Estudio de fotografía de Jennie -
A la mañana del 1° partido de Jisoo.─¡JACOB! ¿SE PUEDE SABER QUÉ HACE ESTA LUZ AQUÍ? NECESITO EL OTRO LED. LO HE REPETIDO 20 VECES. ¡GEORGE! ¿CUÁNTO VAS A TARDAR EN TRAERME LO QUE PEDÍ? ─Definitivamente no era un buen día para ser empleado de Jennie Kim.
Llevaba horas tratando mal a todo el mundo. Cadetes, ayudantes, técnicos, publicistas, modelos, representantes, nadie se salvaba.
─Hay bandera roja, el mar está picado ─anunciaba Jacob por lo bajo a Jeongyeon, que venía entrando al lugar de trabajo de su amiga.
─¿Cuáles son las posibilidades de que cambie de color a lo largo del día? ─Preguntó la pelicorta.
─Casi nulas. Muchas posibilidades de tormenta durante la tarde ─respondió el secretario de Jennie en clave.
─¿Hora aproximada del cambio de color? ─Preguntó la pelicorta.
─Desde ayer a la mañana ─anunciaba Jacob mientras ambos miraban como Jennie rompía en la cara de una modelo una foto, y la joven salía corriendo en dirección al baño.
─Jeongyeon, trata de hacer algo, por favor ─le rogaba el asistente─ Todavía nos quedan muchas horas de trabajo y tiene a todo el staff temblando ─señaló a su alrededor.
Literalmente había un pasante que estaba llorando solo porque Jennie le dijo inútil.
─Voy a ver que puedo hacer. No por nada esa mujer fue capitana de cheerleaders, ¿sabes? ─La pelicorta sabía lo perra que podía ser Jennie cuando quería.
Con total seguridad fue hasta donde se encontraba la castaña, la agarró del brazo y la arrastró hasta la oficina privada de la misma.
─Pero... ¿QUÉ DEMONIOS? JEONGYEON, ¿QUÉ HACES? DÉJAME ─se quejaba sorprendida por la repentina aparición de su amiga en el estudio.
─Ya deja de gritar ─le dijo la abogada mientras entraba a la oficina y cerraba la puerta─ Jennie, te conozco desde aquella vez en el jardín de infantes, cuando las dos hicimos llorar a un niño para que se largara de los columpios. Sé que algo está pasando, así que vamos, dilo ─presionó Jeongyeon.
─Mi problema es que estoy rodeada de incompetentes. Ese es mi único problema... A propósito, ¿qué haces aquí? ─Preguntó tratando de esquivar el tema.
─Primero, te recuerdo que soy tu asesora legal, por lo tanto reviso todos tus contratos, y por lo tanto sabía que hoy era la prueba de las modelos para Sport Illustrated. No me lo iba a perder por nada. Y segundo, no me vengas con que no te pasa nada, porque tu "problema" ─le dijo su amiga gesticulando con sus manos las comillas─ tiene nombre y apellido. Bae Kim Jisoo, ¿te suena?─ Preguntó irónicamentes─ Así que te lo advierto Jen, o abres tu boca ahora, o me voy a ver obligada a llamar a Momo. ¿Quieres eso? Sabes que ella te va a sacar las palabras como sea, tortuga ─amenazó Jeongyeon.
─Tú llamas a Momorí y yo le cuento lo que estás haciendo aquí ─contraatacó Jennie haciendo una mueca burlona.
─Jajajaja no me hagas reír. Momorí me pidió que sacara fotos y que le pidiera a Irina Shayk que me firme un pecho ─explicó como si nada la pelicorta─ ¿No vas a hablar? Bueno, tú te lo buscaste ─agarró su celular y apretó el contacto número uno de su lista de 'emergencias'.
─Corta esa bendita llamada ya mismo, ¿quieres? ─Jennie trató de sacarle el móvil pero Jeongyeon fue más rápida.
─Hola Momorí... Espera un segundo amor ─miró a Jennie─ ¿Cambiaste de opinión? ─Preguntó a la fotógrafa.
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El efecto Kim (Jensoo).
Fiksi PenggemarBae Kim Jisoo es una aclamada jugadora de básquet en Londres, hasta que es elegida para jugar en la WNBA. Con un pasado negro y su fama de mujeriega irrumpe en New York sin saber que un encontronazo con una castaña, mandona e idiota le va a cambiar...