Mi Primer Amor. (Completa)

"Solo una vez"

"Nacemos una vez, morimos una vez, nos enamoramos una vez y amamos una vez"

Enfermeras: ¡Es un niño hermoso! ¡Miren el rostro de felicidad del padre!

Yibo sostenía a su bebé en brazos y lo miraba con alegría, era tan hermoso, su piel era suave y delicada, sus mejillas regordetas y rozadas, para el este fue el momento más feliz de su vida.

Doctor: Joven Wang...la señora Wang está muy grave, no le queda mucho tiempo. Intentamos todo lo que pudimos. Tuvo una hemorragia interna muy severa, no podemos hacer nada...Ella sabía que iba a haber complicaciones en el parto, ella también sabia cuanto usted quería a este bebé, ella amo a este bebé más que a su vida.

Ziyi y Yibo habían contraído matrimonio en su ultimo año de la Universidad, se habían enamorado allí y apenas llevaban un año de matrimonio cuando su pequeño nació, pero la suerte no les sonreía mucho ya que este parto había venido con complicaciones.

Ziyi sostenía a su bebé entre sus brazos fuertemente mientras derramaba lágrimas, sabía muy bien que no lo vería crecer, que no estaría a su lado para protegerlo y amarlo y aunque le dolía no se arrepentía de su decisión, los primeros meses había recibido la advertencia de que este embarazo era riesgoso y que su vida podría verse en peligro, aun así ella continuo con su decisión ya que este bebe era lo que más anhelaban ella y su esposo y era el resultado de su amor.

- Quiero que mi hijo conozca a su madre.- Ziyi hablaba entre lágrimas a la madre de Yibo.- Quien era su madre, como era, quiero que ella sea capaz de responder estas preguntas.- Levanto su mano y deposito un manojo de cartas en la mano de su suegra.- Le dejo estas diez cartas...una por cada año hasta sus diez  años. En esta carta esta todo lo que quiero decirle a mi hijo. Estas cartas serán sus recuerdos.

Con el llanto a flor de piel llevo su rostro al pequeño cuerpo de su hijo y lo lleno de besos, en aquellos besos iban todo su amor y el dolor por dejarlo atrás, esa era su despedida.

Yibo llego a la habitación en donde se encontraba su esposa, arrastraba los pies, su rostro estaba desencajado, lleno de lágrimas y dolor, se sentó a su lado en aquella cama mientras ella lo miraba con tristeza.

- ¡Eres muy mala!,.- Sollozaba tratando de no dejar salir aquel llanto que tenía en su garganta.

- ¡Oye! ¡Oye¡.- Ziyi sonreía.- ¡Yibo!...¿Quieres ser mi amigo?

-....- Yibo negaba con la cabeza mientras el llanto se escapaba suavemente de sus labios.

- Prométeme que nunca lloraras.- Ziyi lo miraba con ojos llorosos.- De todas formas te vez muy feo cuando lo haces.- Sonrió débilmente.- También prométeme que el nombre que llevara nuestro hijo será "Zhan".

-....- Yibo levanto la mirada con asombro.

- ¡Lo siento! ¡Lo siento mucho Yibo!.- Ziyi rompió en llanto.

- ¡No te vayas! ¡Por favor...no me dejes!.

Yibo suplico mientras se recostaba al lado de su esposa y la sostenía entre sus brazos, fue así como sintió el momento en que su esposa finalmente abandono la vida, desvaneciéndose en sus brazos, cerrando sus ojos para tomar un descanso eterno, Yibo movió su rostro y al ver a su esposa inerte finalmente dejo escapar aquel llanto.

"Prométeme que el nombre que llevara nuestro hijo será Zhan"

**Beijing**

*10 años después*

Un niño vivaz y animado correteaba temprano en la mañana por la casa, bajo a toda prisa las escaleras mientras su abuela lo perseguía para colocarle su suéter, el niño tenía diez años, de tez blanca, pelo color oscuro, grandes ojos y alegres y con una sonrisa enorme, saltaba por todos lados mientras gritaba de felicidad, su alegría aumento cuando diviso en medio de aquella sala una mesa repleta de obsequios, con un enérgico grito corrió hacia ella, se detuvo y luego de observar por unos minutos lanzo todos los obsequios al piso, estaba en busca de algo específico, sus ojos se tornaron brillosos cuando finalmente lo encontró, en el fondo de todos esos obsequios se encontraba la carta de su madre, al igual que si hubiera encontrado un tesoro el niño festejo con emoción llevándola a su pecho y acunándola.