♪ S y m p h o n y ♪ - YoonTae

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-canción en multimedia-

Todos estaban preparándose, nervios y desesperación era lo único que se veía en el gran salón.

Taehyung estaba en un constante inhalar y exhalar para controlarse. El día del evento había llegado, y sería su primera presentación con un público grande, todo tenía que salir bien —al menos por su parte—.

—Lo harás bien, Tae, confía en ti. —le dijo Jimin.

—¿Ya llegó Yoongi?

—No, Nam me dijo que venían en camino.

—Faltan 4 actos antes del tuyo, tranquilo.

—Yo... no puedo, el pensar que papá estará ahí, me pone más nervioso.

—Practicaste una y otra vez, además eres muy bueno con el piano, deja de dudar de ti, ¿está bien? —lo animó, y el pelinegro asintió.

—¡Llegamos! —gritó Namjoon.

—¡Amor! —secundó Jimin, yendo hacia su novio.

—Tae... -dijo Yoongi detrás del pelinegro, mientras posaba una de sus manos en el hombro de éste, y recargaba su barbilla en el otro hombro.

Taehyung sentía el aliento cálido de Yoongi en su cuello, y eso hacía su piel erizar.

—Perdón por llegar tarde, pero tenía que pasar por algo primero.

—¿Qué cosa? —preguntó con su cabeza al frente.

Yoongi alzó su otra mano y apoyó un ramo de flores en el pecho del menor.

—Son para ti. —dijo con una sonrisa.

—Yo... gracias, huelen muy bien.

Yoongi notaba tenso a Taehyung, así que se separó de él y lo volteó para estar de frente.

—¿Pasa algo, bebé?

—Sólo... estoy muy nervioso.

—Eres un excelente pianista, Taehyung, estoy seguro de que lo harás maravilloso.

—¿Qué pasa si lo hago mal? —preguntó, mordiéndose el labio inferior.

—De ser así, está bien, todos cometemos errores, sólo hay que seguir adelante, ¿sí? Al igual que está bien sentirse nervioso, pero no dejes que eso te domine. Nunca.

—Y ¿qué pasa si no puedo seguir? ¿si se me olvidan las notas y me quedo en blanco?

—Estaré ahí para salvarte. —le animó, perdiéndose en los lindos ojos del chico que hacía su corazón acelerar. —Aunque no hará falta porque eres muy bueno recordando. —sonrió en grande.

—Está bien, yo... estoy listo. —también sonrió.

—Pues qué bueno, porque es tu turno. -anunció Jimin y su sonrisa se convirtió en una de nervios.

—¿Qué?

—Andando. —lo encaminó hacia el piano.

—Te veré desde abajo, ¡lo harás bien! —le gritó el mayor antes de bajar detrás del escenario.

El telón seguía cerrado, esperando la señal para ser abierto. Taehyung sólo tenía que empezar a tocar el piano para que esto pasara, pero estaba demorando un poco.

Yoongi, desde abajo, se sentía igual de nervioso, esperando a que el telón fuera apartado para así ver a Taehyung tocar. Entendía cómo se sentía el menor, pues también cantaría.