Capítulo 6, James Sirius Potter

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Había llegado ya Febrero, al pequeño James le quedaban días para nacer. Ginny tenía la tripa muy hinchada, y a Hermione ya se le notaba un pco más. Desde que la Sra. Weasley se enteró de la noticia, no para de ofrecer cosas a Hermione, comida, ropa, asilo, ella quería que la pareja se quedase en La Madriguera todos los días, pero Hermione solo quería estar en casa.
- Hola Sra. Weasley, ¿Qué tal está?
- ¿Qué? Oh si, hola Hermione. Pues mira, la verdad es que bastante nerviosa e inquieta. Ya sabes, ahora que va a nacer el primer hijo de mi niña. Qué mayores os habéis hecho ya...
- Lo sé Sra. Weasley, la primera vez que la vi, solo tenía 12 años, ahora ya tengo muchos más.
De pronto, Ron entró como una exhalación al lugar donde Hermione y la Sra. Weasley estaban.
- Mamá, Hermione, ¡Tenemos que ir al hospital ya! Me ha llamado Harry y me ha dicho que Ginny a roto aguas.
Hermione y la Sra. Weasley soltaron un grito de alegría y rápidamente fueron a buscar al padre de Ron.
- Arthur date prisa, necesitamos el nuevo coche que compramos. ¡Rápido!
En menos de lo que canta un gallo llegaron a San Mungo, entraron a la habitación en la que estaba Ginny y allí la vieron, sonriendo, con su pequeño bebé, sin duda había sido un parto muy rápido.
- Ooh, ¡Felicidades Gin!
- Felicidades hermanita.
- Enhorabuena hija, estoy segura de que seréis muy felices con James.- Ginny, que estaba tumbada en la cama, solo pudo decir gracias, estaba realmente exhausta, pese a que había sido un parto rápido, ella lo había sufrido.
Ya habían pasado dos semanas y el pequeño James era igual que su padre y su abuelo. Harry y Ginny estaban muy felices.
Ron y Hermione les regalaron una cuna preciosa y varios paquetes de pañales, ya que, el pequeño James, no hacía otra cosa mas que cagar.

Ron Y Hermione, la historia tras la batallaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora