Capitulo XIII: Menta.

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Jungkook se encontraba caminando por las calles de Seúl. Las personas corrian por refugio mientras la lluvia caía lentamente, empapando al chico por completo. La lluvia estaba tibia contrastando con la fría preocupación que tenía por encontrar a Taehyung. La calle oscura iluminándose más y más por las luces neón que provenían de aquél bar en la esquina. Con cada paso que daba podría escuchar los gritos, voces maldiciendo, los sollozos de dolor, las risas y una fuerte música que retumbaba fuertemente en su cabeza y parecía no tener fin.  El chico seguia pensando que era mala idea caminar por este lugar, sabiendo que el no era la persona mas fuerte, pero el tenia que encontrar a Taehyung. habia algo que le estaba llamando diciendole que tenía que hablar con el antes de que fuera tarde. Su mente estaba cegada por la necesidad de estar con taehyung, al punto de que no le importaba si algo le sucedía el día de hoy.  Jungkook apenas podia pasar entre la multitud, personas bailando al ritmo de la musica, cuerpo contra cuerpo en lo que parecia un desenfreno de hormonas y banalidad, el olor a alcohol y putrefaccion, la audacia de las personas, todo era abrumador. Mas que personas parecian animales tratantando de saciar sus ansias de trivialismo.
Todos sus esfuerzos dieron fruto cuando por fin llego a la barra. Un chico de cabello rubio descolorido se acerco a el con una sonrisa coqueta.
-¿Te puedo ayudar en algo?- El chico se acerco lentamente, tenia un acento muy marcado, casi atractivo.
-Hm, estoy buscando a alguien.- Jungkook trato de decir por encima de la música.
-Tienes que ser más específico.- el rubio agarro uno de los vasos y empezó a verter el contenido de una botella en un vaso que parecía que nunca se había lavado antes. -Aquí vienen muchas personas, algunos solo para pasarla bien, otras solo para escapar de sus vidas y otros para tu sabes, se lo dejo a tu imaginación. - termino de hacer la bebida y se la paso a Jungkook. -Aquí tienes, considéralo un regalo.-
-¿Que es?- la bebida era de color naranjoso y tenia un olor muy fuerte.
-Se llama knock down, te sugiero que te lo tomes de un trago.-
-Siento que si lo hago voy a morir.-
-Esa es la idea baby doll.-
Jungkook cerro los ojos y de un solo trago se tomo el cocktail. La sensación era asquerosa, sentía que su garganta quemaba y un escalofrío recorrió todo su cuerpo. Sentío que se había desconectado del mundo por unos segundos.
-Joder. Eso fue...-
-¿Como un knock down? Creo que esa era la idea.-
-Taehyung.-
-¿Disculpa?-
-La persona que busco se llama Taehyung.-
-¿Apellido? Conozco al menos 10.-
-Kim.- la cabeza de jungkook palpitaba fuertemente ¿Que coño tenia ese trago?-
-¿Kim Taehyung? Va a SNU?- Jungkook solo asintió.-¿Que eres? ¿Uno de sus admiradores?-
-¿Que? ¡No! Soy... - El chico pauso por un segundo, no sabia cual era el estatus, eran amigos o algo mas de eso. No lo sabia. -Somos amigos.-
-Amigos, ya veo. ¿Y viniste hasta la parte mas peligrosa de la ciudad para buscar a tu amigo?- el rubio torcio los ojos.- Mira pretty, estas en un bar de mal muerte, en la mitad de una alcantarilla. Te sugiero que vayas a casa y hables con el mañana.-
-Necesito verlo ahora.-
-¿Por que tan desesperado?
-Algo me dice que necesito encontrarlo hoy.-
-Ya veo. Pues aquí no esta, el no viene los martes para acá. Solo viene los días que hay presentaciones.- Cualquiera diría que el tono del rubio reflejaba que estaba irritado, pero le parecía más interesante el chico que estaba al frente de el.
-¿Como se que no me mientes?.-
-No tienes nada que perder.-
-Acompáñame hasta afuera entonces.- dijo Jungkook, en este punto le daba mas miedo salir por esa puerta que quedarse adentro.
-Creo que no te diste cuenta que estoy trabajando.-
-¡Por favor!-
-Solo sal por esa puerta y vas a estar bien, mas peligro corres estando aquí sentado.- el rubio le revolvió el cabello.
-Gracias por lo que sea que fuera lo que tome.-
-Un placer. No vuelvas, es por tu bien.-
-No eres un buen anfitrión.-
-No, pero al menos soy una persona decente.- Jungkook solto una pequeña risa.- Antes de que te vayas, dime tu nombre.-
-¿El mio? Kook.-
-Chan.- dijo el rubio. Jungkook solo sonrío y trato caminar entre la multitud.
Cuando Jungkook salió del club, sintió un golpe de brisa helada recorriendo su cuerpo y pequeñas gotas de lluvia enfriando su piel. Empezó a caminar de vuelta a la ciudad, las luces de aquel bulevar haciéndose más y más tenues para ser intercambiadas con los focos regulares de la calle. Su cuerpo se sentía pesado con cada paso que daba, su cabeza casi explotando de lo mucho que le dolía, tenía demasiados pensamientos en su mente. No queriendo volver a sus viejos hábitos, saco un chicle de menta y empezó a masticarlo, tratando de calmar la ansiedad que sentía. Que imbecil era por creerle a Jung, imbecil por creerle a el chico del bar, imbecil por ir a un bar de mala muerte a estas horas, imbecil por pensar que si iba hasta allá Taehyung lo perdonaría, imbecil por dudar en Taehyung.

Se que no casi nadie lee este libro, pero quería disculparme por no publicar en un tiempo tan largo, la verdad es que me mude sola y entre el trabajo y la universidad no tengo tiempo para hacer nada. Gracias por entender y si alguna vez necesitan hablar con alguien, mis dms siempre están abiertos.—

Again | taekook fanficDonde viven las historias. Descúbrelo ahora