Buscando a Mamá [Buckynat] adaptada

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Lujosa era la palabra con la cual Natasha definía la fiesta. Desde la entrada todo deslumbraba, Natasha se sentía incómoda en aquel lugar, era un como un pez fuera del agua. Sabía que haber elegido aquel vestido había sido una mala opción, todas las mujeres que estaban ahí deslumbraban con sus elegantes vestidos largos, mientras Natasha había optado por uno mas sencillo y corto.

Anika se encontraba sujetando la mano de Natasha, mientras Bucky iba solo unos pasos delante de ellas.

- Creí que no vendrías - Steve se acercó a Bucky - ¿Quién es esta hermosura? - tomó en sus brazos a Anika y al levantarla se percató de la chica que venia junto a ella.

Ambos se miraron. Steve encontró linda a Natasha y le sonrió, Natasha por su parte le causó un cierta confianza el chico, así que le devolvió el gesto. Por su parte Anika y Bucky miraban la escena sin decir nada.

- Ella es Natasha, la niñera de Anika - habló Bucky interrumpiendo las miradas que se daban entre su mejor amigo y la chica. Steve desvío la mirada de la chica y miró a Bucky

- Me lo imaginaba - habló Steve. Volvió a mirar a Natasha - Es un gusto - Steve tomó la mano de Natasha y la beso, lo que causo un pequeño sonrojo de su parte.

- El gusto es mío.

- Es para papá - le susurró en el oído Anika a Steve. Estaba molesta por el beso que su tío le había dado a Natasha

Steve rió y negó con la cabeza, tanto como Natasha y Bucky se preguntaron que era lo que le había dicho la pequeña para que le causara tal gracia a Steve

- Mejor hay que entrar - dijo Steve. Dejó a Anika nuevamente en el piso y los cuatro entraron en el salón.

Muchas personas los miraban y era algo evidente. Bucky y Steve eran los mas jóvenes en aquel lugar, además de que todo el mundo veía mal hecho de que Bucky haya sido padre tan joven. Simplemente eran un blanco el cual todas aquellas personas de sociedad criticaban.

(...)

Unos minutos habían pasado desde que habían llegado a una mesa y tomado asiento. Anika permanecía acostada sobre la mesa aburrida y jugaba con unos cubiertos, constantemente recibía reclamos de Bucky por dejar de hacerlo.
Steve miraba constantemente a Natasha Disimulaba tomando vino de su copa.
Natasha por su parte se sentía tan incómoda como al principio, pero desviaba aquel nerviosismo tratando de evitar que su cara se pusiera roja por la atención que steve le prestaba, aunque de vez en cuando le sonreía.
Bucky estaba de pie hablando con unos ejecutivos y permanecía ajeno al coqueto que había entre Steve y Natasha

La música comenzó a sonar. Bucky terminó su conversación y se sentó al lado de su amigo.

- Deja de mirarla, se siente incómoda - le dijo Bucky en un susurro a Steve.

- ¿Incomoda? Pero mira como me sonríe - Steve le guiñó el ojo a Natasha, y evidentemente ella le volvió a sonreír antes de volver agachar la cabeza.

- Pues no parece - Bucky se sentía extraño por la forma en que sus miradas estaban conectando. - Deja de coquetear con ella, está Anika presente.

- ¡No tiene nada de malo!. Espera, ¿le molesta a Anika o a ti?.

- ¿Qué me va andar molestando a mi? Por mi llévatela, si la conocieras no la soportarías.

- No lo creo. Si me permites, iré a bailar con ella - Steve se levantó de su asiento dejando a Bucky con las palabras en la boca.

Natasha aceptó bailar con Steve y tomados de la mano se dirigieron hasta la pista, donde algunas parejas ya estaban bailando.

- No sé bailar - admitió Natasha en el momento que Steve tomó su cintura con una de sus manos mientras la otra sostenía la mano de ella.

- Solo deja que la música te guíe - le susurró Steve muy cerca de su oído.

Ambos comenzaron a dar los primeros pasos mientras la música seguía sonando. A Natasha la situación le causaba nerviosismo, mientras Steve reía cada vez que ella lo pisaba.

- Perdón - repetía cada vez.

- A tío Steve le gustó Natasha - habló Anika desde la mesa, mientras junto con Bucky observaban la escena que tenían unos metros de distancia.

- No, solo quiere jugar con ella - habló fastidiado. Bucky en esos momentos ya no era consciente si era él realmente el que hablaba o era aquella extraña voz en su interior que le decía que estaba celoso.

- ¿Estas molesto? - preguntó con inocencia Anika

Bucky dejó de un lado aquella escena de su mejor amigo con Natasha y se centro en mirar a Anika. La pequeña mantenía un poco de esperanza que su papá se haya molestado, lo había visto en las películas y las personas lo llamaban celos.

- Un poco - admitió Bucky.

(...)