Casualidad

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Mientras que Steve trataba de encontrar a la deidad que lo salvaría en aquella sala de espera, no sabia que es lo que pasaría ahora, aunque su principal preocupación era el que Loki se encontrara bien, tampoco ser arrollado por un auto significaba el tener solo rasguños ligeros, mas si se trataba de una patrulla a velocidad considerable, al fin recibió la aprobación para entrar y solo pudo encontrarse a Loki postrado en aquella cama y un enorme yeso en la pierna que empezaba de la rodilla y terminaba en el tobillo

-Grandioso, no era suficiente el que me pasara esto, ahora tu te vas a burlar de mi no es cierto...- escupio Loki mientras taraba de que su furia no lo hiciera explotar

-Loki, yo no tengo por qué burlarme, en primer lugar que haría burlándome de ti, ni siquiera ganaría algo, en realidad yo tengo algo más que decirte además de asegurarme de que estuvieras bien...- Steve trato de hablar lo más tranquilo y cuidadoso posible, o si no perdería al menos una de sus extremidades en ese lugar –Anthony me dijo que quiere que yo vaya a parís con el, estaba a punto de decirlo por teléfono pero no había la oportunidad y...-

-MALDITA SEA ROGERS!!!!!, como, no puede, pero, tú lo planeaste, planeaste todo esto y al final terminaste como la blanca palomita mientras a mí se me pudre el trasero en esta cama de hospital no es así-

-Pero no tenía más opción Loki, tu más que nadie conoce a Tony- Trataba de hablar sin que sonara a suplica pero era algo prácticamente imposible

-Oh cielos, no puede ser, no tenías elección, no me importa si iba a asesinarte con uno de esos tacones Jimmy Choo debiste decir no- mientras Loki mordía aquella sábana blanca su atención fue desviada hacia uno de los enfermeros quien le llevo al asistente herido una bandeja de comida, su estómago rugió mientras que comenzaba a salivar rápidamente, al fin comería comida de verdad, aun con ira tomo un budín y lo destapo para sentir el aroma delicioso a chocolate y con una cuchara comenzaba a comer mientras que daba enormes mordidas a rodajas de pan que había junto a eso –Sabes que es lo que mas me molesta, toda esa ropa, todo eso que te darán, tu eres enorme y estas gordo maldita sea, no tendras en donde lucirlos, no es justo -dijo de forma tan lastimosa que parecía un cachorro después de ser regañado junto al he hola de que su boca estaba llena con pan y budín- pero fue tan fácil para ti pretender y decir "oh cielos yo soy mas que la ropa que uso", no es mas que basura, te vendiste Steven Rogers, vendiste tu alma desde el primer momento que te pusiste esos mocasines-

-Pero Loki yo...- Algo en el pecho de Steve calaba, no era como que Loki fuese el mejor compañero, pero el mismo había visto cuanto se había matado para conseguir aquella talla, y aunque era casi mortal, pensaba que realmente lo había herido

-Largate quieres, déjame en paz...- hablaba su compañero mientras que entre llanto e ira seguía devorando una gelatina como si fuera el alma de algun desdichado

Steve salio de la sala mientras que sentía pesado su pecho, era la primera vez que le pasaba todo esto y no sabia de cierta forma como manejarlo, es claro que en algun momento de la vida todos debemos de afrontar esta clase de dificultades, pero al menos para el era como que todas las lecciones de vida glamurosa fueran diez en una, como manejar cosas asi, tan inmerso iba que choco contra alguien que se dirigía a toda prisa quien también estaba completamente perdido en su mente, Steve levanto la vista y allí descubrió una cara muy familiar

-¿Thor, que es lo que haces aquí?- Pregunto mientras seguía con un pequeño dolor de cabeza y sentimientos encontrados

-Vine a ver como se encuentra un chico que atropelle, él es delgado, tiene el cabello largo, piel blanca, intento apuñalarme cuando lo cargue al traerlo en la patrulla, y mi deber es hacer lo correcto y saber cómo se encuentra, si no fuera porque mi navaja tiene un seguro especial posiblemente estaría en una de estas camas ahora mismo- Rio animado mientras llevaba un oso de peluche, varias cajas de chocolates y parecía que llevaba un marcador para escribir en el yeso

-De casualidad, aquella persona que estas por visitar no está en esa habitación...- Volteo Steve casi como si tuviera un fantasma tras él, y justamente Loki se encontraba caminando en muletas fuera de la habitación

-Oh mira es el, lo siento capitán pero debo de asegurarme de que todo esté bien, nos vemos luego, OYE TU, NO DEBES DE ESTAR FUERA DE CAMA, DEBES DESCANSAR- Grito Thor mientras que corría en dirección a Loki y dos enfermeras que estaban en ese pasillo le decían que bajara la voz y se calmara tratando de no lanzarle nada por el escándalo que hacia...

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Mientras se encontraban en el Jet privado de la empresa Steve veía por la ventana mientras que aun parecía completamente afectado por lo que había pasado esa mañana, ni siquiera se había imaginado el ir a parís a el evento más grandes de moda, MODA, por dios el simplemente estaba bien con una camisa a botones sencilla, pantalones cómodos y algunos zapatos a juego, parte de el lo hacían sentirse como si fuera una especie de Frankenstein del estilo, no era incomodo pero aun parecía como si realmente fuera un zombie...

-Deja de pensar demasiado- La profunda voz de Tony resonó mientras que Steve casi escupe todo, fue tomado completamente por sorpresa –Te pones a pensar en el resultado de los demás, que es lo que ganas, las decisiones no se toman en base a cuantas personas vas a herir, ninguno de nosotros es un hombre de hierro y aunque sea uno de mis celebres nombres, tampoco significa que no sienta, despierta Steven, una cara larga jamás va a conducirte al éxito, y si una pequeña parte de ti cree que sentir pena por los demás te hace mas humano estas equivocado, aun que Loki fuese mi primer alternativa tu terminaste en ser seleccionado al final, asi que respira profundo y trata de imaginarte rodeado de miles de editores y periodistas internacionalmente m importantes, y que te quede algo claro, la casualidad no existe...

El Diablo Viste a la ModaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora