Quienes eramos antes de ser quienes somos. [RAYDER]

VII

La Luna ya estaba custodiando la noche, hacía unos instantes el último rayo de sol se había desvanecido, al ras del horizonte sobre el oeste, aún estaba un aura rosada del casi finalizado ocaso. La temperatura era en verdad muy baja, y estábamos a pasos de donde debía estar la puerta a la cripta. No nos preocupaba los (), después de todos son de climas fríos, se adaptan a la temperatura, pero asechando una tormenta, así que había que resguardar el carro, por lo que nos despojamos de el unos cuantos metros más abajo, en una curva que antes usábamos para limpiar y desollar lo que cazabamos, ahora estaba vacía, y nos vino de pelos. Casi en la puerta de la cripta Nehis que iba adelante se detiene.

-Me eh detenido porque...
- Vale vale, calla y mas bajo, se por que paras. (Le interrumpí casi susurrando)
- Si con este viento puedo gritar y teniéndome al lado no me podrías que va.
- Pero no sabemos quién está ahí o si hay alguien.
- Bien pensado...se supone que voltiando ahí, está la puerta, pero no veo ni un as de luz, así que está cerrada.
- Si, puedo mirarlo, toma mí arco, ponte en el otro extremo, dispara a lo que se mueva.
- Si te mueves te disparo?
- Vale, reformulo...prepárate a disparar al blanco que te dé!
- Y tú vas a entrar con las manos vacías?
- Claro que no!
Desenvaine mí espada Dragón y me posicione del lado izquierdo de la puerta donde está el sistema de apertura, a lado derecho estaba Nehis con la flecha en el arco esperando a que abriera. Nos miramos respiramos ondo...y la abrí. En un instante la luz sale fuertemente disparada hacia el exterior, y por precaución tomé el escudo y lo puse en mí pecho, con la espada asomándose por un costado, y detrás mío Nehis apuntando con el arco. A simple vista solo se veía que estaban los faros ensendidos y todo en su lugar, aunque demasiado limpio.

- Hay alguien es casa? (Pregunto Nehis alisando la voz)
- Pero que dices si esto es nuestro!
- Ya pero por las dudas...que va no hay nadie
Justo cuando estábamos por bajar la guardia de un pasillo lateral se asoma una sombra y responde
- Estoy yo quienes soy vosotros! (Pregunta una voz etérea, algo gastada y arenosa)
- Soy el dueño del lugar, quién pregunta? (Insiste torpemente Nehis mientras me empuja para que me arrime a ver quién andaba dentro)
- Pues soy un huésped, que les pagará bien!
Nehis me hace seña de que detenga mí embestida y pregunta
- De cuántas piezas hablamos!?
- No tengo dinero como tal...(al oír esto Nehis le hace seña de que no lo dude y lo mate)...pero puedo pagarles con algo mejor!
Una vez más Nehis me indica que deje de avanzar y retoma su cuestionario.
- Y que es mejor que una buena bolsa de piezas?
- Pues depende tus preferencias, todo tiene un precio que no sea dinero! A ti que te gusta? (Pregunta la voz proveniente del interior)
-  A mí me gusta el alcohol y las mujeres!
- Pues...(y en ese instante ya cansado de las vueltas me abalance sobre el extraño sin dudarlo derribandolo al suelo. Mientras con mí pie empujaba su cara contra el suelo, lo sostenía de su brazo con mucha tensión para que no intentará nada)

Sin acercarse y desde la puerta Nehis pregunta:
- Lo tienes o ya te mato?
- Cállate y ven acá, no digas tonterías!!
Se acerca Nehis y esclama al ver a nuestro prisionero.
- Es un viejo, ya vivió demasiado mátalo!
- Valla tu compasión aveces me sorprende!!
- Enserio?
- No hombre si eres un despiadado de poco querer!
- No me mateis por favor(súplica el hombre)
- Calla!! (Le intercedemos juntos)
- Nehis cierra la puerta que entra mucho viento, yo lo llevaré al interior y lo amarrare.
- Mejor vamos a tirarle por el acantilado...
- Calla y as lo que te digo (le indique ya un poco saturado de sus bromas)

Nehis resongando cierra la puerta y luego me alcanza, me ayuda a amarrar al prisionero en una silla, que dispusimos en la sala principal de la cripta. Este no dejaba de gemir y quejar así que destapamos su boca y empezamos a interrogarle de inmediato.
- Eh de agradecerte primero por qué as limpiado y mantenido bien haciado este lugar, pero eso después, ahora responde y si mientes dejaré que mí hermano haga contigo lo que se le plazca, vale? (Le aclaré)
- Si entiendo!
- Como entraste aquí, como encontraste este lugar y quién eres!?...