Privilegiada

La llamada

Después de dar el vistazo a la empresa y quedar en mejores términos con Will, mi padre nos llamó para volver a la mansión, sin embargo no podía dejar de pensar en el tatuaje que llevaba Will en su muñeca. Se me hacía demasiado familiar, pero no entendia el por qué, estoy segura de haberlo visto antes... ¿pero... dónde?

Una llamada me sacó de mis pensamientos, era lorena. Una de mis mejores amigas, no he hablado en persona con ella desde que nos graduamos de la escuela pero seguimos muy en contacto por las redes.

-¡¡¡Saaaaaal!!! ¿Cómo vas?, ¿cómo has estado chica? Ya me han contado de tus regalos de cumple. ¿Los estas disfrutando?

-Hola Loreeeee, la verdad es que la estoy pasando muy bien con Alex y mi padre aqui... Desearía tenerlos a ti y a Theo aqui conmigo.

-Tranquila, apenas nos graduemos de la U nos veremos ¿no? Y hablando de Theo el esta aqui conmi-

-HOLAAAAAAA-theo interrumpe a Lorena- Sal, diva, ¿cómo has estado? ¿Hay chicos lindos en Colombia?

-Tu siempre pensando en macho, Theo

-Jajaja, me conoces bebe. Dime, ¿ya te lanzaste a un colombiano o colombiana? ¿O vas a seguir diciendo que no hay tiempo para eso?

-Bueno, sigo creyendo que no hay tiempo, pero conocí a un chico bastante... sugerente

-Wow, ¿es tan difícil de explicar?

-jaja, no es eso, te admito que me cautivó por unos segundos, pero nada más, los chicos no son tan lo mio.

-Bueno chica, si es tan atractivo guardamelo para cuando te visite.

Me despedi de ellos, pero empece a pensar en Will, mas que todo en su extraño tatuaje, pero no podia recordar donde lo habia visto... dicen que cuando dejas de buscar las cosas, las terminas encontrando. Supongo que disfrutare los días que paso aquí. Tal vez el recuerdo llegue solo...