Observar.

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Acá estoy parada frente a ti, observando de cerca tus ojos pero me siento tan lejos de ti que deseo acercarme aún más y rozar con la punta de mis dedos un poco de tu piel, de tu blanca piel, rozar mi nariz por tu cuello y tratar de reconocer tu olor, ponerle nombre a esa exquisita fragancia que pagaría millones por un frasco de ese sublime olor.

Quiero verte a los ojos directamente y susurrar lo más bajo que pueda con mi corazón en la mano y mis pensamientos a borde, te amo, más lo único que puedo hacer desde mi posición es observarte, hablarte sería uno de mis mayores anhelos y duele saber que nunca será cumplido.

Tan solo ponte a pensar por tal vez un segundo y dime, cariño, cómo hago desde mi posición amarte de la manera en la que deseo hacerlo.

Así que observo ya que es lo único que puedo hacer por ahora, no solo observo sino que también admiro todo tu ser y como brilla cada vez que tus ojitos color avellana parpadean risueños con esa despreocupación que tú solo puedes expresar. Tus labios, apuesto al universo entero que son tan dulces como la azúcar y tan suaves como el pétalo de una rosa.

Tu cuerpo, créeme que amaría tener tan solo una vez tu cuerpo en mis manos, a mi disposición y poder adorarlo como solo tú lo mereces, demoraría días en enseñarte cada parte de tu personalidad que me encanta, que me atrapa, que me eclipsa, que me enamora.

Y es que parece que estoy drogada cada vez que te veo sonreír o reír, el sonido de tus carcajadas es mi maldita heroína, soy tan adicta a ti, tanto que si pudiera te raptaría y expondría en un museo donde todos puedan ver lo que amo pero no tocarte porque ese privilegio lo debo tener solo yo porque solo yo te amo como lo hago.

Mataría al rey si es que me lo pides y te traería su cabeza para que la mires con insuficiencia, me dediques una sonrisa y pueda besarte.

Estoy obsesionada contigo y me volvería loca sino fuera porque te veo, si me quitan este único privilegio del cual yo puedo gozar, empezaría a enloquecer lo suficientemente rápido como para que tú mi amada puedas tan solo parpadear antes de tenerte en mis brazos donde debes estar siempre por el simple hecho que te amo.

Pero no lo hago porque se que te haría daño pero tal vez solo tal vez ese daño es justificable por la misma razón, porque te amo.

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