. Pero la verdad no creo que busques a alguien que ronde casi los setenta años ¿o sí?-. Dijo el joven con un poco de burla.

Hermione se quedó observando a su amigo por algunos momentos, la verdad es que no esperaba que de un día para otro ya tuviera información de aquel hombre, si ese fuera el caso ella no habría tenido la necesidad de recurrir a su ayuda. Aun así le sonrió, logrando que Harry centrara su atención en ella y por un momento se olvidara del asunto que venía a tratar.

-Bueno, tampoco es que esperara que tuvieras resultados tan pronto Harry-. La voz de su amiga logró volver a captar su atención.

-Tal vez si pudieras ser un poco más específica ¿su apariencia?-. Preguntó Harry tratando de hacer lo imposible por ayudar a Hermione. Ella había hecho tanto por él que sentía que no le alcanzaría la vida para retribuirle todo aquello que merecía, si tan sólo pudiera regresarle lo que ella más anhelaba.

-Bueno, ahora que lo mencionas, tienes unos impresionantes ojos verdes, casi como los tuyos sólo que un poco más oscuros-. Hermione podía recordar perfectamente esos ojos que la seguían a todo momento, como si en cualquier instante fuera a desaparecer y él estuviera listo para evitarlo. Había visto la ansiedad que presentó aquella mañana que se marchó a trabajar y el alivio y felicidad que mostró cuando regreso a su hogar. Tal pareciera que ella era una especie de tabla salvavidas a la cual se había aferrado y no quería soltar. Por esos motivos se encontraba un poco desesperada por encontrarlo. El comportamiento que mostraba sólo era signo de alguien que había sufrido y por eso todavía no entendía porque Thomas se había ido sin despedirse. Todo era tan estresante.

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