Estaba lloviendo afuera. La tarde estaba opaca, sin color. Olía a tierra mojada y a agua salina a su alrededor. Y a pesar de que la atmósfera que cubría París esa tarde parecía ser triste, no lo era, no lo estaba; a Luka le gustaba imaginarse pedaleando de prisa en su bicicleta por las calles de la ciudad, recibiendo sonrisas sinceras de las personas que lo veían pasar. Personas que no miraban sus propios pasos, sus celulares o su sombra en el suelo, si no que miraban al cielo y a las otras personas.
Estaba en su camarote, sentado en la cama, meditando en silencio. Aunque el silencio era relativo, por que aunque no le perturbase, podía escuchar voces en la habitación contigua. Y aunque Luka no quería involucrarse ni invadir la noche de chicas de su hermana y sus amigas, no tuvo de otra cuando ellas misma lo llamaron, pidiéndole su ayuda.
• • •
Juleka leía una revista en la alfombra mientras Rose yacía recostada en su regazo, tarareando la letra de una de las canciones de su banda. Mylenne y Alyx habían ido a la cocina para preparar más palomitas con la madre de los Couffaine, Anarka.
Marinette y Alya sostenían una pequeña discusión desde la mesita en donde estaban sentadas, una en cada extremo; la de cabello azabache pintaba las uñas de la morena de un tono rojizo, o intentaba hacerlo, ya que por su falta de experiencia en esas cosas, no hubo un buen resultado.
─¡Chica, esto es horrible!─ se quejó Alya con exagerada y fingida indignación.
─... Lo siento, ¿empiezo de nuevo?─ Marinette se disculpó, tomando un pedazo de algodón empapado de acetona para borrar todos sus errores e intentarlo de nuevo.
─No, solo...─ Alya se detuvo un par de segundos, pensando en una solución. ─¡¿Alguien aquí que sepa hacer esto bien?!
Ante su pregunta hecha en un tono de voz elevado, Marinette, Juleka y Rosa la miraron. Después se miraron entre sí, de acuerdo con la respuesta:
─¡Luka!─ gritaron todas al unísono.
No pasó más de un minuto cuando el mayor apareció en el marco de la puerta.
─¿Me necesitan?─ preguntó, sonriendole a todas.
─¡Sí, ven aquí!─ Luka asintió y se sentó frente a Alya cuando Marinette le cedió su lugar. ─¿Podrías pintarme las uñas? Por favor...
Luka sonrió, algo extrañado de su petición. Pero no se negó, solo tomó el algodón y cuando las de Alya estuvieron listas, empezó con su labor. Y estaba tan concentrado en no salir de la línea natural de las uñas que se sobresaltó cuando sintió vibrar su celular en el bolsillo de su pantalón.
Se excusó con Alya para revisar su celular, la chica asintió y alzó la mano para apreciar con detalle el impecable trabajo de Luka con una sonrisa.
En su barra de notificaciones había un mensaje. Adrien le había texteado para desearle buenas noches, un pequeño detalle que le hizo sonreír. Y su rostro ligeramente sonrojado no pasó por alto para Alya, quien lo miró con curiosidad.
─¿Quién es? Digo, solo si se puede saber, ¿es alguna chica?─ le cuestionó la morena, con una sonrisa socarrona. Marinette pareció entender el juego de Alya y le secundó, preguntándole al peliazul también.
─No, solo es... Solo es Adrien─ Luka creyó entender también a Alya, y le respondió con la tranquilidad y seguridad que siempre transmitía, como si no le hubiese puesto nervioso.
Guardó el celular y siguió con la otra mano de Alya. Luka no lo notó, pero todas compartieron miradas cómplices antes de que Marinette cambiara de tema, en apariencia.
─Eso me recuerda... Debo ir haciendo una lista de posibles prospectos.
─¿Prospectos?─ le cuestionó Luka, sin levantar la vista de los dedos de Alya.
─Sí. Resulta que soy la nueva casamentera de Adrien, así que Chloé y yo nos estamos encargando de encontrarle la pareja perfecta.
─¿Adrien te pidió que le buscaras una novia?─ esta vez, Luka levantó la vista al terminar de aplicar el brillo sobre la previa capa de esmalte, y no pudo evitar sentirse curioso por la risita que todas soltaron.
─De hecho...─ Marinette se interrumpió, dudosa de revelar lo que su amigo le había contado. ─No le estoy consiguiendo una novia a Adrien, por que lo que el está buscando es un novio.
Mylenne y Alix llegaron con dos enormes tazones de palomitas y papas fritas, e inmediatamente, Rose y Juleka se abalanzaron sobre ella para arrebatarle la comida, ya que la película que planeaban ver estaba por empezar.
Luka se fue después de eso, cuando Alya le agradeció el favor. Se despidió de todas con un movimiento de mano y al llegar a su habitación, miró la noche reflejada en el mar por la ventana.
Suspiró con inesperado alivio ante las palabras que creyó, jamás escucharía.
ESTÁS LEYENDO
Boyfriend [Lukadrien]
Fanfic𝐁𝐎𝐘𝐅𝐑𝐈𝐄𝐍𝐃 | ❝¿Alguna vez haz tenido la sensación de estar atraído hacia alguien, pero no hay nada que puedas hacer o decir?❞ Historia corta inspirada en "boyfriend" (canción de Big Time Rush).