DEMON. Lo Complicado Es Enamorarse.

CAPITULO 8

Entré de nuevo al centro comercial como el número desconocido me había indicado en un mensaje.

Número desconocido:
Si quieres jugar tienes que jugar bien. Tendrás que hacer lo que te diga, si te vas o haces trampas, se anula el juego.

Lyss:
Pero, ¿Que gano yo con esto?

Número desconocido:
Saber quién soy ... eso ganas Lyss

Lyss:
No se si quiero saber quién eres. Puedo bloquearte en este momento y acabe con este jueguecito tonto.

Número desconocido:
Valdrá la pena, confía en mí.

Lyss:
No confío, pero voy a jugar. En el momento que no me cuadre algo me iré, me da igual no saber quién eres.

Número desconocido:
Esta bien.

Me mandó a la librería, y me pido que abriera un libro determinado por la página 52. Las dos primeras palabras eran 'lo siento'. En ese momento me vino a la cabeza Ron. "Como sea el te va a dar un parraque amiga."

Después de dijo que fuera a Starbucks y que pidiera un vaso con mi nombre.

-Perdona vengo buscando un vaso con el nombre de Lyss, no se si....
-Ah ¿Eres tú? Te lo estábamos guardando, alguien pido que lo hiciéramos.- respondió un chico que parecía estar sorprendido de que fuera allí.
Era un café con leche y chocolate blanco. Mi favorito, casi todo el mundo sabe que lo es así que no me está dando muchas pistas. Me senté en una de las mesas a esperar que me mandara otro mensaje.
Hacia 20 minutos que no me escribía, me estaba cansando de esperar, así que decidí irme. Cuando estaba saliendo por la grandes puertas del centro comercial volvió a sonar mi teléfono.

Número desconocido:
¿A donde vas? No hemos acabado

Lyss:
Me marcho, no me has dicho que haga nada más.

Número desconocido:
Solo me he quedado empanado viendo cómo te tomabas el café. Me gusta mirarte.

Mire a los lados. Ya no me gustaba este juego, sonaba como un acosador.
Volé hasta la moto pero me percate que me había dejado el casco dentro del Starbucks "No podías tener más cabeza estúpida. Corre a por el casco y vámonos a casa."
Entré todo lo rápido que pude. Pregunte al mismo chico de antes por mí casco. Dijo que un chico se lo había llevado, que el creyó que me conocía o algo así. Me marché en busca de alguien que pudiera haberlo cogido mientras le gritaba algunos improperios al chico.

Número desconocido:
Baja al aparcamiento, tengo algo tuyo. Es la última fase, sabrás quién soy.

No sabía qué hacer. Necesitaba irme y no podía conducir sin el casco. Decidí bajar esperando que no me pasara nada malo.
Antes de cruzar las puertas marqué el teléfono de Oli en mi móvil, por si pasaba algo poder llamarla. Tragué saliva y me adentré en el parking. Quedaban 15 minutos para que cerraran el centro comercial, así que no había muchos coches. Recibí una llamada de un número desconocido, no sabía si responder. El aparcamiento se estaba empezando a quedar vacío, tenía miedo. Volvió a llamar. Respondí.
-¿Si?-
-Tendrias que haberme cogido el teléfono antes pequeña Lyss, estás empeorando las cosas.-
-¿El que he empeorado?.-
-Ay pequeña, te queda mucho por aprender...-
No reconocía la voz, estaba distorsionada. Estaba muy asustada.
-¿Que quieres? Dame mí casco y me voy...-
-Tienes que buscarlo Lyss.-  me interrumpió
-¿Donde? No quiero jugar más.-
-Esta bien, está bien. Esta en la plaza 288, zona E.- y colgó.
Me dirigí a prisa a donde me había dicho. Quería irme.
Cuando me aproximaba el sitio vi mí casco con una nota pegada. Me agaché y la recogí. En ella decía que había llegado el final del juego. Que había sido corto pero intenso. Que había llegado la hora de saber quién era la persona misteriosa. Mientras leía escuché unos pasos aproximarse. Me di la vuelta y ahí estaba. No podía creer lo que mis ojos estaban viendo.
Recogí me casco del suelo y me dispuse a irme. Me agarró el brazo con una fuerza innecesaria y me puso contra la pared. Tenía miedo, muchísimo miedo.
-No te voy a dejar escapar tan fácilmente Lyss. Perdoname por favor. Si lo haces todo será bueno.-
-Dejame en paz Ron, no quiero saber nada de ti. Hemos acabado. Asumelo.-
-Vas a estar conmigo quieras o no Lyss. No te voy a dejar.-
-Sueltame estúpido.- intente forcejear pero no me soltaba. Tuve una idea, no sabía si iba a salir bien...
-Esta bien Ron, suéltame y hablamos...-
-¡NO INTENTES ENGAÑARME LYSS!.-
-No lo hago. Tranquilo Ron.- subí las manos a su cara.-Estoy aquí.- lo abracé con la intención de que relajara su agarre. En un momento de descuido de Ron cogí el casco y salí corriendo lo más rápido que pude. Mientras corría hacia la puerta saque el teléfono y llamé a Oli.
-¿Que pasa Lyss?.-
-¡TATA CORRE AL CENTRO COMERCIAL ESTOY EN APUROS! ¡CORRE CORRE!...- Noté un fuerte golpe en la cabeza. Me había alcanzado.
-No te vas a escapar. Si no estás conmigo no estarás con nadie. Te mataré Lyss vas a sufrir lo que estoy sufriendo yo.-
El teléfono se escapó de mis manos y caí al suelo. No podía moverme ni hablar. Mientras estaba en el suelo la imagen distorsionada de Ron acercándose me atemorizaba. De pronto alguien se abalanzó sobre el y yo entré en un profundo sueño del que esperaba despertar ...