Resident Evil Devil May Cry

Prólogo

Dante.
Un mercenario-cazademonios, hijo de Sparda, un demonio, y de Eva, una humana. Eso le convertía en un semi-demonio.
Dante se dedicaba a eliminar demonios y demás criaturas infernales que habían aparecido en el mundo de los humanos. Tenía una agencia de cazarrecompensas llamada Devil May Cry, el local donde vivía.
No comía nada que no fuera pizza o helados de fresas con nata.
Últimamente Dante no tenía ningún trabajo, por lo que se había quedado casi sin dinero.
-Tengo un trabajo para ti. En Racoon City.- Dijo J. D. Morrison, entrando en el establecimiento.
Como siempre, el local estaba hecho un desastre. Había cajas de pizza y latas vacías por todas partes.
Dante estaba tumbado en su silla, detrás del escritorio, como en todas las ocasiones en que Morrison le visitaba. Ni siquiera hizo el esfuerzo de levantar la mirada y por lo menos fingir que le estaba escuchando.
-¿Y a mí qué me cuentas? Que lo tengas no significa que lo vaya a aceptar.
Por fin se había dignado a contestar, y tenía que dar esa respuesta.
-Quizá sea uno de los tuyos. ¡Y aún te quedan muchas deudas que pagar, así que aunque no lo sea, vas a levantarte de esa silla y mover el culo hasta esa ciudad!
-Está bien, no pierdas la calma. ¿De qué se trata?
-Ataques caníbales. Pero no son sólo simples mordiscos. Se han encontrado cadáveres realmente destrozados, con marcas de dientes humanos, en los alrededores de las Montañas Arklay. Podría ser que algún demonio haya aparecido por allí, ya sabes. No creo que una persona normal pudiera llegar a hacer eso. Y...
El timbre del teléfono interrumpió a Morrison, y este esperó a que Dante contestara.
-Devil May Cry.
Tras unos minutos de silencio, cuando Morrison comezaba a impacientarse, él dijo:
-Lo siento, cerramos a las nueve-, y colgó.
-Como estaba diciendo- dijo Morrison, antes de que Dante pudiera decir nada -te he conseguido un trabajo en los STARS,un grupo militar, las fuerzas especiales de la policía de Racoon City, usando tu nombre de Tony Redgrave, para que puedas investigar tranquilamente sin que te molesten. No uses tu verdadero nombre. No desveles tus..."habilidades". Y no lleves a nadie contigo.