Disclaimer:
Los personajes de CC y SS no me pertenecen, si no a sus respectivos autores y a quienes hayan pagado derechos sobre los mismos. De ser míos, bueno Terry y Candy se habrían quedado juntos y felices y en SS, otra cosa sería X-D
Míos son los demás personajes, así como la historia aquí narrada; basada en el anime de Candy Candy, y que tiene ciertas modificaciones que me eran necesarias. Obvio la canción que inspiró esta historia tampoco es mía, sólo fue, como es usual en mí, una maravillosa inspiración.
No tengo fines de lucro, es sólo para pasar un buen rato y tener otro terryfic.
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En el aeropuerto, un nervioso joven con lentes oscuros, gorra y una chaqueta negra con el cuello levantado, descendía del avión que lo llevaba de Nueva York a Chicago. Los días previos habían sido... intensos...
Un rescate inesperado de una "damisela en peligro" lo había llevado a un enfrentamiento consigo mismo. Curioso, él, con su honor y caballerosidad "salvaron" a una desconocida; y ella a cambio, lo salvó a él de sí mismo, de su autocompasión y de su equívoco, en este caso, sentido del deber.
-Gracias, extraña –murmuró para sí, y se dirigió a la salida.
Su equipaje era poco en realidad; desde que dejara la ciudad de los rascacielos meses atrás, había cargado sólo con lo estrictamente necesario, clausurando su departamento hasta nuevo aviso. Y en Mississippi solamente contaba con lo básico en la habitación que alquilaba.
Así, tomando su maleta salió a enfrentarse a aquélla ciudad.
Primero pensó en buscar a Albert, por lo que tomó su teléfono y rápidamente tecleó un mensaje. Acto seguido guardó el aparato en el bolsillo de su chamarra y miró alrededor; hospedarse era lo que haría en lo que recibía respuesta. Sabía que su rubio amigo no contestaría de inmediato, y considerando lo agotadora que había sido su veloz estancia en NY, la perspectiva de descansar un poco le resultó bastante atractiva. Así pues, se montó en un taxi y le pidió al conductor llevarlo a un hotel que fuera cómodo y discreto.
Horas después, ya descansado, duchado y habiendo comido algo; salió a caminar un poco, tenía que pensar cómo le haría para ver a la pecosa. Su amiga de cabello castaño le había asegurado que Candy estaba soltera, pero eso no le aseguraba que quisiera volver con él... Si bien estaba decidido a recuperarla, eso no significaba que no estuviera un poco ansioso.
Se fue a sentar en la banca de un parque y en medio de sus cavilaciones, percibió la vibración de su teléfono, indicando la entrada de un mensaje. Era Albert, de quién él aún desconocía su verdadera identidad.
'Hola amigo, que gusto saber de ti, nos tenías preocupados', se leía en la pantalla.
'Lamento eso, y gracias por tu preocupación, ahora estoy bien. ¿Podemos vernos? Estoy en Chicago'. Antes de enviar el texto, dudó un momento, ya que su amigo le había aconsejado seguir su vida luego de separarse de Candy; quizá le reclamara por estar ahí.
"¡Vamos! ¡Sé valiente y toma al toro por los cuernos!", recordó las vehementes palabras de aquélla peculiar chica; así que tomó aire y no lo soltó hasta que envió el mensaje.
Pasaron un par de minutos antes de que llegara respuesta, nuevamente suspiró y leyó: '¿Estás ahí? Eso sí es sorpresa querido amigo. Me encantaría verte, pero lamentablemente ahora estoy en Londres, luego te explico'. "¡Rayos!" pensó el joven; él esperaba verlo y charlar un poco, y de paso ver si le aconsejaba cómo acercarse a Candy. En eso recibió un mensaje más, '¿Piensas verla?', era la simple pero directa pregunta.
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II. Listen To Your Heart
FanficTerry por fin se ha liberado de la culpa que lo agobiaba luego del accidente de Susana, y ahora está dispuesto a todo para recuperar a la pecosa enfermera, incluso haciendo equipo con algunos cómplices inesperados... La pregunta es ¿Cómo convencerán...