please notice; shawn mendes

merry crisis

—Happy Chrismis.— pellizco en el cachete derecho.—it's Chrismin.— pellizco en el cachete inzquiero.— Merry Crisis.— un golpecito en la punta de su nariz.—Merry Chrysler.

Al abrir los ojos Shawn pudo ver la cara lavada de Emilia a unos centímetros de la de el, alejándose mientras recargaba su rostro sobre sus manos en el borde de la cama.

¿Así es como te reciben en el cielo?  Se preguntó. Ojalá pudiera vivir con Emilia para experienciar esto más seguido.

Volteó su cuerpo dándole la espalda a su amiga. Era muy temprano para tener este tipo de pensamientos sobre ella.

—¿Qué? Oh vamos, eres un chico vine, esta referencia debería gustarte.— rió sola y al darse cuenta que el cuerpo frente a ella no daba señales de vida lo empezó a picotear de nuevo. —Enserio tienes que despertarte. Tus papás salieron y nos dejaron a cargo de varias cosas para la cena...

Era la mañana de Navidad. Emilia había llegado desde el 22 para celebrar navidad con los Mendes y partiría el 28. Siendo esta la primera vez que la chica pasaba Navidad con una familia ajena en un país extranjero.

Obviamente Shawn había sido el de la idea, usando la cantidad de nieve que Canadá tenía en diciembre y lo mucho que la extrañaba como excusas para convencerla.

Después de unos segundos con la recamara en silencio lo siguiente que sintió fue el golpe de una almohada contra su cuerpo, haciéndolo gruñir y levantarse de su cama. Estaba listo para pelear hasta se dio cuenta del adorable suéter de navidad que Emilia tenia puesto.

— Lindo suéter.

Una gran sonrisa de plasmo en el rostro de Emilia enseguida, después, una expresión que decía haber recordado algo hizo que alzara las cejas.— No te muevas.— Le ordenó a Shawn, mientras salía rápidamente hacia otra habitación de la casa.

Shawn, aún un poco dormido, se quedó parado y confundido esperando que su amiga regresara.

— ¡Cierra los ojos!— Shawn obedeció. Escucho como los pasos de Emilia se acercaban a él hasta que pararon frente a él.— Ok, ya puedes abrirlos.— Obedeciendo una vez más, la imagen de la rubia con un suéter de Navidad para el en sus manos apareció, haciendo que un sentimiento de ternura de apoderara de él por segunda vez en la mañana.— Estas obligado a usarlo todo el día; es una tradición que yo tengo con mi familia.

— Con gusto.— Shawn agarró el suéter y se lo puso sobre su pijama. Le quedaba a la perfección.

Fue momento de Emilia para llenarse de ternura por lo que presenciaba ante ella. Quedaron en silencio una vez más hasta que Shawn fijó su mirada en lo que había tras ella, dándose cuanta que trataba de esconder una caja con diseños navideños.

— Es... ¿Es tiempo ya para dar los regalos?— Giro rápidamente para cargar la caja entre sus brazos, extendiéndosela para que el canadiense pudiera agarrarla. Cuando este lo hizo, la puso en su cama.