Crystalcelf.

Impredecible.

El conducto de ventilación se desprende y caigo yo con el, consigo salir del conducto y veo al señor ese raro mirándome como si fuese mi madre y estuviera decepcionado. Pienso en lo que me dijo mi padre y aunque tengo muchas preguntas decido irme.

-¡Buenas tardes! -Le digo como si no pasara nada y me dirijo a la puerta de la habitación.

-¡Espera! -Me dice pensativo como si se le acabase de ocurrir una idea.

-Em...¿Que?

-¿Te han pinchado? -Me dice pensativo.

-No. ¿Cómo sabes tú eso?

-Porque... se suponía que lo tenían que hacer.

-Pues al final han cambiado de opinión. -Le digo- Ahora, si no le importa deseo marcharme.

-No. Si no te han pinchado, ¿aún recuerdas todo y no te han hecho un lavado de mente?

-Supongo. ¿Por qué dices eso?

-Por una cosa, pero....¿Por qué sigues aquí? -Pregunta.

-Deseo irme pero no se cómo.-Respondo.

-Te puedo ayudar a salir de aquí, solo me tienes que prometer tu fidelidad. Tú puedes cambiarlo, eres el hijo de un 'gran' miembro de Crystalcelf.

-Si tu lo dices...Vale. ¿Qué vamos a hacer?

-A ver... Supuestamente, si yo te entregaba aquí, me dejarían estar aquí.

-¡¿Y para que quieres estar aquí?! -Le pregunto asombrado.

-Para tener un enlace con el sistema de datos de Crystalcelf...soy como un espía...

-¿Quienes sois? ¿Vanessa también está metida en esto no?

-Me llamo Klaus, y pronto conocerás a los demás. Te puedo llevar con ellos, solo tienes que seguirme y hacer todo lo que te diga.

-Vale. -Digo con seguridad.

Salimos por la puerta, mi habitación está a dos de la suya, entonces aparece mi padre pero me meto en el ascensor y no me ve. Klaus pulsa el botón del aparcamiento y se queda recto mirando a la puerta del ascensor sin hablar. Me imagino la cara de mi padre cuando vea que no estoy en mi habitación, pensará que he atravesado la puerta o algo, porque me había encerrado con llave. Llegamos al aparcamiento y le sigo hasta su coche, nos metemos en él y vamos hacia la salida. De repente, un hombre se acerca y empieza a dispararnos como un psicópata. Klaus sale del coche como si las balas fuesen de corcho o algo y el hombre se queda hablando con el durante un rato, puedo ver el dedo del hombre sobre el gatillo y sin pensar en ninguna estrategia, salgo del coche e intento acercarme a él sin que se de cuenta, pero no consigo lograrlo. Apunta el arma hacia mí y cuando está a punto de dispararme, Klaus se pone por en medio y recibe la bala que iba a matarme, me lanzo contra el hombre y le parto el cuello. Klaus se levanta del suelo como si no hubiese pasado nada y se me pone a gritar como un desequilibrado, nos metemos en el coche. Salimos del aparcamiento y nos metemos en la autovía S Dixie Hwy en dirección a Miami. Me sorprende que las calles estén desiertas.

No me lo acabo de creer, acabo de matar a un hombre, soy muy impredecible últimamente, y ahora mismo estoy subido en el coche de un extraño que apenas conozco y confío en el como si fuera mi mejor amigo.

Llegamos a Miami, exactamente a NW 2nd Avenue y nos metemos en el hotel Beachside: Resort & Conference. Llegamos a una habitación y tocamos a la puerta. Un chico de mi edad aproximádamente nos deja pasar. La habitación es grande y hay 2 literas, en una cama está tumbada una chica un poco más mayor que yo y en la de abajo está sentado un chico un poco más pequeño que yo. Klaus me indica que está va a ser nuestra habitación y que si necesitamos algo que vayamos a la de al lado, donde está él con un grupo de adultos, se ve que todo este piso está reservado para nuestro "grupo de rebeliones". Klaus se marcha y nos deja solos.

-Me llamo Katherine, Kate para los amigos. -Dice la chica que está tumbada, tiene el pelo moreno y es bastante delgada y seria, parece muy segura de sí misma cuando habla.

-Yo soy Elijah.-Dice el chico que me abrió la puerta, tiene el pelo castaño y tiene mucho músculo.

-Mi nombre es Tobias- Dice un chico tímido con pelo negro.

-Yo soy Ezra. Encantado. -Digo.

Después de nuestras tímidas presentaciones, nos vamos directamente a dormir a la cama. Odio eso de dormir cerca de gente que no conozco, no quiero respirar muy fuerte para no molestar, ya que quiero llevarme bien con ellos así que tengo que ahogarme durante momentos y eso que estoy congestionado. Quiero ver ya a mis amigos, no paro de pensar en lo que les puede estar pasando en este momento, es que como si faltase una parte de mi, una parte muy importante. Ojalá supiera lo que está haciendo Crystalcelf y porqué no hay nadie por las calles. Quiero saber muchas cosas y eso me pone muy nervioso.

De repente, se oyen varios gritos procedentes de una habitación cercana, Tobias, Elijah, Kate y yo nos alertamos y nos asomamos por la puerta. Entonces aparece un señor gateando lleno de sangre al que le falta una pierna y nos grita:

-¡Quedaros ahí! ¡No salgáis!