Tell me what is love | D.O de EXO (+18)

Capitulo 15

Hoy te sostendré en mis brazos, dándote mi corazón y mi alma

Eres mi todo, para toda la vida.

(For life, EXO)

 Debía estar soñando con los ojos abiertos seguramente, y si no es así, entonces por una noche tenía a Kyungsoo en su cama.

— Amber, antes dijiste que has estado enamorada de mi desde joven, ¿era en serio? — le preguntó, llevando su mano hasta la mejilla de la menor.

Ella asiente.

— Vi Lucky One cuando lo lanzaron. Recuerdo pensar que todos eran guapos, pero después de ver otros videos tú llamaste mi atención de una forma especial... Incluso fui al EXO'rDIUM*

— ¿Estuviste ahí? — le pregunta sorprendido.

— Salí afónica del concierto, grite demasiado para que me vieras... — Kyungsoo rió ante su argumento.

La vida de Amber no siempre fue genial. Su abuela era una buena persona, pero muy estricta con la educación de la niña.

Los ingresos de Jenny mantenían a su hija y a su madre, y les transfería semanalmente, sobre todo para complacer los caprichos de su hija. La abuela mantenía el control sobre el dinero, por lo que lo gastaba en cosas necesarias como la comida, el pago de servicios, la colegiatura de Amber, y no para satisfacer las "boberías" de su nieta.

Por eso, Amber tenía que pensar muy bien que diría para poder obtener efectivo, era seguro que su abuela no le daría dinero para un concierto, y mucho menos sola.

— Abuela, tengo que decirte algo — habló la niña, aprovechando la ocasión tras ver a su abuela muy tranquila en la sala

— Dime

Había ensayado en su habitación, repitió su dialogo muchas veces, practicó las respuestas a posibes preguntas.

— En la escuela llego una feria escolar, y están vendiendo unos libros muy buenos que nos ayudaran durante todo el progreso de la primaria. Todos ya los están comprando, y creo que de verdad me ayudarían...

— ¿Feria escolar? ¿Casi cerrando el año?

— Por eso están en el instituto, se aseguran que todos los niños los tengan

— ¿Y cuanto cuestan?

— 500 dólares

Los ojos de la abuela se abrieron ampliamente. Amber no comprendía el alboroto, las entradas regulares costaban 250 dólares, pero necesitaba dinero extra para el taxi.

— ¿Tanto por unos libros?

— Servirán para toda la primaria, es una buena inversión.

Y sin dudas lo fue, Amber logro asistir al concierto sin problemas. Vivió la mejor experiencia de su vida, escuchando la música que le gustaba, admirando cada coreografía, sintiéndose fascinada por toda la escenografía y efectos especiales, EXO le estaba suministrando su dosis de felicidad, y al ver a Kyungsoo cantar, su corazón confirmo lo que siempre imagino.

El era un ser perfecto en todos sus ámbitos, y seria la mujer más feliz del mundo a su ladeo.

— Cuando te conocí, no diste indicios de ser fan mía — recordó él. Amber sonrió avergonzada.

— No sé, me daba pena... y odiaba que mi mamá te haya ganado...

Kyungsoo volvió a reírse. Le pareció gracioso ver hasta donde era capaz de llegar aquella niña por intentar conquistarlo, aunque sus intentos fueron de manera equivocada.

— Eras una niña bastante problemática.

Amber no se dignaba a tocar el plato, le prestaba más atención a su celular que a la comida, por mas deliciosa que se viera.

Su madre le lanzaba algunas miradas para comprobar que su hija estuviera comiendo, pero no era asi.

— Amber, cariño. — le decía su madre — ¿No quieres probar lo que Kyungsoo preparo para ti? El sabe lo mucho que te gusta la comida picante...

La niña finalmente subió su mirada indiferente hacia los mayores, Kyungsoo sonrió pensando que le daría una oportunidad, pero lo que hizo despues lo desconcertó.

Ella deslizo el plato, y todo su contenido quedo en el suelo. Jenny la miró atónita, segundos después comenzó a enojarse.

— ¡Amber! ¡¿Por qué hiciste eso?! — le reclamó.

Amber le dirigió una mirada indiferente, primero a ella y luego a Kyungsoo, que seguía sin poder creer la acción de su hijastra.

— Dile a tu esposo que nada podrá hacer para que sea su amiga, y mucho menos su hija.

Amber se sonrojó a más no poder. No hubiera hecho todo eso si supiera que el día que Kyungsoo la mirara con otros ojos llegaría.

— Tengo tanto sueño, pero no quiero dormir — declaró Amber, hundiendo su rostro en el cuello de Kyungsoo.

— No te duermas aún — pidió Kyungsoo. Incluso él quería que esa noche durara un poco más. — Estemos despiertos un rato.

— Canta para que no me duerma — le sugirió.

En realidad, solo quería que Kyungsoo le cantara, amaba escucharlo.

— ¿Eso funcionara? — preguntó incredulo.

— Si — asintió. Él le sonríe.

— Bien. ¿Qué quieres escuchar?

— Lo que sea, solo quiero escucharte — decía ella mientras jugaba con su cabello.

Su voz retumbó en sus oídos, dulce, cálido.

Hoy te sostendré en mis brazos, dándote mi corazón y mi alma

Eres mi todo para toda la vida.

Incluso mil palabras no son suficientes

Para decirte que si naciera de nuevo, tienes que ser tú

Solo quiero mirarte durante toda mi vida

Sé que no todo será fácil pero voy a protegerte toda la vida

Este amor no terminara nunca

Esa era una de sus canciones favoritas. Amber recuerda haberla escuchado por primera vez en navidad, se había olvidado que estaba en medio de familiares obsequiando regalos, bailando al ritmo de las canciones viejas de la radio, y de la comida echando vapor en la mesa

For Life era el mejor regalo que pudo recibir.

Se apoyó sobre el pecho de Kyungsoo, enredando sus piernas con las de él. Le dio escalofríos cuando su rodilla chocó con el pene del mayor, pero éste pareció no asustarse, así que Amber siguió frotando su rodilla sobre su miembro.

Kyungsoo la recompensó con caricias en su rostro. Amber cerró los ojos e inclinó su cabeza para sentir mejor sus caricias, cuando su pulgar se desplazó hasta rozar sus labios, Amber los abrió y dejó que el dedo del hombre entrara en su boca para comenzar a acariciarlo con su lengua.

La miraba con deseo, y ella lo notó. Le dio una última lamida antes de juntar sus labios con los de Kyungsoo, utilizando sus lenguas para hacer más intensa la situación, las manos del mayor se escabulleron por todo su cuerpo, tocando cada parte de ella.

— Kyung, ¿me quieres? — le pregunta una vez que separaron sus labios.

El mayor la miró a los ojos antes de besarla con ternura. Lo siguiente que Amber escuchó le había sacado lágrimas de felicidad.

— Te amo.