Corazon y Alma de Dragon (HipoxChimuelo)

Snoggletog

Pues otro especial de Navidad y si se que ellos no saben que rayos es la navidad pero en el capítulo "El regalo del Furia Nocturna" se ve que es la Navidad en si pero de una forma más rústica, pero bueno sin más que agregar si quieren pueden tomarlo como un capítulo más o no es a su decisión.

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Era un mañana fría de invierno, bueno mucho más helada de lo normal y cierto pequeño e inadaptado vikingo cuyo nombre era Hipo estaba haciendo su almuerzo para comer antes de ir con Paradex, un Furia Nocturna que por alguna razón aún no lograba entender del todo del ¿Porqué se interesa en él? Aún no tenía una respuesta muy clara pero ya había acepto a ese dragón en su vida, era parte de ella y le agradaba su presencia, pensó ¿Desaparecerá como los otros dragones por esta temporada? Pensó puesto era cierto, los dragones no atacaban en esos días muchos decían que era por el frío que era más helado de lo normal, otros que simplemente pensaban que ellos ya no tenían comida por la escasez y unos pocos decían que sólo debían disfrutar ese pequeño lapso de descanso para darse un pequeño respiró y volver a la acción cuando la temporada acabará, Bocón al parecer estaba de muy buen humor por ellos puesto tenía campanas y uno que otro adorno intentando "decorar se así mismo" aún estaba agradecido de que el lo cubriera con todos incluso con su padre, aún no tenía claro como lo había echo pero logro convencer a todos de que Hipo aún trabajaba para él y que todas las armas que venían en casi mayor cantidad él las hacía, aunque esto no era muy fuera de la verdad, realmente eran los chicos que solo copiaban lo mejor posible lo que el hacía para acabar con esa tediosa labor y ir a entrenar lo más pronto posible pero estaba más que claro que eso tal vez no sucedería muy pronto.

- ¿Paradex también se irá como el restó de los dragones? -pensó pero antes de que pudiera empezar a meditarlo vi una figura a lo lejos del comienzo del bosque que es en dónde estaba y enseguida la reconoció así que fue a toda prisa a pararle- ¿Qué haces aquí? -intentaba empujarlo para que retrocediera-

- vine a estar contigo en esa época -contesto con simpleza el Furia Nocturna que en ésos momentos estaba como humano, lo bueno es que esta vez si llevaba al menos el pantalón que Hipo le enseñó a ponerse por si acaso- no quiero estar lejos de ti, además se ve que aquí hace más frío y me quiero asegurar de que no te enfermes dándote de mi calor -le sonríe entre sinceridad pero el pequeño humano sentía también algo más en éso- ¿Y los Terrible Terror? -

- se fueron como los demás dragones por esta época helada y creó que también debes ir -estaba alterado pero no quería que se le notará- espera ¿Porqué no fuiste? -pregunta de forma curiosa y a la vez algo directa por la extrañeza del asunto-

- no podía irme sin ti, pero como aún no me aceptas no tiene casó que vayamos aún amenos de que -le toma de su mentón haciendo que lo mire directamente a sus ojos color verde tóxico- me hayas aceptado, entonces con gusto te llevo y te reclamó -

-Hipo sin poder evitarlo se puso nervioso que a su vez lo puso color rojo algo intenso pero se intentó mantener en calma respirando profundamente- no soy tuyo, no soy de nadie -dijo lo más seguro que pudo aunque claramente estaba intentando parecerlo-

- vaya ese carácter tuyo me encanta - sonríe empezando a acariciar de forma suave su mejilla-

- y-ya tranquilo -aparta la mano de Paradex- aún así no creó que sea buena idea de que vengas, tú no sabes sobre nuestras costumbres y no creó que haya tiempo para enseñarte las -

- ¿Te olvidas que llevo mucho tiempo observandote? Pues también en estas fechas y se perfectamente que debo o puedo hacer -

-se puso nervioso y pensó, ahora no podía decirle que no podría ir así que - esta bien pero no hagas nada que llame la atención -le advirtió-

-si éso te hace felíz y te hace poner esa bella sonrisa con gusto lo aceptó -

-no puede evitar darle una sonrisa ante éso- bien vamos -justo cuando voltea ve a Astrid a lo lejos que estaba entregando algunas armas a sus respectivos dueños- y en silencio -toma la mano de Paradex para empezar a escabullirse sin ser notado, en éso era un maestro pero estaba nervioso porqué ahora debía también esconder a su "amigo humano"-

- el dragón ahora humano se dejo llevar puesto le gustaba que su Hipo tomará su mano, no cómo el quería que fuera pero con éso le bastaba para poder estar tranquilo- y así mira lo que te tengo -le muestra unos pescados que tenía en su otra mano al parecer por estar concentrado en otras cosas Hipo no se fijo en ese detalle cuando lo vio- ahí suficiente para ambos -

- gracias Paradex -

- no agradezcas que es mi deber mantenerte con el estómago llenó -

-por un momento Hipo se puso rojo por el gestó y que su mente lo había tomado del doble sentido- solo vamos rápido -

Una vez llegaron a la casa de Hipo este pudo estar más tranquilo y sobre todo porqué su padre no estaba ya que debía organizar los últimos preparativos para el invierno que recién estaba comenzando, este tenía frío y empezó a flotar sus manos en busca de darse calor así mismo pero al parecer no servía de mucho se hacía más tarde y no podía encender la chimenea, entonces siente como lo envuelven unas alas negras, ve atrás de reojo dándose cuenta que Paradex volvió a su forma original para darle calor corporal haciendo que este sin poder si quiera evitarlo se sonrojarse.

- quiero calentar tu cuerpo con él mío -le mira el dragón que Hipo pudo apreciar en ella un tipo de ternura y a la vez de tranquilidad cosa que había echó que se tranquilice- no tengas miedo de mi -

-ve por la ventana un momento ya era de noche y su padre no había vuelto aún así que supuso que se quedaría a dormir en la casa de su mejor amigo Bocón- ¿Uh? -ve que en la pata del dragón había un pescado en una vara-

- cocina lo si quieres -dio su intentó de sonrisa haciendo que Hipo soltara una pequeña risa y antes de darse cuenta Paradex había encendido la chimenea con su fuego-

- gracias -empezó a cocinar el pescado, si tal vez afuera hubiera un frío prácticamente de muerte pero el se sentía calido, no sólo por el fuego si no por el noble y a la vez intencionado gesto del dragón, hacía que se sintiera amado, querido y deseado, debía admitir que tal vez no fue tan malo que el dragón viniera para quedarse en ésa época aunque tendría que convencer a su padre de que si se podía quedar lo que de seguro aceptaría ya que lo veía muy poco, pero éso no le importaba en ése momento ya que en ese agradable momento solo existían ellos dos y nadie más, ya con el estómago llenó por el pescado y con el cansancio que sentía, con la calidez que transmitía el cuerpo del de escamas negras no pudo evitar acurrucarse contra el mismo para dormir más tranquilo-

- Feliz Snoggletog Hipo -fue lo último que escucho del Furia Nocturna antes de dormir entre sus patas, Paradex no podía estar más felíz su Hipo estaba empezando a aceptarlo más en su vida, había dado otro pasó en su ya no tan largo caminó hacía el corazón de ese humano que se creía vikingo y éso le llenaba de dicha el alma, se acomodó un poco para después dormir a su lado para compartir sus sueños con una sonrisa más normal y relajada en su hocico, sin duda esa época era ahora su favorita.

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Bueno fue todo, gracias por leer, darle estrella y comentar, pasenla bien con sus seres queridos, compartan la historia si quieren y sin más hasta la próxima.