CAPÍTULO 23. JULIEN 22.

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Después de que Luo Wenzhou reunió y revisó todas las pistas, Lang Qiao aún no había traído a la dama. Levantó la vista con los párpados temblando involuntariamente.

En ese momento, Luo Wenzhou estaba empujando la puerta y entrando en la habitación. Mientras entraba con la cabeza inclinada y melancólica, escuchó la pregunta de Tao Ran y levantó la vista sorprendido: "¿Qué pasó?"

Tao Ran apenas se preocupó por hablar sobre el tema del cáncer de heroísmo personal con el "Capitán China Luo". Frunciendo el ceño, dijo: “Las huellas digitales de Zhang Donglai están en el lazo que envió el abogado Liu. Según la evaluación inicial, este empate es consistente con el hematoma en el cuello del difunto. Hay una pequeña cantidad de manchas de sangre en él: la piel de He Zhongyi alrededor de su cuello se rompió cuando fue estrangulado. Si trabajan horas extras, los resultados de la prueba de ADN podrían aparecer tan temprano como mañana por la mañana. El equipo forense dijo que la posibilidad de que este vínculo sea el arma homicida es muy alta ".

Luo Wenzhou escuchó sin hablar. Después de que Tao Ran terminó, miró el reloj. Era cerca de la medianoche.

"Ve a buscarlo", dijo. “Creo que Fei Du no se ha ido aún. Incluso si lo ha hecho, no debería pasar mucho tiempo, podemos alcanzarlo ".

Fei Du de hecho aún no se había ido.

Después de tomar nota de su testimonio, volvió a sentarse junto a Madre He como compañero durante un tiempo.

Tal vez fue la compañera que tuvo todo el tiempo, o el hecho de que el Buró estaba brillantemente iluminado en medio de la noche, Madre parecía ver la tenue luz de la esperanza. Su estado de ánimo también era estable. Incluso pudo conversar con Fei Du: "Antes de que vinieras, me parece ver al hombre que estuvo aquí por la tarde ... cómo se llama ..."

Se refería al Sr. Liu, pero por un momento no podía recordar a qué se dedicaba. Después de un momento de murmullos, su mente todavía estaba en un lío, así que simplemente se saltó esa parte y preguntó: "¿Han encontrado nuevas pruebas?"

La acogedora silla para Madre He no era muy adecuada para el presidente Fei. No había espacio para sus piernas. El joven maestro se negó a acurrucarse con el propósito de una buena imagen, por lo que no tuvo más remedio que poner las piernas en una posición incómoda. Como resultado, sus pies no tardaron mucho en adormecerse. no pudo evitar acercarse y darles palmaditas: "Tal vez ... ¿qué vas a hacer después de que atrapen al asesino? ¿Irte a casa?"

Madre He bajó los párpados, pero ella no respondió. Ella solo miró su mano en la pierna y dijo: “No eres policía, ¿verdad? Es muy tarde, debes irte rápidamente a casa ".

Aparte del entumecimiento de las piernas, Fei Du no se sentía cansado en absoluto. Para un joven de placer como él, era solo el comienzo de la vida nocturna, y era el momento para que él se pusiera de moda.

Fue una pena que hoy no hubiera belleza. Solo tenía una dama de mediana edad marchita como compañera. Sin embargo, Fei Du trató a las mujeres de todas las edades por igual sin discriminación. Podría ser bueno para él conocer a miles de personas atractivas en su vida, ya que había cultivado la capacidad de no verse deslumbrado por las apariencias.

"Está bien. Déjame estar contigo por un tiempo ”, le dijo Fei Du. “Mi madre nos dejó cuando era muy joven ... Incluso cuando todavía estaba en la superficie, siempre tenía que tomar medicamentos y no podía salir a trabajar. Mi papá estaba ocupado en el trabajo y nunca estaba en casa. Yo estaba en la escuela. Mi escuela estaba lejos de casa, así que vivía cerca de la escuela con el ama de llaves. Una vez por semana, iba a casa a encontrarme con ella ".

NOVELA (L-S)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora