Mientras estudiaba tarde esa noche, hubo un momento en que Wataru recordó el beso de su novio Yuichi. No fue una sensación física o un estremecimiento en sus labios; fue la fugaz vacilación justo antes del toque, el calor de un impaciente suspiro inundándolo.
—¿Eso es bueno?
Yuichi miraría a Wataru como si estuviera mendigando perdón, o lo miraría con fijeza coquetamente, intentando seducirlo. Cuando hacía eso, sus ojos siempre enviaban a un espiral la mente de Wataru, y éste sentía que su corazón era apretado fuertemente.
Incluso cuando estaban en preparatoria, otras escuelas habían reconocido a Yuichi como el renombrado "príncipe" por su aspecto elegante y estilo, que eran como el de un modelo. Sus inteligentes ojos que ocultaban una vaga melancolía eran capaces de dominar el corazón de Wataru con sólo una mirada.
—Siempre me miras con la boca abierta. Idiota.
Wataru incluso podía perdonar el abuso de Yuichi que discrepaba tanto de su amable exterior, porque sabía que había algo que el chico le daba a solas. Wataru a menudo se enojaba por las burlas, pero pocas personas conocían este lado de Yuichi, o que él era tan desdeñoso con otros.
Te amo, Wataru.
También te amo, respondió Wataru soñando.
Sin importar lo que pasara, si Yuichi le preguntaba a Wataru un millón de veces, <<¿me amas?>>, Wataru diría <<sí>> en cada ocasión.
—También te amo, Kazuki...
La voz de Wataru se deslizó inocentemente más allá de sus labios, trayéndolo de vuelta desde su ensueño con una sacudida.
—¡Oh, no! ¿En qué momento se hizo tan tarde?
Sus ojos volaron de sus manos a su reloj que decía que ya eran las tres de la mañana. Aún no he terminado mi trabajo, gimió Wataru, mientras frenéticamente comenzó a mirar directo a su libro de trabajo de inglés.
Después de obtener una C en los exámenes de práctica del verano, había volcado toda su energía en un bombardeo de estudio por los últimos tres meses. Entre su sensato novio y la ayuda de un excelente tutor, de alguna forma Wataru logró estar dentro del rango de pase. Pero era apenas principio de diciembre y aún demasiado pronto para relajarse. Wataru se negaba a fallar en los exámenes de admisión a la universidad y a ser forzado a estudiar por un año más, entonces se había metido de lleno a estudiar hasta el amanecer por los últimos días, sabiendo que éste era su momento de la verdad.
—¡Bien! Este año no puedo siquiera pensar en Navidad, Año Nuevo o algo divertido como eso— declaró en voz alta a propósito para animarse a sí mismo en su soledad. Su voz era tan alta que escuchó a su hermanita refunfuñar en el cuarto de al lado, entonces bajó la voz ligeramente y susurró una vez más para sí mismo. —Espera por mí, Kazuki, voy a aprobar y entonces podremos disfrutar juntos de la primavera.
El escritorio de Wataru era un revoltijo de guías de estudio y cuadernos, con su diccionario electrónico encima de todo, pero en la parte superior había un espacio del tamaño de su palma que estaba vacío excepto por un artículo. Wataru bajó la mirada hasta el anillo que parecía estar fuera de lugar, descansando en ese vacío lugar. Tenía un diseño simple, sólo plata con una línea de oro en medio; era algo que podría haber comprado en cualquier lugar. Para este punto, había muchos ligeros rasguños en él, sin importar cuánto lo puliera, no brillaría de nuevamente. Pero desde que Wataru lo obtuvo, nunca lo perdía de vista. Lo había cargado con él o lo usaba dondequiera que iba por casi un año y medio.
—Es como si, después de tanto tiempo y trabajo, tu importancia aún brillara—, observó Wataru, moviendo la cabeza, satisfecho.
El anillo era su más preciado tesoro. Era porque otro anillo con el mismo diseño pertenecía a la persona que era más preciosa para él que cualquier otra. Wataru tuvo que sonreír afectadamente por lo sentimental que era, pero no podía tratar algo tan lleno de recuerdos como si no importara, incluso aunque pareciera riguroso.
—¿Eh?
Su teléfono estaba conectado a su cargador, pero la alerta de mensaje de texto intervino de repente. ¿Quién podría estar llamando a esta hora?, se preguntó un poco sorprendido, y abrió su celular con entusiasmo.
¿Estás estudiando duro? Hará frío esta noche, así que no te quedes dormido sobre tu escritorio. Voy a estar despierto un poco más trabajando en un ensayo, si tienes una pregunta sólo llama.
—Kazuki...
El mensaje era seco, pero Yuichi siempre era así, por lo que eso no molestó a Wataru. Más bien, estaba frustrado de que ambos estuvieran despiertos tan tarde, pero tan lejos. Su novio estaba despierto justo ahora pensando en él. Ese pequeño hecho acentuaba la miseria de ser incapaces de verse.
—Un ensayo, ¿eh? Aún estoy estudiando, nunca me rindo; y...vaya.
Gracias. Buena suerte para ti también.
Wataru llenó su breve respuesta con estas ideas y presionó el botón "enviar". Su novio Yuichi Kazuki era un año mayor que él y propietario del anillo a juego que Wataru tenía. Llevaban juntos poco más de un año, atravesando buenos y malos momentos; a pesar de que ambos eran chicos y los malentendidos nunca cesaban de causarles problemas, cada vez que superaban un obstáculo, Wataru sabía que sus lazos se volvían más profundos y fuertes.
Sabía eso y estaba seguro de que Yuichi sentía lo mismo. Wataru se sentía casi relajado cuando escuchaba en el teléfono la plácida voz de Yuichi o las crueles respuestas a sus bromas. En este momento, Wataru tenía menos de un mes y medio antes de su examen en febrero, entonces el tiempo que él y Yuichi podían pasar juntos había disminuido. Pero a pesar de la soledad, no había nada de la duda que había sentido al inicio de su relación.
Y Kazuki divide su tiempo entre su trabajo de medio tiempo y su club escolar, así que lo tiene tan difícil como siempre.
Ellos manejaban su tiempo cuidadosamente y habían prometido juntarse dos noches a partir de ese momento. Yuichi trabajaba como mesero en un café en el turno matutino, por lo que Wataru había comenzado a esperar por la fugaz cita que ambos tenían cuando él esperaba por Yuichi en su camino a casa después de las clases de preparación. Yuichi había mantenido debidamente su vieja promesa de hacer lo mejor que pudiera para trabajar alrededor del horario de Wataru y había hecho todo lo posible para cumplirla.
Muy bien. Wataru cambió de tema, motivándose a sí mismo una vez más.
Si podían atravesar el siguiente mes y medio, todo estaría bien. Por lo menos era lo que Wataru creía.
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Only the ring finger knows Novela 4 'El anillo confesará su amor'
RomanceTítulo original: その指だけが知っている Sono Yubi Dake ga Shitte Iru Historia por Satoru Kannagi e ilustrada por Hotaru Odagiri Traducción realizada a partir de la versión en inglés "Estudiando duro para sus exámenes, Wataru intenta ser admitido en la univers...