nuestra ultima fotografia

He vuelto, Samanta

*

-¿Iras al hospital hoy? Me gustaría ir también. Le hable a Helen mientras me sentaba en el borde de mi cama, ella mi miro algo sorprendida:

-Podemos ir después de la clase de las 12, comemos algo por el camino y pasamos al hospital. Dijo mientras sonreía. -Me parece bien. Agregue

Sonó el timbre de las 10, me encontré con Helen en la puerta del salón y nos sentamos en los últimos puestos, era psicología, como era la primera clase no hacíamos mayor cosa, el profesor explicaba los contenidos y todas esas cosas aburridas.

 – ¿Porque quieres ir al hospital, me sorprendió que quisieras que fuera contigo? Pregunto Helen en voz baja. -lo sé, siento no haber ido antes pero creo que ya es hora de verla. Respondí mientras tapaba mi boca con una mano para que me vieran que hablaba y tomaba apuntes con la otra. 

 -Me alegra que cambiaras de opinión y que quieras visitarle. Dijo Helen mientras me observaba detenidamente; sentía sus ojos sobre mí y tenía la sensación de que buscaba la verdadera razón por la que le había pedido que fuéramos al hospital; Y yo solo sonreí ante su mirada y volvía mis apuntes.

“Me alegra que no sepas que fui el lunes, no hubiera soportado tu cara de tristeza cuando vi a samanta en su cama, mucho menos que me vieras llorar e intentaras calmarme diciendo que todo estaría bien, eso nunca funciona.

“NO DEBES PREOCUPARTE ESTA BIEN, TODO ESTA BIEN”, claro que no está bien, ella está en coma en un hospital, porque la gente tiende a decir eso como consuelo eso empeora las cosas, en mi caso lo hace” pensé mientras fingía prestar atención al tablero y tomar apuntes en mi cuaderno.

La clase se pasó volando, ya eran las doce y yo estaba hambrienta “como cosa rara”.

Camino al hospital empezó a caer una leve lluvia, y el cielo se tornó nublado y algo oscuro.

-Debemos caminar más rápido si no queremos mojarnos “dijo Helen mientras me tomaba del brazo y aceleraba su paso, ya estábamos por llegar.

-Será una tarde lluviosa y fría, espero que no llueva fuerte “dije mientras sacudía mi ropa a la entrada del hospital.

Helen me llevo a través de los pasillos del hospital mientras yo fingía no haber estado ahí nunca, nos dirigimos a su habitación y antes de entrar hallen me miro detenidamente como para asegurarse de que yo estuviera bien.

Me sentía mejor que la última vez, ella se veía serena como si solo estuviera durmiendo y no a punto de morir en cualquier momento…

-¿Cuánto crees que dure así? Pregunte mientras Helen se sentaba en el sofá. -No lo sé, el doctor dijo que se recupera lentamente, ya respira por si sola así que eso es un avance, dijo en voz baja.

 Yo me senté junto a la ventana, Helen y yo recordamos todas las cosas que hicimos con samanta, eran cosas divertidas y   realmente graciosas porque así era samanta, no importaba si ella estaba destrozada peor que tú ella siempre hacia cualquier cosa por hacerte feliz, cualquier cosa por hacerte sonreír.